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NACIDO PARA MATAR

RENO - LA CIUDAD PEQUE�A
M�S GRANDE DEL MUNDO

No tengo que preguntarle qu� se siente
ser libre de nuevo, se�ora Brent.

S�, se�or, los lazos del matrimonio
pueden pesar mucho en el alma.

Lo entiendo.
Pero no por mi propia experiencia.

La mujercita y yo
llevamos casados 15 a�os.

Apuesto que sin ninguna mala palabra.

- As� es, sin ninguna.
- Bueno, su esposa es muy afortunada.

- Le digo eso a menudo.
- Estoy segura que s�.

- Adi�s, y gracias por todo.
- Adi�s.

�Abran paso! �Abran paso!

- Ah, no le dimos.
- �S�!

Laury, Laury, eres �nica.
Eres �nica.

Hagamos silencio.
Nos oir�n arriba.

�A qui�n le importa? Me reir�
tan fuerte como quiera en mi casa.

Har� todo el ruido que quiera.

Si mis inquilinos quieren irse,
que se vayan. �A qui�n le importa?

Romeo. Abajo, Romeo.

Abajo.

- �No la ensuci�?
- No, est� bien.

�I quiere a todo el mundo.
Igual que Laury.

Escuchen.

Se�ora Kraft, me gustar�a pagar mi cuenta.
Me ir� en la ma�ana.

Claro. Hoy fue el gran d�a, �no?

- Tome un poco de cerveza.
- No lo creo.

�Por qu� no? Si se alegra por el divorcio,
deber�a celebrar.

Y si est� triste y quiere olvidar,
deber�a celebrar.

- De cualquier manera, deber�a celebrar.
- Aqu� est� su cuenta.

- Gracias. Le dar� un cheque.
- Adelante.

Sally, trae m�s cerveza.

- Qu�date a cenar, Laury.
- No puedo. Tengo una cita.

- �Con qui�n?
- Con Danny Jadden.

- �Ese chico? Cre� que ten�as uno nuevo.
- Lo tengo. Espera a que lo veas.

- Cu�ntame de �l, Laury. �C�mo es?
- Bueno, los hombros son as� de grandes.

Movi� mi ba�l
como si fuera una caja de galletas.

Es callado, pero si te pasas de la raya,
sientes que te tumbar�a los dientes.

Vaya, qu� maravilloso.

Claro que s�.

Yo nunca conoc� un hombre as�.
Mis dos esposos eran idiotas.

- La mayor�a de los hombres lo son.
- Es cierto.

Si tienes un hombre as�,
�por qu� saldr�s con Danny?

Lo hago para molestar al nuevo.
Sabe que estoy loca por �l.

Sabe que me tiene en sus manos.
Entonces debo empezar a preocuparlo.

Es aburrido, pero as�
se maneja a los hombres.

- �No es fr�a?
- Yo no dir�a eso.

- Yo dir�a que est� siendo pr�ctica.
- Se termin� la cerveza.

- �Cu�ntas veces he...?
- Yo tengo suficiente. Ir� por unas.

- No, no se moleste.
- �Segura? Vivo aqu� al lado.

- S�lo tomar� un minuto.
- No. Gracias de todas formas.

Probablemente no la ver�
antes de irme, as� que adi�s.

- Adi�s.
- Adi�s, se�ora Brent.

Adi�s. Y buena suerte con el nuevo.

Gracias.

Sabes, deber�as engordar un poco, Laury.

Est�s tan flaca, que no te pueden
agarrar de ninguna parte.

No he notado que nadie
tenga problemas.

Eres �nica, Laury Palmer.
S� que eres �nica.

NORTHERN CLUB
CERVEZA DE BARRIL

Todos somos buenos jugadores.
Apuesten temprano.

Sigan sus instintos y apuesten mucho.

No hay tiempo de retractarse.
Es hora de ganar.

Cae 31 en el negro.
Pagamos al 31, y pagamos al negro.

Vamos, amigos.
Sigan jugando.

Dejen un poco, tomen un poco.

Vamos, dados.
Sean buenos conmigo.

Siete, impar. Perdi�.
El siguiente tirador.

- Cinco d�lares, se�or.
- Gracias.

Ya va. Un tirador y bueno.

�Qu� har�, ganar o perder?
Hagan sus apuestas.

Apuesten a los dados,
h�ganlo o no.

Ah� van de nuevo. Aqu� va.
Ya va. Hagan sus apuestas.

Apuesten a los dados, gana o pierde.
Aqu� vienen. Ya va.

Ocho es su puntaje.
Ocho ganar�.

�Qu� saldr�,
un gran seis o un gran ocho?

Ocho es el ganador.
Paga la l�nea.

Hagan sus apuestas. Apuesten.
Pasa o no pasa.

Vamos de nuevo, el mismo tirador.
Aqu� va, gana o pierde.

Aqu� va, ya va.
Apuesten a los dados, pasa o no pasa.

Ah� va de nuevo.
El mismo buen tirador. Aqu� va.

Ya va. Apuesten a los dados,
gana o pierde.

Sigan rodando.

�Qu� saldr�, seis, ocho, sale o no?
Ah� van. Eso es.

Cuatro es su puntaje.
Son cuatro.

Cuatro ganar�. �Saldr�, lo sentir�?

Al cuatro.

Cuatro es el ganador.
Paga la l�nea.

Ah� va de nuevo. El mismo tirador,
el bueno. Aqu� va. Ah� va.

- Hola, se�ora Brent.
- Ah, buenas noches.

- �Dej�ndolos limpios?
- No exactamente.

Danny y yo perdimos las camisas.

- �I es Danny Jadden.
- �Qu� tal?

Hola. �C�mo est�?

� Vamos y probamos suerte
en otro lugar?

Claro. La noche es joven.
Mucho gusto, se�ora Brent.

- Gracias.
- Adi�s.

- Adi�s.
- Adi�s.

Ah� va.

Va de nuevo, el mismo tirador, el bueno.
�Qu� har�, ganar� o perder�?

Ocho es su puntaje, ocho.
El ocho ganar�.

Entra.

- Tom�monos un trago antes de dormir.
- Nena, tienes a tu chico.

Hola, Romeo. Hola, cari�o.

Sabes donde est� todo.
Ve y prepara los tragos.

- Estar� contigo en un minuto.
- Est� bien, nena.

Hola.

Vete de aqu�.

Vamos, Mac. Discutamos esto
con un par de tragos.

- �Qu� dices?
- Digo que te vayas.

Eres un poco abrupto, �no?

- Vine por un trago y me lo tomar�.
- Me o�ste.

Mira, ya estoy aqu�.
Puedes regresar otro d�a.

�Por qu� est�s tan enojado?
Ella no es la reina de Sheba.

Sheba o no, ning�n hombre
puede sacarme del camino.

Tal vez s� y tal vez no.

Por Dios, �qu� haces, Danny?

Parece que estuvieras
destruyendo la casa.

El ruido que est�s haciendo...

Danny.

Danny.

Ah, Sam.

Bueno, abajo, abajo. No.

�No es tarde para estar afuera, Romeo?

S�, deber�as estar en casa,
peque�o vagabundo. Vamos.

No, te escapar�s de nuevo.
Vas para adentro.

Hola, �informaci�n? �Cu�l es el n�mero
de la estaci�n de tren?

Gracias.

�D�nde has estado?

Afuera.

No.

�Con qui�n, la chica Palmer?

Si vamos a tener una conversaci�n,
ser�a bueno que hablaras.

La chica Palmer est� muerta.

�Por qu� lo hiciste, Sam?

Tuve que hacerlo.
Me encontr� con �l.

- ��I?
- Ese chico.

Me estaban dejando en rid�culo.

No la habr�a matado a ella tambi�n,
pero ella entr� y vio al chico ah� tendido.

Tem�a que algo as� sucediera.
La forma en que pierdes el control.

Ha sido peor �ltimamente.
Desde esa crisis nerviosa el verano pasado.

En serio, Sam.

Te enloqueces por nada.
Por nada. Tienes que tener cuidado con eso.

No puedes matar gente cuando quieras.
No es factible.

- �Por qu� no?
- Muy bien, Sam. Muy bien, lo es.

- �I se me estaba adelantando.
- �Con ella?

- Apuesto que te preocupaba mucho eso.
- No es eso.

Es s�lo que nunca dejo que nadie
se me adelante en nada.

Puedo tener lo que sea
si me lo propongo.

Claro, Sam, claro.

Cuando lo quiero, lo tomo.
Nadie se interpone.

Por supuesto, Sam.

Debi� estar loco al pensar
que ten�a una oportunidad...

...con la chica despu�s
de que estuvo contigo.

- �Alguien te vio all�?
- No que yo sepa.

