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SOUTHAMPTON, INGLATERRA
1936

D�AS SIN VIDA

WHEELER JOHN - ALIANZA
DE PERI�DICOS NORTEAMERICANOS

Ese art�culo apareci�
en el Daily Express,,

el peri�dico de Lord Beaverbrook.

Gracias.

Gracias, Srta. Brill.

El de las mujeres de los ministros
le pareci� demasiado pol�mico,

as� que se lo vend� al Daily Mail..

Al parecer, le apasiona desacreditar
a los famosos.

Eso vende, �no?

�ste interesar�a a muchos lectores.

"En estos tiempos dif�ciles,

�una esposa elegir�a
un coche o un beb�?".

Un coche, por supuesto.

"La visi�n de los hombres
de una corista londinense".

�Tambi�n fue corista?

Si no, no podr�a haber escrito
ese art�culo.

Pero ha dicho que naci�...

Hasta una duquesa puede ser corista

si tiene unas buenas piernas,
Sr. Wheeler.

S�lo pretend�a documentarme
para el art�culo.

Ah� fue donde conoc� a Lord Donegall.

- �Qui�n es?
- Mi prometido, el marqu�s de Donegall.

Una noche vino al espect�culo

y sin saber siquiera qui�n era yo,
me envi� una nota.

Lo cierto es que me sent�
muy orgullosa de m� misma.

Le dej� que me invitara a cenar
y cuando averigu� qui�n era yo

le hizo much�sima gracia.

�Y todav�a va a casarse con �l?

Desde luego. Alg�n d�a.

A la que no soporto es a su madre,
la vieja marquesa viuda.

As� que Don pens� que tal vez
unos meses en Estados Unidos

me calmar�an un poco, y...

cuando la vuelva a ver,
quiz� no me saque tanto de quicio.

Espero que encuentre algo
para m� que valga la pena.

- P�ngame con Fred Johnson del Mirror.
- Enseguida.

Sin duda escribe buenos art�culos.

Johnson es el director del Mirror.
Nos publican muchos art�culos.

Fred, �va todo bien?

Escucha, tengo aqu�
a una chica... a una dama.

- Eso he dicho.
- �Qui�n? �Sheilah Graham?

S�, John.

No. No he o�do hablar de ella.

Pues ya oir�s.

Y otra cosa:
esta chica conoce a todo el mundo.

Es amiga de Lord Beaverbrook.
Conoce a todo bicho viviente.

�Al pr�ncipe de Gales?

Desde luego.

No se lo pierdan.

A la Sra. Wallis Simpson le han concedido
el divorcio. �El peri�dico?

Aviones rebeldes bombardean Madrid.

Nueva columna de Sheilah Graham:
"�Es el matrimonio algo obsoleto?".

Sheilah, me ha llamado mi mujer y dice
que si vuelvo a mencionar tu nombre

- ...llamar� a un abogado.
- �Ha le�do el art�culo?

Lo han le�do todas las mujeres.
Yo estoy teniendo problemas con la m�a...

Ah� viene John.
S� valiente, y si necesitas ayuda...

no nos llames a nosotros.

- Woody, Frank. �Qu� tal?
- Tenemos que coger un tren.

- Feliz Navidad.
- Feliz Navidad.

Feliz Navidad.

Espero que lo sea.

Es un gran art�culo,
pero en un peri�dico de la oposici�n.

Se lo ofrec� primero al Mirror.

"�Qui�n es m�s infiel en el matrimonio?".

- Los ingleses encabezan la lista.
- Son los que conozco mejor.

"Los alemanes son demasiado sosos.
Los franceses no lo ocultan".

"Si la principal ocupaci�n de las americanas
no fuera una pensi�n,

los americanos ser�an los m�s infieles".

Por eso me despidi� Johnson.
Est� pagando tres pensiones alimenticias.

La verdad es que tus art�culos venden.

Ya te dije que lo har�a.

Tengo un regalo de Navidad para ti.