- �Alguien te vio con ella?
- No miro a todos los que me ven.

C�lmate, �quieres, Sam?
S�lo estoy tratando de ayudarte.

Hay un tren que sale en una hora
para San Francisco. Estar�s ah�.

- �T� ir�s?
- No, me quedar� hasta que esto se calme.

Revisar� las pistas que tienen.
Ver� si alguien te vio y qui�n.

T� vete, ll�mame cuando est�s listo.
�Necesitas dinero?

No.

Compra tu boleto despu�s
de subirte al tren.

Y, Sam, mientras tanto,
nada de chicas, �entiendes?

Tengo una chica en mente
y est� muerta.

Y eso es suficiente para m�.

Yo te ayudar� con eso.

Vaya, es muy amable.

- �Cu�l es el n�mero de su carro?
- No tengo uno. Est�n agotados.

- Qu� l�stima. �Tienes boleto?
- S�.

Qu� bien. Vamos.

- �Qu� carro, se�or?
- �ste.

Debe haber un error.
No hay espacio.

Tranquilo.
�D�nde queda el club?

- Es el carro siguiente, pero est� cerrado.
- Bueno, pues se abrir� ahora mismo.

Bueno, ahora por lo menos no nos echar�n
hasta la siguiente parada.

Tranquila. Nadie nos echar�.

Qu� hombre tan seguro.

Si sabes lo que quieres, aseg�rate
de obtenerlo y no fallar�s.

Averig�� eso hace rato.

La mayor�a de la gente no sabe
qu� quiere en la vida.

- Apuesto a que t� s�.
- �S�?

S�.

S�, lo s�.
Exactamente. �T� no?

Yo s� exactamente lo que quiero al verlo.

- �Un cigarrillo?
- No, gracias.

Te vi una vez antes de esta noche.

- �Lo recuerdas?
- S�.

No jugaste mucho tiempo.

No. No me gusta mucho apostar.

No me gusta estar a merced
de esos cuadrados blancos...

...que deciden si ganas o pierdes.
Me gusta decidir eso yo mismo.

No eres un idiota, �verdad?

- �Un idiota?
- S�. Dec�amos...

...con la se�ora Kraft, donde viv�a,
y Laury, una amiga suya...

...que la mayor�a de los hombres lo son.

Tal vez viste a la se�ora Palmer.

Ella habl� conmigo
en la mesa de juego esta noche.

S�, creo que la not�.

En fin, no lo eres.

- �Qu�?
- Un idiota.

- �Te gusta eso?
- S�.

Me gusta mucho.

- � Vives en San Francisco?
- S�.

Bien.

�Por qu�?

Porque ah� estar� un tiempo.

Bueno, �cu�ndo te ver� de nuevo?

Te llamar� cuando me organice.

No s� d�nde estar�.
Mejor dame tu tel�fono.

Bueno, estar�s en el hotel, �no?

Mira, si no quieres volverme
a ver, s�lo dilo.

Si no quisiera verte, te lo dir�a.

Eso pens�.

�Por qu� no te quedas en el hotel Terrace?

Estoy segura que puedes conseguir
una habitaci�n y es un buen lugar.

�A ti te gusta?

- S�.
- Entonces ir� al Terrace.

�Alguien te recoger�
cuando bajemos del ferry?

- No. Tomar� un taxi.
- Estupendo. Compartiremos uno.

Me temo que no.
Vamos en direcciones opuestas.

Ah� es donde te equivocas.

T� y yo vamos en la misma direcci�n.

RENO Servicio de Lavander�a
Caf�

- Su lavander�a, se�ora Perth.
- Est� bien.

Ese caf� huele bien. Es gracioso c�mo
el caf� nunca sabe tan bueno como huele.

A medida que uno envejece, descubre
que la vida se parece mucho al caf�:

El aroma siempre
es mejor que la realidad.

- Que �se sea su pensamiento del d�a.
- S�, claro.

Tel�fono.

�Hola?

�Se�or Arnett?

�Qui�n llama?
No, �l no est� aqu�.

No s� cu�ndo regresar�.

- Un deudor, me imagino.
- S�.

Hablando de deudas, no has pagado
tu parte del tel�fono en tres meses, Arnett.

�Et tu, Brutus?

No estoy hablando de lo que t� "et".
Eso lo paga la casa.

Pero quiero $8.55 del tel�fono.

Eso me dejar�a
penosamente corto de dinero.

- Mira...
- Pero...

...tengo un posible cliente.

La que llam� aqu� el martes.

Me reunir� con ella
en exactamente tres minutos.

Y extraer� un buen anticipo,
no temas.

�Qu� quiere �sta?

�Su esposo la est� enga�ando, o qu�?

Homicidio.

- �Se�ora Kraft?
- Obviamente. �A qui�n esperaba?

Claro. Me molesta
que debamos encontrarnos aqu�...

...pero est�n redecorando mi suite
y no soporto el olor a pintura.

- Espero que sea un buen detective.
- �Nadie la refiri� donde m�?

No. Su nombre estaba de primero
en los clasificados del directorio.

Bueno, llevo en este negocio
unos 20 a�os.

Al seguir vivo, la deducci�n es que no me
he muerto de hambre en mi negocio.

- Esa cerveza.
- Siempre funciona.

Bueno, se�ora Kraft,
�en qu� puedo servirle?

Puede servirme encontrando
a la rata que mat� a la pobre Laury.

Esa Laury Palmer se divert�a m�s
que todos los que conoc�a.

O�rla hablar de sus cosas era la �nica
diversi�n que me quedaba en la vida.

As� que ahora quien la haya matado
recibir� su merecido. Me asegurar� de ello.

Usted sabe, por supuesto, se�ora Kraft, que
�ste ser� un caso especialmente dif�cil.

No tuve la oportunidad de inspeccionar
la escena del crimen o la evidencia.

No tengo ninguna de las ventajas
que tiene la polic�a.

- S� todo eso.
- Entonces bajo las circunstancias...

...no puedo prometerle
m�s que mi esfuerzo.

- Eso es, si me contrata.
- Est� contratado, as� que comience.

Primero, hay una peque�a
transacci�n monetaria.

�Cu�nto?

Quinientos d�lares
le servir�n para contratarme.

�Quinientos?
�Usted cree que soy millonaria?

Laury Palmer le dej� su casa
y una buena cantidad de dinero.

�C�mo lo sabe?

Soy detective. �Recuerda?

- � Y el Club Cincuenta y Dos?
- �Recuerdas el A�o Nuevo que pasamos ah�?

- Claro que s�.
- Ten�as muchas �rdenes de cr�pe suzette.

�se era mi prop�sito de A�o Nuevo,
tener mi dosis de cr�pe suzette.

El pobre hombre, casi quema el fondo
del plato de los cr�pes.

Un caballero viene a verla, se�ora Brent.
Un se�or Wild.

Ah, p�dele que pase, por favor.

- Hola.
- Hola.

No te esperaba.

- No sab�a qu� hacer, as� que pas�.
- Qu� amable.

�sta es mi hermana.
Georgia Staples, Sam Wild.

- �Qu� tal?
- �Qu� tal?

Y Fred Grover, mi prometido.

- Hola.
- Hola.

El se�or Wild y yo vinimos de Reno
en el mismo tren.

- �No te vas a sentar?
- No, gracias. Veo que saldr�n.

- No hay prisa.
- Excepto que tengo tanta hambre...

...que apenas puedo andar.
- No importa qu� pase, Fred tiene que comer.

Yo creo que eso es un indicio
de un deterioro de la fibra moral.

Tal vez sea algo compensatorio.
T� sabes, falta de satisfacci�n emocional.

Creo que mejor me voy.
Mucho gusto.

Invita al se�or Wild
a que nos acompa�e, Helen.

- Gracias. No quiero irrumpir en una fiesta.
- S�lo estamos los tres.

Adem�s, yo soy la, entre comillas,
"mujer adicional".

Me salvar�a de esa horrible suerte.

El se�or Wild sin duda
tiene otras cosas que hacer, Georgia.

Pues, no. Aunque parezca
extra�o, no es as�.

Bueno, entonces vamos.
Traigan sus cosas, chicas.

Bueno, Helen,
te perdiste una cosa en Reno.

- Un homicidio horrible.
- Cerca de donde te estabas quedando.

- �Tienen idea de qui�n lo hizo?
- No. No, a�n no.

- Es una foto espantosa.
- Eso es lo que vende diarios.

Ve por tus cosas. Puedes ver los jugosos
detalles cuando llegues a casa.

�Por qu� les resulta fascinante
a las mujeres el homicidio?

Mucho m�s que a los hombres.
�Lo ha notado?

No.

Ese asesinato fue
la noche antes de que te fueras.

- �No o�ste nada al respecto?
- No. Me fui temprano a la ma�ana siguiente.

- �Estaban ambas fotos en el diario?
- S�, ella era bastante bonita...

�C�mo supiste que
dos personas murieron?

- Ni siquiera viste el peri�dico.
- Yo... Bueno, yo...

En realidad, yo descubr� los cuerpos.

- �Qu�?
- Preferir�a que no lo mencionaras.

�No gritaste?

- �Por qu� no llamaste a la polic�a?
- Por Fred.

Sabes c�mo aborrece cualquier cosa
que parezca sensacionalismo.

E involucrarse en algo as�
seguro es complicado.

Adem�s, es mucho problema.
Preguntas del fiscal y todo eso.

Bueno, �sa parece una forma
bastante ego�sta de verlo.

No lo creo. Si yo tuviera
informaci�n, ser�a diferente.

Pero no pod�a decirles nada, �verdad?

- Bueno, tal vez tengas raz�n.
- Por supuesto que la tengo.

- �Te encargas de esto?
- Por supuesto, se�or Grover.

Gracias, Pierre.

Orden� algo especial
para celebrar tu regreso.

- Maravilloso.
- Ah, �sta es mi canci�n favorita.

Vamos, Fred, bailemos.

- No te importa, �verdad, Helen?
- Por supuesto que s�.

- Pero vayan.
- Gracias, mi amor.

�Por qu� �l?

Bueno, qu� pregunta tan extra�a.

Quiero saberlo. No entiendo.

�No se te ha ocurrido
que tal vez est� enamorada de Fred?

- T� no te enamorar�as de alguien as�.
- Como quieras.

�Quieres bailar?

No, gracias.

�Tienes miedo?

�Miedo? �De qu�?

De que podr�as cambiar
de opini�n sobre casarte con �l.

Nada en el mundo me har�a cambiar
de opini�n sobre casarme con Fred.

- �Por qu� no lo haces? �Qu� esperas?
- La madre de Fred muri� hace poco.

Naturalmente,
�l quiere esperar unos meses.

Creo que yo podr�a hacerte cambiar de
opini�n sobre el matrimonio si lo decidiera.

Bueno, �qu� es tan gracioso?
T� quer�as verme de nuevo.

No confundamos el asunto.

Verte de nuevo no ten�a
nada que ver con Fred y conmigo.

Ah, entiendo.

Los martes vas al barrio pobre con una
canasta llena de golosinas para los ni�os.

Pero te regresas r�pidamente
a tu propia �rea de ricos.

Yo no dir�a eso.

No, no lo dir�as, pero as� es.

Hay demasiada gente para m�.

Bueno, Fred, cuando yo tenga tu edad,
me imagino que tampoco lo soportar�.

- Helen, �me prestas tu espejo?
- S�, t�malo.

Tu anillo de matrimonio.

�No se supone que debes tirarlo
tan pronto recibes el divorcio?

Lo har�a si fuera t�, pero debo pensar en
los diamantes. Siempre se pueden empe�ar.

Helen, qu� tonter�a.
Ya te he dicho...

...que no quiero que pienses en dinero.

�No es maravilloso ser la pariente pobre
y que la gente te insista...

...en ponerte oro en tu peque�a mano?

- �No son hermanas?
- S�.

�Quieres decir, por qu� soy la pobre?

- En realidad somos hermanastras.
- Muy bien, si tienes que discutir eso.

Pero lo somos, querida.
El padre de Georgia era el magnate.

�I fund� el diario
m�s grande de la ciudad.

Naturalmente, cuando muri�,
le dej� todo a Georgia.

No tienes idea de cu�nto me aburre esto de,
"dinero, �qui�n tiene el dinero?"

�Bailas conmigo, Sam?

Por supuesto.

- �Un cigarrillo, querida?
- S�, gracias.

El tipo con el que se casar� tu hermana,
ese Grover, es rico, �no es as�?

Muy rico.
Es de la Compa��a de Acero Grover.

- �Por qu�?
- S�lo tengo curiosidad.

As� deber�a ser, alguien con dinero
cas�ndose con alguien sin �l.

Balancea un poco las cosas.

- T� nunca te has casado, �verdad?
- No.

- �Por qu� no?
- No s�, yo...

Has tenido muchas propuestas.

Bueno, yo... �Qu� te hace pensar
que he sido asediada con propuestas?

Bueno, eso es sencillo. Tienes todo
lo que un hombre desear�a.

Eres joven, c�lida, bonita.

Realmente podr�as amar a un hombre.

- Lo siento.
- �Por qu� est�s nerviosa?

- Ya has o�do esto antes.
- No estoy nerviosa.

Bueno, en realidad,
es un poco desconcertante...

...que alguien que apenas conoces
sea tan franco.

�Por qu�? �Est� mal
decir lo que se te ocurre?

No, no est� mal, es...

- Es s�lo que no estoy acostumbrada a eso.
- Tendremos que cambiar eso.

Porque hay mucho m�s
en mi cabeza que quiero decirte.

Hola.

�T� dir�as que mi cara es bonita?

- ��I lo dijo?
- �Qui�n?

- No seas t�mida.
- Es un hombre muy atractivo, �no?

Y muy diferente.

Sabes, nunca hab�a
conocido a alguien como �l.

- �Cu�ndo lo ver�s de nuevo?
- Ma�ana, al almuerzo.

- �Qu� hace? �Lo sabes?
- No.

Bueno, �de qu� hablaron
mientras estaban en el tren?

De mi divorcio, de Reno.

Helen, �fueron horribles
esas seis semanas?

No fue lo que llamar�as
una experiencia enriquecedora.

Bueno, por lo menos fue alg�n
tipo de experiencia.

Parece que yo nunca tengo ninguna.

Creo, querida, que est�s
a punto de tener una.

Hola.

S�, adelante.

- Hola.
- Hola, Mart. Sam. �Qu� tal?

- Se ha estado calmando.
- Bien.

- Nada apunta a ti.
- Sab�a que as� ser�a. No estaba preocupado.

- �D�nde te est�s quedando?
- En el hotel Terrace.

- � Todo est� bien?
- S�.

Te tengo noticias, Mart.

- Me voy a casar.
- �A casarte? Deja de bromear.

- No bromeo. Hablo en serio.
- �Cu�ndo lo har�s?

- No s� cu�ndo. Acabo de decidirlo.
- �Qui�n es la chica?

Georgia Staples. Es hu�rfana.

Su padre le dej� el diario
m�s grande de San Francisco.

- Parecen ligas mayores.
- Claro, son ligas mayores.

- �No era hora de que yo estuviera ah�?
- Claro.

S�. No s�lo estaremos
nadando en dinero...

...sino que entrar a este c�rculo
arreglar� todo para que yo...

Para que yo pueda re�rme de todos.

Ven pronto. No s� cu�nto tiempo
podr� mantenerla a distancia.

- Estar� all� en un par de d�as.
- Est� bien, muchacho. Nos vemos.

Oiga, taxi.

- Ll�veme al 4106 de la calle Calvert.
- S�, se�or.

- Hola.
- Hola.

�Puedo preguntar qu� sucede?
�Alg�n tipo de celebraci�n?

Una boda.
Georgia Staples se va a casar.

�Ah, s�? �Con qui�n se casar�?

No lo s�.
Con un tipo afortunado.

S�. Bueno...

�C�mo le va, se�ora?

Pens� que le servir�a una buena
lavadora de platos o una secadora de platos.

- No.
- O tal vez un triturador de basura.

Ver�, se�ora,
tal vez no se me note...

...pero la comida y yo hemos sido extra�os
desde anteayer.

Bueno, pase. No puedo echar a un hombre
hambriento de un fest�n de boda.

- Gracias, se�ora.
- Esto no es bueno para alguien con hambre.

- �Qu� tal una pata de pavo?
- Lo que sea est� bien. Lo que sea.

Muchas gracias.

�Ese se�or Wild no es lo m�s lindo que hay?

Sus ojos me llegan. Suben y bajan
sobre ti como un reflector.

S�.

Aquello que Dios une,
que no lo separe el hombre.

Ya que Samuel y Georgia
han acordado unirse en santo matrimonio...

...y han sido testigos de lo mismo
ante Dios y esta compa��a...

...y han prometido ser fieles
el uno con el otro...

...y han declarado lo mismo
entregando y recibiendo un anillo...

...y al unir sus manos, yo los pronuncio
marido y mujer.

Espero que ambos
sean muy, muy felices.

- Gracias, padre.
- Gracias.

Felicitaciones, Sam.

- Georgia, espero que seas muy feliz.
- Gracias, querida.

- Se�ora Wild.
- Felicitaciones.

Hola, hermana.