Un contrato de un a�o.

Vaya, gracias.

Pero no estoy segura.
Donegall me suplica en una carta que vuelva.

Rescindir� el contrato
el d�a que te cases.

No...

Mientras tanto, te subir� el sueldo.

�Cu�nto?

El doble de lo que te daban
en el Mirror.

Quiero que escribas
una columna desde Hollywood.

�Hollywood?

�Sabes, John? Creo que eso me gustar�a.

Trato hecho.

No, Jack. Eso no es verdad.

Puedes hacer lo que quieras,
pero no la voy a excluir del estudio.

Lo estoy llevando a mi manera,
personalmente.

De acuerdo, Jack. Hablamos luego.

- �C�mo est�?
- Muy bien, gracias, Sr. Harris.

- �Y usted?
- Bien. Si�ntese.

- Me alegro de que haya podido venir.
- Y yo, de haber podido entrar.

La verdad es que es Ud. una figura
muy pol�mica esta ma�ana.

Harry, si me necesitas cuando hables
con Nueva York, estar� en el plat� 10.

- Adi�s, Sheilah.
- Adi�s. Gracias.

Ha sido un placer.

- �Me acompa�a al plat� 10?
- Me encantar�a.

Quiero que vea c�mo rodamos
unas escenas de The O'Learys.

Ah, s�... La vaca que volc� la l�mpara
que provoc� el incendio de Chicago.

Janet Pierce.

Tengo curiosidad, Sheilah.
�Qu� tiene contra Janet Pierce?

Personalmente, nada de nada.

�Y por qu� la vapule� en su columna?

S�lo dije la verdad,
no sabe actuar.

Dada su posici�n,
algo as� puede ser muy perjudicial.

Incluso para una estrella
tan consolidada como Janet.

�Lo considero un cumplido
o una bronca?

Consid�relo una responsabilidad.
Ahora es miembro de la comunidad.

Tambi�n puede ser un poco constructiva.

Bueno, supongo que s�.

Aunque creo que tiene una idea exagerada
del poder de mi columna.

Tengo entendido
que la Srta. Pierce est� arrasando.

Afortunadamente para el estudio,
es cierto.

Los Cooper han invitado
a alguna gente despu�s de cenar.

Venga primero a mi casa e iremos juntos.

Me encantar�a, pero,
�les encantar� a ellos?

Pues claro.
Viene Ronnie Colman. Ya le conoce.

- S�, un poco.
- Y estar� Janet Pierce.

- Es usted muy amable. Me encantar�a.
- Bien.

Est�n ensayando.

Janet, cuando veas a Dion en el espejo,
reacciona un poco m�s r�pido.

Silencio, por favor. Vamos a rodar.

- C�mara.
- Rodando.

- Listos.
- Acci�n.

- �Vete!
- Belle, escucha...

- �Vete!
- Esc�chame...

�Vete de aqu�!

No. �Socorro! �Hattie!

�Vete de aqu�!

Corten.

�Qu� pasa? Ibas muy bien.

- �Por qu� has parado?
- Perdona, Bill. Tenemos una visita.

- S�. Es Sheilah Graham.
- Ya s� qui�n es.

Cuando se vaya, estar� en mi camerino.

Querida, el borrador
de esta ma�ana es fant�stico.

�Y t�? T� has estado genial.

Gracias.

- Est� aqu� Sheilah Graham.
- �Aqu�, en el plat�?

S�. Quiere escribir un art�culo sobre ti.

- Hola, Srta. Pierce.
- D�game, Srta. Graham.

�C�mo una mujer tan guapa como usted
puede ser la m�s bruja de Hollywood?

Y lo digo en el peor de los sentidos.

�Y bien, Srta. Graham?

No la m�s bruja. La segunda m�s bruja.

Stan, �por qu� traes
a estas arp�as al plat�?

No la m�s bruja, Janet.
La segunda m�s bruja.

Ser� un momento.

Perdona, John,
es que me alegro mucho de verte.