- Felicitaciones, Sam.
- Qu� afortunado.

- Gracias.
- Felicitaciones, Sam.

- Felicitaciones.
- Gracias, Mart.

�Cansada?

S�.

Helen...

- No pareci� gustarte mucho.
- �Qu�?

El que ellos se casaran.

No. Naturalmente.

- �Se not�?
- Yo lo not�.

Sam no tiene la clase de Georgia.
T� lo sabes.

- �Era preocupaci�n por Georgia?
- Bueno, por supuesto.

�Entonces por qu� dejaste
que la boda se hiciera?

�C�mo evitar que alguien se case con Sam?

��I es en realidad
tan atractivo para las mujeres?

- �Lo es, Helen?
- En serio, Fred.

Escoges los peores momentos
para molestarme. Estoy cansada.

He tenido que manejar todo esto,
y estoy alterada por Georgia.

Lo siento, mi amor.

No me di cuenta
que te molestaba.

- Bueno, vine a despedirme.
- Qu� amable.

Las despedidas son tan tristes,
�no te parece?

- Despedirme de ti, lo es.
- Afable. Simplemente afable.

- No crees que lo digo en serio, �verdad?
- Muy en serio.

�Te importa?

No, adelante.
Yo no bebo mucho.

- No lo necesito.
- En eso somos diferentes.

Todos son diferentes de los dem�s
de cierta forma.

T� te crees muy inteligente, �no?

- No me gusta esa afirmaci�n.
- Si no te gusta, no debo decirla.

Creo que bebiste demasiado.

�Sabes qu� creo yo? Creo que tienes
un secreto, �no es as�?

Bueno, �no?

�Por qu� tu cara se pone tensa
de repente a veces?

� Y qu� hay con tu amigo,
ese perro faldero que trajiste a la casa?

�Hay algo m�s que te gustar�a saber?

S�.

�Por qu� te mantienes alejado de m�?

No me has dirigido dos palabras
desde que llegaste.

- Vanidad de vanidades, todo es vanidad.
- �Deja esa bober�a intelectual...

...mentiroso don nadie!

- Lo siento, eso son� horrible.
- No, tienes raz�n.

No soy mucho.

Pero har� de m� mucho m�s de lo que soy.

Y puedo hacerlo.

- T� no crees que pueda, �verdad?
- No lo he pensado.

Sabes, Sam...

...la forma en que besaste a Georgia
despu�s de la ceremonia fue convincente.

Eras la imagen perfecta
del joven esposo apasionado...

...fiel hasta la muerte.

�Por qu� habr�a de no serlo?

�No ves que mi esposa
es muy atractiva?

- S� que ves que t� eres muy atractivo.
- Eso fue muy bueno.

Apuesto que ni recuerdas todas las mujeres
que han enloquecido por ti.

- �T� recuerdas a todos tus hombres?
- No me metas en esto.

Est� bien.

S�lo una cosa m�s.

Georgia es mi hermana,
y la quiero mucho.

Despu�s de todo lo que ha hecho por ti,
estar�as loca al no quererla.

T� no sabes nada, �verdad?

Hablas de su dinero,
y yo la odio por su dinero.

Cada vez que paga una cuenta...

...cada vez que veo algo que no poseo,
que s�lo es prestado...

...la odio por su dinero.

Qu� amable soy, �no? Despu�s de todo,
ella me ha dado sin siquiera pensarlo.

S� c�mo te sientes.

Hay m�s que eso.

Su dinero la ha convertido
en algo que yo jam�s ser�.

Ella es totalmente inocente.

Ella conf�a plenamente en que si le hace
a alguien una pregunta...

...le dar�n la respuesta verdadera.

En fin, yo quiero a Georgia, y si haces algo
para lastimarla, soy tu enemiga.

Y tambi�n soy una muy mala enemiga.

Adi�s...

...hermana.

- Se�ora Brent.
- S�, Grace, �qu� pasa?

Hay un hombre en la cocina haciendo
muchas preguntas sobre el se�or Wild.

Pens� que ser�a mejor que lo viera.

Gracias.

�Cu�nto tiempo lleva el se�or Wild
cortejando a la se�orita Staples?

No lo s�, unas semanas.

Vaya, qu� r�pido florece el amor
en el coraz�n de los j�venes.

Est�n listos para irse.

En serio, ese se�or Wild, me hace
aflojar las rodillas.

Obviamente, el se�or Wild
les gusta mucho a las damas.

- S�.
- No desperdiciar� su tiempo o el m�o...

...dej�ndolo mentir sobre qui�n es usted.
�Me da su billetera, por favor?

Tal vez esto sea menos doloroso
si lo discutimos en privado.

�Les importa esperar en la despensa?
Esto s�lo tomar� un minuto.

�I dijo que ten�a hambre.

Un detective.

U operativo, como lo llamamos
eufem�sticamente.

No me interesan sus payasadas
profesionales, se�or Arnett.

Quiero saber por qu� est�
haciendo preguntas sobre el se�or Wild...

...y qui�n es su cliente.

Naturalmente, no puedo revelar
el nombre de mi cliente.

Su �tica me conmueve profundamente.

Le agradezco su honorabilidad.

- Veo que tendr� que llamar a la polic�a.
- Eso ser�a extremadamente imprudente.

Podr�a involucrar al se�or Wild
a�n m�s seriamente...

...en un asunto que ya es bastante serio.

Buen d�a.

Espero que el se�or y la se�ora Wild
tengan una buena luna de miel.

Grace.

Mu�strale la salida
a este hombre, por favor.

Ah, y, Grace...

...�no le dijiste nada sobre
el se�or Wild, s�lo por accidente?

Por ejemplo, �no le dijiste
sobre sus visitantes?

Pero el se�or Wild
no ha tenido visitantes...

...excepto el caballero que lleg�
hoy para la boda.

Helen. Te hemos estado buscando.

Maggie Macy me acaba de decir
que te mudar�s con ella.

- �Qu� te hizo pensar en eso?
- Deber�as tener tu casa para ti sola.

Querida, eso es una tonter�a.

De todas formas te ir�s apenas te cases.
No ser� en mucho tiempo.

- Tal vez no le caigo bien.
- Pero, Sam, yo te adoro.

Por supuesto que me quedar�.

- Que tengas un viaje maravilloso.
- Gracias, querida.

- Georgia, querida.
- S�.

Fue una tonta idea el mudarme.

Adi�s, hermano.

Adi�s.

Vamos, cari�o.

- Ap�rense.
- Perder�n su tren.

- Vamos, todos, ellos se van.
- Ese hombre ya se fue.

Espero que
no la hubiera alterado, se�ora Brent.

�Alterarme? Pero, no.

El que haya venido
me hizo sentir estupendamente.

Con las llaves de la ciudad
justo en mi mano.

Adi�s. Escr�bannos, �quieren?

�Por qu� me llamaste?

Estaba de compras y pens� que ser�a
bueno tomarnos un c�ctel.

Cuando Sam nos present�,
dejaste claro...

...que el que yo estuviera en tu casa era
idea de Sam y una mala idea.

Lo s�. Fui grosera.

Me preguntaba si me perdonar�as
y si podr�as olvidarlo.

Est� bien. Olv�dalo.

Pens� que habr�amos recibido noticias
de Georgia y Sam, pero no.

No s� Georgia,
pero a Sam no le gusta escribir.

- �Lo conoces hace mucho?
- S�.

S�, Sam y yo vivimos juntos cinco a�os.

�Por qu� no viniste a San Francisco
cuando Sam vino?

Yo ten�a unos asuntos
que atender y...

Un momento. Parece que estamos haciendo
muchas preguntas y respuestas.

Lo siento. No quise ser entrometida.
De veras que no.

- Bebe y tom�monos otro trago.
- Bien.

Debo advertirte,
el licor me vuelve entrometida.

Me conocen por hacer todo tipo
de preguntas personales despu�s de beber.

Est� bien. A m� me conocen
por decirle a la gente que no se meta.

Y sobrio.

Grace.

- Hola, Fred.
- Hola.

- No te esperaba esta noche.
- �Qu� es todo esto?

- �Qu�?
- Sobre Mart Waterman mud�ndose.

Grace dijo que llamaste y le pediste
que alistara un cuarto para �l.

S�, invit� a Mart a quedarse aqu�.

- �Por qu� hiciste eso?
- Es el mejor amigo de Sam.

Es una tonter�a que se quede en un hotel
cuando tenemos cuartos vac�os.

No s� por qu� no se me ocurri� hace d�as.

Esa idea no me gusta para nada.

- Tener a ese hombre en la casa contigo...
- Pero, Fred, Grace est� aqu�.

- �se no es el punto.
- No seas complicado.

A riesgo de parecer de la �poca victoriana,
quiero que le digas que no venga.

- Pero, �c�mo puedo hacerlo ahora?
- Inventa una excusa. No es dif�cil.

Pero lo es, querido.
No puedo hacer cosas as�.

O sea que no lo har�s.

Fred, en serio, no s� por qu� deber�as...

�Puedes parar?
Estoy harto de o�r lo est�pido que soy.

- Parecen Georgia y Sam.
- �Tan pronto?

Pero no regresar�an hasta la otra semana.

- El trabajo est� bien, pero lo que quieres...
- Bien, basta.

- Sam, es tan tonto...
- Dije que basta y lo dije en serio.

Hola, Sam. Hola, querida.

- �Tuvieron un buen viaje?
- S�, maravilloso.

S�, hasta que yo lo arruin�
con mi loca idea.

Sam quiere dirigir el peri�dico.

Querido, si tuvieras alguna
experiencia de negocios...

Pero has sido luchador y administraste
uno o dos ranchos.

�C�mo vas a saber
c�mo dirigir un peri�dico?

Le dije a Sam que tomara un empleo
en la oficina para comenzar...

...hasta que aprendiera del negocio...

M�ralo as�, Sam, de repente t� no...

Georgia y yo podemos arreglar esto
sin que nadie m�s se meta.

Sam, Fred es parte de la familia.

- �I tiene derecho a meterse, como t� dices.
- Entonces a �l no le gusta.

S�lo porque no tiene sentido, Sam.
�Para ti tiene sentido, Helen?

No.

- Lamento haber hecho un esc�ndalo.
- Vamos.

Es s�lo que yo...

No s�.
No soporto pelear con Sam.

- T�matelo con calma, Georgia.
- No parecer� tan tr�gico en la ma�ana.

No, supongo que no.
Buenas noches.

- Buenas noches.
- Buenas noches.

- Bueno, te llamar� ma�ana.
- Fred.

- Est�s enojado conmigo.
- No.

- �Seguro que no?
- S�.

S� entiendes que no puedo
cancelar esa invitaci�n, �verdad?

S�.

Bueno, �no me dar�s
el beso de las buenas noches?

Buenas noches, Helen.

Helen.

Helen.

�Por qu� estuviste en mi contra hoy?

No sabes de lo que soy capaz.
No sabes lo que puedo hacer.

Si tuviera oportunidad, podr�a dirigir
ese peri�dico mejor que nadie.

- Creo que podr�as.
- �Entonces por qu� estabas en mi contra?

Porque Fred lo estaba.

Y t� amas a Fred desesperadamente.

Yo amo a Fred.

T� amas a Fred.

�Por qu� la pasi�n
repentina por dirigir el diario?

Yo estar�a en la cima.

Podr�a hacer o destruir a la gente.

Yo podr�a hacer eso. �Entiendes?

S�. Creo que s�.

Claro que entiendes.

Porque tus ra�ces
est�n abajo donde las m�as est�n.

Supe eso la primera vez que te vi.

Almas gemelas, �eh?

Deja de re�rte.

Para ser un hombre que acaba de regresar
de luna de miel con una esposa atractiva...

...eres muy apasionado.

�Qu� pasa contigo?
Sabes qu� siento por Georgia.

- �Lo s�?
- A menos que seas una tonta.

No significa m�s
para m� que Fred para ti.

Muy interesante.

- Debo llevarle esta leche a Georgia.
- �I no significa nada para ti. Dilo.

- Pero s� significa algo.
- �Qu�? �Qu�, Helen?

Fred es paz y seguridad.

- Entonces es su dinero.
- S�, en parte.

Toda la vida he vivido del dinero
de los dem�s. Ahora quiero algo m�o.

Pero hay otro tipo de seguridad
que Fred puede darme.

Sin �l, me da miedo
de las cosas que puedo hacer.

Me da miedo en qu� pueda convertirme.

Fred es bondad y seguridad.

� Y qu� soy yo?

�T�?

T� eres fuerza, emoci�n...

...y depravaci�n. Hay una especie
de corrupci�n dentro de ti.

Eso alejar�a a la mayor�a de las mujeres.

- S�.
- Pero no a ti. T� tienes agallas.

Georgia me dijo que encontraste
a esos dos en Reno. Ah� tuviste agallas.

- No gritaste ni te desmayaste.
- No.

Y no fue s�lo el encontrarlos muertos.
Fue la forma en que murieron.

El chico atorado en la entrada,
la chica Palmer bajo el fregadero.

- Sangre en su pelo.
- Sangre por todas partes. No gritaste.

No, no grit�.

Helen.

Ah, ah� est�s.

- �Qu� est�s haciendo aqu�?
- Me mudar� aqu�.

- �De qui�n fue esa idea?
- Helen lo sugiri�.

Buenas noches.

S� que escogiste
un buen momento para entrar.

Necesito un trago.

Hola, quiero hablar con Albert Arnett
en Reno, por favor.

- � Tiene el n�mero?
- S�.

- �Cu�l es el n�mero, por favor?
- 22-766.

- �Qui�n llama, por favor?
- Soy la se�ora Brent.

- Gracias. Llamar�.
- Gracias.

Tienes una esposa bonita con todo el dinero
fuera de la casa de la moneda.

- No muestres tus cartas.
- �Qu� significa eso?

Deja a Helen en paz.

- �Por qu�?
- Te lo acabo de decir.

No es que te culpe, por supuesto.
Helen es un plato delicioso, pero...

Si alguna vez te veo mirando a Helen,
te destrozar� la garganta.

- Ah, Sam...
- Olvida el "ah, Sam".

S�lo recuerda lo que te dije.

No, no quiero
hablar con nadie m�s en Reno.

S�lo averig�e d�nde puedo encontrar
al se�or Arnett en San Francisco, por favor.

- �Qu� pasa?
- Helen. Acaba de llamar a alguien en Reno.

- �En Reno?
- No la entiendo.

No la entiendo en absoluto.

- Tal vez fui un tonto. Podr�a jurar...
- �Qu�?

Tal vez no.
Tal vez est� en mi contra.

No lo s�. Ella se me tira en los brazos
y trata de atraparme.

- Toca y escarba y mira dentro de m�.
- Sam, Sam, c�lmate.

Lo arreglaremos de alguna forma.
Pero t�malo con calma.

"Donde todo prospecto agrada
y s�lo un hombre es vil".

Esa cita se me ocurre
muy a menudo en mi profesi�n.

Se�or Arnett, he tenido curiosidad por saber
qu� ha averiguado...

...desde que lo vi por �ltima vez.

Me ha ido bastante bien.

�Qu� tan bien?

Mi investigaci�n sobre el se�or Wild
est� casi terminada.

� Y cuando encuentre lo que falta...?

Le entregar� todo a mi cliente,
quien, creo, le informar� a la polic�a.

Naturalmente, estoy muy interesada.

- Despu�s de todo, involucra a mi cu�ado.
- As� es.

Y ser�a muy dif�cil
para todos nosotros...

...si �l fuera relacionado con algo como...
- �Como el asesinato?

Desafortunadamente, el se�or Wild
ya est� involucrado en eso.

De hecho, yo llegar�a a afirmar que no
s�lo est� involucrado en �l...

...sino que �l es el principal
actor en este caso.

Supongo que hasta ahora
su cliente no sabe nada.

Su presunci�n es correcta.

- Se�or Arnett, yo...
- Est� bien, se�ora Brent.

Soy un hombre �ntegro, pero siempre
estoy dispuesto a o�r una oferta interesante.

- Bueno, estoy lista para pagar muy bien.
- Bien.

Obstruir las ruedas de la justicia
es un asunto costoso.

- Cinco mil d�lares deber�an ser suficientes.
- Quince mil d�lares ser�an suficientes.

Creo que est� basando su exigencia
en falsas premisas, se�or Arnett.

- No soy una mujer rica.
- Lo s�.

Pero su hermana es muy rica.

Tambi�n lo es el se�or Grover,
con quien usted planea casarse.

Siete mil.

Quince.

Dudo mucho que pueda conseguirlos.

En ese caso, continuar�
con mis averiguaciones.

Y le recuerdo que las cortes de Nevada
tienen unas opiniones bastantes puritanas.

Algunos de nuestros m�s
apasionados jurados insisten...

...en que un hombre que comete
un homicidio debe pagar con su vida.

Sabe, se�ora Brent,
yo soy un hombre sencillo.

Y estoy algo confundido por sus motivos
para proteger al se�or Wild.

�I es el esposo de mi hermana.
Deber�a ser obvio.

�I era el esposo de su hermana cuando
fui a su casa el primer d�a...

...y usted no tuvo intenciones
de protegerlo entonces.

De hecho, se esforz�
para darme informaci�n...