Si te alegraras m�s,
necesitar�a un flotador.

Perdona, John. Lo necesitaba. Llevo todo el d�a
compadeci�ndome de m� misma.

Eres la �nica de Hollywood
que se compadece de Sheilah Graham.

- Si�ntate.
- No puedo quedarme.

He parado de camino al aeropuerto
para avisarte.

Si sigues atacando a la gente,
te dar�n un portazo para siempre.

- Eso no le conviene a una columnista.
- As� es como veo Hollywood,

y si lo ataco,
es mi privilegio como periodista.

No me importa que mis columnistas
sean pol�micos. Eso vende.

Pero cuando se exceden, surgen problemas.

Est�n amenazando con retirar
publicidad de los peri�dicos.

Por favor, cede un poco.

La mejor forma de fracasar
es intentar complacer a todo el mundo

y escribir una buena columna.

T� ya me entiendes, Sheilah. Afloja un poco.
Voy a perder el avi�n a San Francisco.

- �Te tienes que ir ya?
- Volver� dentro de diez d�as.

- Bueno.
- Si te portas bien y me haces caso,

podr�a conseguirte un programa
de radio semanal, como el de Louella.

- No se lo digas a nadie.
- De acuerdo.

Adi�s, John.

Corten. Positivado.

Sab�a que escrib�as esos cortos,
pero no que actuases en ellos.

- Necesitaban a un actor sin talento.
- Venga.

- �Se ha ido lord Donegall?
- S�, el domingo.

Oye, �tienes alg�n chisme
para mi columna?

No, pero ma�ana doy una fiesta.
Quiero que vengas.

Oh, Bob, me encantar�a,

pero llevo dos semanas ense��ndole
a Don la ciudad y estoy agotada.

Venga.

Es un cumplea�os. Tendr�as
una semana de material para tu columna.

- Estamos listos, Sr. Carter.
- Gracias.

- Por favor, ser� divertido. No te vayas.
- No, est� bien.

- Rodando.
- Acci�n.

Hoy abordaremos un problema dom�stico

tan com�n como abrir
una lata de sardinas.

Lo inteligente es usar un abrelatas.

Pero si no tienen uno,
pueden usar muchos otros utensilios.

El picahielos.

No tienen m�s que clavarlo en la lata.

Y utilizar un buen cuchillo...

Ya est�. No s�lo han recuperado
la lata de sardinas,

sino que tienen la sugerencia del d�a:

c�mo convertir
una mesa de cocina en un jard�n.

Corten. Positivado.

Se�oras y se�ores,
quisiera proponer un brindis.

Por Scott.

Uno de los grandes novelistas
en lengua inglesa.

Y yo lo s� mejor que nadie
porque como castigo

me obligaron a leerle
desde que ten�a seis a�os.

No me refiero a este impostor,
F. Scott Fitzgerald.

Me refiero al verdadero Scott:
sir Walter Scott.

Y para rendir homenaje a sir Walter,
el creador de Ivanhoe...

No s� por qu� deber�amos hacerlo.

En cambio, voy a proponer un brindis
por la compa��a el�ctrica Westchester,

que me cort� la luz
y me oblig� a venir a Hollywood,

donde puedo permitirme dar fiestas as�.

Est�s de suerte. Vas a bailar conmigo.

Deje de mirarme as�.
Est� haciendo que me sonroje.

�Ah, s�?

Tiene una carita muy sensible.

Como columnista es dur�sima.

- Y se va a casar con un lord, �no?
- S�, s�.

�Aut�ntico?

- �Corona, capa de armi�o y dem�s?
- Por supuesto.

Todas las ma�anas para desayunar.

�La educaron para eso?

Absolutamente.

�C�mo puede combinarlo todo?

Belleza, inteligencia, influencias...

�Y qu� va a ser?
�Una duquesa? �Una dama?

- Una marquesa.
- �Lo ve?

Es Ud. un rompecabezas.

Claro que lo soy. Soy incre�ble.