...que podr�a ayudarme.

Por supuesto,
el se�or Wild es un hombre muy atractivo...

...y supongo que a�n una cu�ada...

...que lo conozca bien...

...podr�a sucumbir a sus encantos.

Buenas noches.

Buenas noches.

�Se le ha ocurrido a usted?

Ninguno de nosotros
parece un canalla, �verdad?

- �D�nde estabas?
- Eso es asunto m�o.

�D�nde estabas?

Fui a ver a un hombre llamado Albert Arnett.
Es detective.

�Fuiste a verlo para qu�?

Tiene un cliente que cree que t� cometiste
un asesinato. Le dije que era una fantas�a.

Yo sab�a que no hab�as
cometido ninguno.

- �C�mo supiste de �l?
- Estaba en tu boda.

Pens� que ser�a inc�modo
que �l fuera por ah� haciendo preguntas...

...as� todo el asunto sea rid�culo.
As� que decid� detenerlo.

- No fuiste por eso.
- S�.

- Mientes.
- C�lmate, Sam. No creo que mienta.

- �De qu� lado est�s?
- Sam.

S� que haces las cosas dif�ciles
para la gente que est� de tu lado.

�C�mo dijo que se llamaba
ese detective?

Arnett.

HOTEL FELTON
HORA DE SALIDA 12 DEL D�A

La se�ora Kraft, por favor.

- 618.
- Gracias.

- Hecho.
- Hay que sumar.

- �Por qu�?
- Para saber qui�n gan�.

- Yo gan�.
- �Qui�n dice?

- �No discutas!
- T� ganaste.

- �C�mo va la b�squeda?
- Eso es lo que voy a averiguar.

- Cierra eso, �quieres? Tengo fr�o.
- Con gusto, con gusto.

Bueno, �alguna vez jugaste
cartas con Virginia?

- �Con Virginia?
- Eso pens�.

No eres ning�n Casanova con las mujeres.
Me dijiste mentiras.

Eres un mal sustituto de Laury.

- �Me est�s diciendo mentiroso?
- S�. Eres un mentiroso.

Y t� una tramposa.

�Por qu� dices eso?

- �Puedo ayudarte?
- S�.

Bueno, el 10 de diamantes
que busc�bamos.

Claro. S�.

- Ve a ver qui�n es.
- S�.

Ah, es usted. Eso es todo.

Juguemos ma�ana
y te ganar� de nuevo.

S�, claro.

Qu� agradable sorpresa
que viniera a San Francisco.

Pero es un viaje innecesario.
�Puedo ayudarla?

No tengo nada que me retenga en Reno.

Y quer�a estar en el sitio
cuando atrapara a la basura.

Se�ora Kraft, yo no dije
que �l estuviera aqu�.

- �Entonces por qu� vino aqu�?
- Cierto joven vino aqu�.

Recuerdo haberlo visto
afuera de la casa de la se�ora Palmer...

...en la polic�a, en la funeraria
donde la se�ora Palmer estaba.

Pobre Laury.
Espero que ya est� en el cielo.

Aunque no s� si Laury
se divertir�a mucho all�.

Contin�e, �el hombre que vio
en la funeraria es el que la asesin�?

No. Pero me dio una pista.

�De qu� sirve una pista?
Ya era hora de que hubiera encontrado algo.

Se�ora Kraft...

...en unos d�as, mis sospechas
o ser�n verificadas...

...y tendremos nuestra presa...

...o le habr� fallado.

Lo cual ser� muy doloroso
para un hombre de mi integridad.

No doler� ni la mitad
de lo que me duele perder 500 d�lares.

Hablando de dinero,
tengo una peque�a cuenta de gastos...

...que pens� en dejar con usted,
por viajes y accesorios.

Vaya, usted realmente se infla
con esos asuntos de accesorios, �no?

Muy bien, se�ora Kraft.

Gracias.

- �S�?
- �C�mo le va, se�ora Kraft?

�Qui�n es usted?
Quite el pie de mi puerta.

De lo que quiero hablarle
tiene relaci�n con Laury Palmer.

Gracias.

� Y bien?

No esperar� que se lo diga as� no m�s.
No es factible.

�Cu�nto me va a costar?

Bueno, no har� mucho,
as� que no necesitar� mucho.

- Cien d�lares me har�an muy feliz.
- Ahora, me imagino.

No. Le demostrar�
que soy totalmente honesto.

Esta noche estar� bien, despu�s
de que yo le muestre lo que busca.

Me parece justo.

�C�mo se enter� usted de esta informaci�n?

A trav�s de conexiones con el hampa,
como dice en los diarios.

- Soy un chico malo.
- S�, �eh?

- T�mese una cerveza.
- No, gracias. Me hace dar sue�o.

- No me gusta.
- A m� me encanta.

Es lo que m�s me gusta en el mundo.

Yo tambi�n quer�a a Laury.

S�, estoy en la recta final de mi vida,
y Laury era todo lo que ten�a.

Laury y la botella.

Bueno, no hay nada
que pueda hacer por la botella...

...pero no defraudar� a Laury.
- As� es. Usted y Laury permanecen juntas.

Se�ora Kraft, aqu� hay un mapa
de San Francisco y sus alrededores.

� Ve esta esquina que marqu� aqu�?

Ser� mejor que se la escriba.

Tome un taxi esta noche
y conduzca all�...

...sola.

- Yo la estar� esperando.
- �A qu� hora?

A las once en punto.

Recuerde, chica glamorosa,
har� esto con una condici�n.

- �Cu�l?
- Que no flirtee conmigo...

...cuando me vea all�.
Soy un chico muy t�mido.

�S�?

�Te vas a acostar ya?

No. Iba a leer.
�Quer�as hablarme de algo?

S�.

Quer�a hablarte sobre Sam.

Sam es un tipo estupendo,
pero es algo impulsivo.

Bueno, es la clase de hombre que golpea
primero y hace preguntas despu�s.

Ahora, t�...

Creo que t� eres diferente.
Creo que t� entiendes las cosas bien.

Por eso me arriesgu� a darme
contra un muro y vine esta noche.

Como yo lo veo, no es factible
que Sam y t� sigan...

Bueno, lo que quiero decir es...

...Sam tiene una esposa encantadora y t�
est�s comprometida con el se�or Grover.

- S�, as� es.
- No te enojes.

Me estoy enojando. No me gusta que la
gente se meta en algo que no les concierne.

T� crees que no me concierne.
Me concierne si involucra a Sam.

Entonces disc�telo con Sam.

Trat� de hablarte de �l.
�I no escuchar� lo que tengo para decir.

Y yo no estoy interesada.

Bueno, de todas formas me desahogu�.

- Buenas noches.
- Buenas noches.

- �Qui�n es?
- Soy yo, Sam. �Puedo pasar?

S�.

Bueno, encontr� al cliente.

Est� en el hotel Felton.
Se apellida Kraft.

- Era la amiga de Palmer.
- �S�?

Lo tengo todo arreglado.
La ver� en un rato.

Qu� chica tan glamorosa.

- Sam.
- �Qu�?

�Est�s seguro que as�
es como quieres manejar esto?

- �Por qu�?
- S�lo preguntaba.

- No me importa si es la mejor forma.
- Estoy seguro que quiero manejarlo as�.

Est� bien.

�Has pensado qu� haremos
con el detective?

- No.
- Bueno, no te preocupes por eso.

Hemos solucionado todo
hasta ahora, �no?

- S�.
- Adi�s.

Adi�s, Mart.

- �Cu�nto?
- $2.70, por favor.

- Guarde el cambio.
- Gracias.

�Segura que �sta es la esquina?

No hay autobuses ni tranv�as
por aqu� si se queda sola.

- �sta es.
- Est� bien, se�ora.

- Hola, chica glamorosa.
- Hola.

Bueno, ahora que estamos los dos aqu�,
podemos irnos.

- �Irnos?
- Debemos caminar un poco.

Hacia all�.

- No le importa, �verdad?
- Claro que me importa.

No estoy hecha para andar por la arena.

Yo le ayudar� si se pone dif�cil.
Puede confiar en m�, chica glamorosa.

Esto me est� sacando
las piernas de las caderas.

- �Cu�nto m�s debemos caminar?
- No m�s.

Bueno, no veo nada aqu�.
�Qu� tiene para mostrarme?

La moraleja es, no contrate detectives.

Con calma, chica glamorosa.

No deber�a sentirse tan mal.
Ha tenido una larga vida.

Usted no es una pollita, sabe.

- Chica glamorosa.
- �Qui�n es?

- Yo, Mart. Tu viejo amigo Sam.
- �Qu� pasa contigo, Sam?

Sam, �de qu� se trata esto?

Sam, quita ese cuchillo. �Qu� hice yo?
Vine hoy aqu� por ti.

- Tambi�n fuiste por m� al cuarto de Helen.
- S�. Trataba de ahorrarte problemas.

- �En su cuarto?
- No fue lo que pareci�.

- No lo fue. Lo juro, Sam.
- �No?

Sam, quita ese cuchillo
para que pueda hablarte.

Sab�a que me escuchar�as, Sam.

Esto fue lo que pas�, Sam...

Est�s loco, Sam.

Se�ora Brent. Se�ora Brent.

La polic�a est� abajo, se�ora Brent.

Dicen que el se�or Waterman
fue asesinado anoche.

Bajo enseguida.

- Grace.
- �S�, se�ora?

- � Ya les dijiste al se�or y a la se�ora Wild?
- S�, se�ora Brent.

�Cu�nto tiempo llevaba el se�or Waterman
en su casa, se�ora Wild?

Como una semana.

�Alguien lo llam�
o lo visit� durante ese tiempo?

No, se�or.
Nadie que yo sepa.

Se�or Wild, �cu�l era exactamente
su relaci�n con el se�or Waterman?

Era amigo m�o. Un buen amigo.
No hab�a tenido suerte �ltimamente.

�Tiene idea de por qu�
estaba en las dunas anoche?

- No.
- �Cu�ndo lo vio por �ltima vez?

Fue a mi habitaci�n
por unos minutos como a las 9:30.

Hablamos y luego dijo que saldr�a
un rato y se fue.

- �No dijo ad�nde iba?
- No.

Entiendo. Bueno,
�a qu� hora dijo que fue eso?

Como a las 9:30. Estoy seguro, porque
no pod�a dormir cuando se fue, y yo...

Le ped� a la se�ora Brent que jugara
cartas conmigo un rato.

Mi esposa ten�a dolor de cabeza
y se fue a dormir despu�s de cenar.

�Cu�nto tiempo jugaron cartas
usted y el se�or Wild, se�ora Brent?

Como hasta la media noche.

Bueno, creo que eso es todo por ahora.

Pero tal vez tengamos que volver.

Por supuesto. Cuando quieran.

Gracias.

- Adi�s.
- Adi�s.

Bueno, ir� a ponerme algo de ropa.
� Y t�, Helen?

No, creo que antes
me tomar� un caf�.

Querido, s� lo horrible
que esto es para ti.

Tonto. Est�pido tonto loco.

�Crees que el mundo es tuyo?
�Que puedes destruirlo, hacerlo pedazos?

Usa esa cabezota que tienes
antes de arruinar las vidas de todos.

- �Por qu� no pensaste en lo que hac�as?
- Sab�a lo que hac�a.

Lo har� siempre que alguien
se burle de m�.

�Qu� quieres decir?

Vi a Mart saliendo de tu cuarto.

�Quieres decir que lo asesinaste por eso?

Y t� dijiste que hay que saber
lo que se quiere...

...y conseguirlo como sea.

T�, que dejas que todo capricho
loco que se te ocurre te domine.

Apuesto que hasta me matar�as a m�
si hiciera algo que no aprobaras.

Tal vez lo har�a.

�Por qu� estaba Mart
en las dunas?

- �Qu� importa? Est� muerto.
- Olvidas que yo tambi�n estoy en esto.

No creas que no odi�
cometer perjurio ante la polic�a.

- �A qu� fue all�?
- A ver a la vieja Kraft, la amiga de Palmer.

- Iba a deshacerse de ella.
- �Eso fue idea tuya?

�Por qu� no?
Me envi� a un detective.

� Y si la matabas,
qu� pasaba con el detective?

- Habr�a pensado en algo.
- T� y tu gran cerebro.

Habr�as pensado en algo que seguramente
habr�a arruinado las cosas.

- �D�nde encuentro a la se�ora Kraft?
- �Por qu�?

�Por qu� crees?
Para arreglar tu metida de pata.

- Siquiera tengo una amiga tan ingeniosa.
- Puedo hacerlo mejor que t�.

Y no necesitar� cuchillos
ni instrumentos afilados.

�S�?

Soy Helen Brent. Cuando llam� de abajo,
usted dijo que me recordaba.

Ah, s�.

- Se ve enferma.
- No dorm� muy bien anoche.

- Ellos son amigos suyos.
- �Qui�nes?

Esos dos carniceros
que trataron de asesinarme.

Dice que uno de ellos
est� casado con su hermana.

Se�ora Kraft, el se�or Wild
no trat� de asesinarla.

Tal vez no.
Pero el otro s�.

Pens� que me ten�a,
pero se equivoc�.

Dijo que hab�a vivido lo suficiente,
pero el chiste era para �l.

�I es el que est� muerto.
Yo estoy vivita y coleando.

P�seme la cerveza, �quiere?

Fue el se�or Wild el que le salv�
la vida, �no?

Pero �l mat� a Laury.

- �Qu� la hace pensar eso?
- �I fue. Lo s�.

Apenas me vista,
ir� con la polic�a.

Si va con la polic�a, ver� a Laury
m�s pronto de lo que piensa.

- �Est� tratando de asustarme?
- S�lo le advierto.

Tal vez no se da cuenta.
Es doloroso ser asesinada.

Un trozo de metal
entrando en su cuerpo...

...buscando el camino a su coraz�n. O una
bala rompiendo su piel, llegando al hueso.

Tambi�n toma tiempo morir.
A veces mucho tiempo.

- �Pero yo no morir�!
- Le digo que s�.

Estoy tan cansada.
�No puede dejarme en paz?

�Importa mucho
que este hombre no sea atrapado?

Usted es la mujer m�s fr�a
que he visto, y la m�s podrida por dentro.

Y he visto a muchas.

No cambiar�a de lugar con usted
aunque me hicieran pedazos.

�Usted quiere vivir o quiere morir?

Laury, Laury, te fall�.

Usted entiende que si Sam Wild es
entregado a la polic�a por alguna raz�n...

...su vida se acaba.

S�.

- Adi�s.
- Espere.

Ser�a una mala anfitriona
si no la acompa�ara a la puerta.

�Mala suerte para m�?

No es necesario que yo lo diga.
Usted lleva su propia maldici�n por dentro.

- Sam. Sam, �ad�nde vas?
- Afuera.

He esperado todo el d�a
por una oportunidad para hablarte.

Vi a la se�ora Kraft.
Fue horrible.

Ya no tienes que preocuparte por ella.

Fred llegar� pronto. Le pedir�
el dinero para mantener a Arnett callado.

�Por qu� te est�s esforzando tanto?

�Minti�ndole a la polic�a, callando a Kraft,
pidi�ndole dinero a Grover?

- Helen Brent no se molesta por esas cosas.
- Bueno, ninguna es muy agradable.

�Entonces por qu� las haces?

- Ah, Sam.
- Bueno, �por qu�? Me gustar�a saberlo.

Por el bien de Georgia.

Est� bien. Por mi bien. Por el nuestro.
�Ahora est�s satisfecho?

No me gust� hacerlas.
Odi� hacerlas.

Y te odio por obligarme a hacerlas.

Yo no te estoy forzando a hacer nada.

Lo s�.

Sam.

Regresa a la media noche.
Te estar� esperando.

Quieres que regrese
sabiendo lo que sabes, �no?

Muy bien.

Nos vemos a la medianoche.

Sam, llevas un arma.

Claro. No se sabe cu�ndo
pueda necesitar una.

No se sabe cu�ndo me convierta
de repente en un sospechoso.

Un momento, por favor.

Hay un se�or Arnett al tel�fono,
se�ora Brent, y el se�or Grover est� aqu�.

Ah, dile al se�or Arnett que no estoy.
Que llame despu�s.

Eran tan buenos amigos.
Pero Sam lo est� tomando muy bien.

- Hola, querido. Georgie.
- Hola.

Bueno, tengo varias cosas que atender.
Nos vemos luego.

Claro.

- Muy horrible, ese asunto de Mart.
- S�, �no crees?

- Te ped� que no lo trajeras a esta casa.
- S� que lo hiciste, y ten�as raz�n.

- Lamento mucho no haberte escuchado.
- Bueno, eso ya pas�.

- Helen, tengo algo que...
- Querido, quiero...

- Adelante.
- No, lo m�o puede esperar.

�Qu� ibas a decir?

He estado pensando.

Siento que el casarnos
ser�a un error.

�Quieres decir que ya no est�s
enamorado de m�?

Ojal� no lo estuviera.

- Fred, �de qu� se trata esto?
- El punto es, Helen, t� no me amas.

Creo que lo s� hace mucho tiempo,
pero he evitado pensar en ello.

�Lo que yo diga no importa?

Lo que t� dices y lo que sientes
son cosas muy diferentes.