�Qu� mira ahora?
Ya sabe todo lo que quer�a saber.

�Cu�l es el alegre y cu�l es el triste?

�A qu� se refiere?

A los ojos. Todo el mundo
tiene uno triste y uno alegre.

�Cu�l es mi ojo triste?

��ste?

Muchas gracias.

Le dir� otra cosa sobre los ojos.

Un ojo gris es un ojo malicioso
y un ojo marr�n es un ojo brib�n,

pero un ojo leal es azul.

Y los suyos son muy azules.
De eso no hay duda.

Y los suyos, marrones.
De eso tampoco hay duda.

�Qu� va a hacer al respecto?

Bien, dadas las circunstancias,
no puedo hacer gran cosa.

Cene conmigo.

No quiero perderla.

- �Cu�ndo?
- Ma�ana.

�Hola?

Hola, Scott.

Siento llamarte tan tarde.
Sigo en el estudio.

Stan Harris quiere que cene con �l
para hablar de un nuevo trabajo.

Ten�a que ser precisamente esta noche.

Me temo que se acab� nuestra velada.

No tiene por qu� ser as�.

Si te apetece, �por qu� no vienes
cuando termines? Estar� levantada.

Ah� estar�.

De acuerdo.

HOY EN HOLLYWOOD
CON SHEILAH GRAHAM

W. C. FIELDS ABANDONA LA RADIO

- Hola, Sheilah.
- Hola, Scott. Pasa.

- �C�mo ha ido hoy en el estudio?
- La verdad es que no lo s�.

Tiene una historia que
me encantar�a hacer.

Ser�a una suerte para ellos.

Bueno...
Gracias por el voto de confianza.

�l no est� tan seguro
de que sea un buen guionista.

Me gusta tu casa. Es acogedora.

- Gracias... Te sirvo una copa.
- No, gracias.

- �Est�s seguro?
- S�.

�Eres t�?

S�. A la tierna edad de tres a�itos.

- �Qui�n es este diablillo?
- Mi hermano, Derek.

- �ste debe de ser tu padre.
- No, es mi abuelo, sir Richard.

Va vestido de cazador.
Era se�or de los Devon Staghounds.

Le apasionaba la caza.
Caz� hasta los 80 a�os, creo.

Incre�ble.

�sa es de cuando
fui presentada en la corte,

en el palacio de Buckingham.

- �El palacio de Buckingham?
- S�.

- �Quieres...?
- �Salimos...?

- �Salimos fuera?
- A ver la vista, s�.

Y ahora h�blame de ti.
�Hay muchos Fitzgerald?

No, los Fitzgerald de Minnesota
escasean �ltimamente. S�lo estoy yo.

Escog� esta casa s�lo por la vista.

Y vaya acierto.

Aqu� arriba hay poco ruido.
Se duerme muy bien.

Cuando te metes en la cama...

No respiro bien cuando estoy contigo.

�Sabes que esto es un error?

S�, lo s�.

Quietos.

Gracias.

Tiene un gran sentido del humor.

Scott y t� sois amigos desde hace tiempo.

Fui el padrino de su boda.

Lo conozco tanto como se deja conocer.

- No habla mucho de s� mismo.
- No, no mucho.

- �C�mo es su mujer?
- �Zelda?

Era joven y guapa.

No hab�a fiesta que se preciara
sin los atractivos Fitzgerald.

Zelda bailaba encima de las mesas.

Los dos se metieron vestidos
en la fuente del hotel Plaza.

- �D�nde est� ahora?
- En Asheville, Carolina del Norte.

- �Est�n divorciados?
- No.

Zelda est� en un sanatorio
para enfermos mentales.

Tienen una hija. Ten�a unos 13 a�os
cuando Zelda sufri� la crisis.

Scott la intern� en un colegio.

Acudi� a especialistas de todo el pa�s
para que ayudaran a Zelda.

Se qued� sin dinero y se dio a la bebida.

La iron�a de toda esta situaci�n...