Desde que te conozco, te has vuelto
m�s amorosa, m�s segura mentalmente...

...pero tambi�n me parece que cuando
te conoc�, ten�as un coraz�n.

Creo que ya no lo tienes.

S�lo soy una mujer fr�a, �no?

Te agradar�a saber que no eres
el primero en decir eso.

No sab�a que alguien m�s podr�a ver
bajo esa brillante superficie tuya.

�Por qu� no puedes, Helen,
antes de que sea tarde?

�Tarde?
Qu� palabras tan siniestras.

�Tarde para qu�, para rezar?

Una vez me dijiste que siempre caer�as
parada, sin importar lo que pasara.

- No siempre lo har�s, Helen.
- �C�mo te atreves a decirme eso?

�Qui�n eres t� para ser
tan engre�do y hacerte el santo?

- No quise decirlo as�.
- �Eres tan perfecto que puedes humillarme?

Siento que tuvi�ramos que terminar as�.

�Fred!

�Fred!

Fred, no te vayas. No.

Si me dejas, no tengo oportunidad.
Qu�date y ay�dame.

La persona que dijo que yo era fr�a
tambi�n dijo que estaba podrida por dentro.

Bueno, parte de m� lo est�, pero no estoy...

No lo estoy del todo.
A�n no, Fred.

Luchar� contra eso.

Luchar� contra eso,
y estar� bien si t� me ayudas.

- Me temo que no puedo.
- Fred, por favor.

- Si pudiera lo har�a, pero...
- Te necesito. Te necesito terriblemente.

T� viste la suficiente bondad en m�
para enamorarte.

- A�n est� ah�.
- Lo dudo, Helen.

Has cambiado mucho.

Especialmente desde que Sam
lleg� a esta casa.

�Por qu� tendr�a Sam
alg�n efecto sobre m�?

No lo s�. �Por qu�?

Ahora entiendo.

Sam es la raz�n
por la que piensas as�.

T� nunca ves nada,
excepto lo que quieres ver, �no?

Sam.

�Sam!

Se�ora Brent, el se�or Arnett est� al
tel�fono de nuevo. �Quiere hablarle ahora?

S�.

- Hola.
- Hola, se�ora Brent.

Por alguna extra�a circunstancia,
mi cliente decidi� abandonar su b�squeda.

Tengo una ligera sospecha sobre lo que
pudo causar un cambio tan abrupto...

...pero no cometa el error de pensar que yo
puedo ser convencido tan f�cilmente.

Nada salvar� a su se�or Wild
excepto la suma que le indiqu�.

- Quince mil d�lares, y de inmediato.
- No los obtendr� de m�, Arnett.

El caballero en cuesti�n
ya me ha costado demasiado.

Espero que entienda
que no estoy mintiendo.

La polic�a estar� all�
una hora despu�s de esta conversaci�n.

No ser� lo suficientemente r�pido
para sacarlo de mi vida.

�I regresar� a la casa a la media noche.
Y le advierto que est� armado.

�Usted recuerda el vers�culo
de la Biblia, se�ora Brent?

Es m�s amarga que la muerte...

...la mujer cuyo coraz�n
es de trampas y redes.

Y quien caiga bajo su hechizo...

...necesita la piedad de Dios.

�D�nde est� Fred?

Se fue.

Para siempre.

�Para siempre?

Helen, lo siento tanto.

- �Te gustar�a cont�rmelo?
- No.

Tal vez alejarse un tiempo
har� bien.

Podr�amos hacer un viaje a Florida,
s�lo t�, Sam y yo...

...y podr�amos tener...
- Georgia. Debo hablarte sobre Sam.

�I realmente no significa
mucho para ti, �verdad?

Pero, Helen, �qu� dices?

Georgia...

...Sam ser� arrestado.

- �Qu�?
- �I asesin� a Mart.

�I mat� a la gente que encontr� en Reno.

En serio, Helen. �Sam asesin� a Mart?
�Sam mat� unas personas en Reno?

- Te digo que as� es.
- Si esto es una broma...

Mira, no tenemos mucho tiempo.
La polic�a vendr� a la medianoche.

Quiero que est�s preparada.

No lo creo.

Hay pruebas, Georgia.

Hay huellas dactilares en Reno.

Le conseguiremos el mejor
abogado de la ciudad.

No importa qu� pase,
t� y yo nos iremos.

- Estar�s bien. �Ad�nde vas?
- A empacar sus cosas.

- �I tiene que irse de aqu�.
- No.

Ser�a peor si tratara de escapar. La polic�a
puede tener hombres cerca de la casa.

Pero tenemos que hacer algo.
Cuando Sam llegue aqu�...

Sube a tu habitaci�n. Est�s alterada.
�I sabr� que algo anda mal.

�Crees que dejar� que mi propio
esposo caiga en una trampa?

Georgia, Sam es un asesino.
Un loco.

�C�mo puedes soportar
siquiera mirarlo de nuevo?

No s� c�mo, pero yo...

Helen, a�n no puedo creer
que �l haya hecho esto.

Por supuesto que no.
Entiendo que ha sido una sacudida terrible...

...y t� nunca has tenido que soportar eso.
Tu dinero siempre te ha protegido.

- �Qu� tiene que ver mi dinero con esto?
- Nada, por supuesto.

T� llamaste a la polic�a.

- Tuve que...
- �Hace cu�nto tiempo lo sabes?

- Unos d�as, supongo.
- Y apenas hoy decidiste...

...llamar a la polic�a.
- �Qu� est�s...?

Fred termin� contigo hoy, �no?
Estabas dispuesta a dejar ir mi dinero...

...si ten�as el de Fred. Pero �l se alej�.
- Rid�culo.

Viste que no tendr�as ni su dinero ni el m�o.
Ten�as raz�n. No lo tendr�s.

Georgia, escucha.

Lo que sea que haya hecho,
yo te he querido.

S�lo quieres mi dinero.
Por eso has estado junto a m�.

- Silencio.
- Bueno, te dir� esto.

No tendr�s ni un centavo mientras yo viva.
Y cuando muera, tampoco lo tendr�s.

- Me encargar� de eso en la ma�ana.
- Basta.

- Est�s acabada en cuanto a m� concierne.
- Tonta. Est�s loca.

S�, por lo menos
estoy loca de amor por un hombre.

T� est�s loca por el dinero
y por ti misma.

Loca por un hombre
al que no le importas nada.

�Crees que puedes desquitarte de m�
as�, dici�ndome que Sam no me ama?

Te mostrar� cu�nto te ama.

Qu�date ah� y escucha.

Sam.

Sam.

- Las cosas se est�n complicando.
- �Qu� pas�?

Tengo miedo por ti.

- V�monos juntos, t� y yo.
- S�.

- Esta noche. Ahora mismo.
- S�.

L�rguense de aqu�.

Los dos, fuera.

Ella jam�s nos dejar�a
ser felices mientras viva.

- Dije que se fueran.
- �Me oyes?

Ella no quiere que nos vayamos.
No podremos estar juntos hasta que muera.

S�, creo que tienes raz�n.

Te amaba tanto, Sam, que te habr�a salvado
sin importar lo que pasara.

Tal vez Helen tuvo raz�n al llamar
a la polic�a. Ya no entiendo nada.

Abran. Es la polic�a.

T� llamaste a la polic�a.

- T�.
- �Por qu� llamar�a yo a la polic�a, Sam?

- No s� por qu�, pero lo hiciste.
- No le creer�s eso a Georgia.

- S�, pienso que le creo.
- Abran. Abran la puerta.

- Tendremos que dejarlos entrar.
- No te acerques a esa puerta.

�No, Sam!

�Sal de ah�!
Soy yo, Sam, �recuerdas?

�sta es nuestra noche. Tenemos tiempo
para unos besos antes de que me atrapen.

Eso te encantar�a, �no? Est�s loca por m�,
�no lo recuerdas?

Sam, est�s loco.
Deb� saber eso hace mucho tiempo.

- Por favor s� razonable.
- Sal, querida.

�Sam! �Sam!

Se�ora Brent.

- Ah� adentro.
- Claro.

- Llamen a una ambulancia.
- Bien.

No le servir� de nada a este hombre.

Nunca debi� haberse quedado en la casa.
Era arriesgarse demasiado.

S�.

- Me arriesgu� demasiado.
- Bueno, yo no me preocupar�a.

- Todo estar� bien.
- No.

No, no es as�.

Fred ten�a raz�n.

Esta vez, no ca� parada.

�MUERTE EN LA SOCIEDAD!
POLIC�A MATA A ASESINO

Se�ora Helen Brent
Asesinada por Cu�ado

El camino del transgresor es dif�cil.

M�s es la l�stima. M�s es la l�stima.