Scott, uno de los novelistas
m�s distinguidos de Estados Unidos,

est� en Hollywood
aceptando cualquier trabajo,

intentando ganar el dinero suficiente
para pagar los gastos m�dicos

y los estudios de su hija.

�Desean pedir ya?

�T� qu� quieres?

No s�. Una macedonia o algo as�...

Buenas. Recib� tu mensaje para almorzar.
Estaba ocupado con Stan Harris.

Gracias por no venir.
La he tenido para m� solo.

Nos vemos en el hotelucho.

- �Has comido?
- Todav�a no.

Tengo que ir a MGM.
Voy a entrevistar a Gable.

Vaya. Te acompa�o al coche.

�Alguna noticia?

- Me han dado el trabajo.
- Cari�o, qu� maravilla. Lo sab�a.

Lo mejor es que es una historia
que me encanta desde hace a�os.

Por fin tengo un gui�n
que podr�a salir bien.

�Y sabes qu� m�s significa para m�?

Dinero. Mucho dinero.

- Nada m�s que dinero.
- Qu� emocionante.

- �Cu�ndo empiezas?
- El lunes temprano.

- Vay�monos el fin de semana.
- Es una idea estupenda.

�No hay alg�n desierto,
alguna monta�a, M�xico o algo as�?

Eso est� hecho.

JUAN'
FOTOS DE RECUERDO

F�jate en ellos.

Vamos.

Mira.

Vamos.

Dicen que un autor se revela
subconscientemente en sus escritos.

- �T� tambi�n?
- Supongo que s�.

En realidad s� muy poco de ti.

�Sabes que no he le�do
nada de lo que has escrito?

�Y has sido presentada en el palacio de
Buckingham ante los reyes de Inglaterra

con semejante laguna en tu educaci�n?

Tenemos que solucionarlo ahora mismo.

Hola. �Tiene alguna novela
de F. Scott Fitzgerald?

Lo siento, no me queda ninguna,
pero podr�a intentar encarg�rselas.

- �Alguien se las pide?
- De vez en cuando.

Pero no desde hace tiempo.

Novelas.
�Qui�n lee buenas novelas hoy en d�a?

Ahora todo es pol�tica,
yoga, libros de cocina...

Tengo unas obras de Balzac
que se est�n comiendo los ratones.

- �Le gusta Fitzgerald?
- S�, soy una gran admiradora suya.

- �Le parece un buen novelista?
- S�.

A m� tambi�n.
�Qu� novelas le interesaban?

El gran Gatsby, A este lado del para�so, Suave es la noche.

Si no las encuentra,
las puedo encargar a la editorial

si me da su nombre y direcci�n.

F. Scott Fitzgerald, Garden of Allah.

Pero si es usted. Deb� reconocerle.

- Es un gran honor para m�.
- Muchas gracias.

�Cu�ntos a�os hace
que no escribe una novela? �Cinco, seis?

- M�s o menos.
- Tiene que escribir m�s. Muchas m�s.

Aunque ahora no tenga muchos lectores,
ya reaccionar�n.

Volver�n a usted.
Ha ocurrido muchas otras veces.

Muchas gracias. Adi�s.

Pasa, Sheila.

- Hola, cari�o.
- Hola, Pancho.

Estoy terminando.
S�lo ser� un momento.

16 p�ginas de gui�n en un d�a.
Estoy muy impresionada.

Lo llevo bien. No me quejo.

Cada d�a est�s m�s guapa.

Hoy est�s como ma�ana.

- �Tienes alg�n plan para esta noche?
- S�, el mismo que anoche.

Estar contigo.

Quiero ense�arte una cosa.
En teatro, la columna de Ed Schallert.

Esta noche ponen una obra
en el teatro Pasadena,

basada en un relato m�o,
El diamante tan grande como el Ritz.

Qu� maravilla. Vamos.

- �Te gustar�a?
- Claro, me encantar�a.

No la he le�do. Quiz� no sea gran cosa.

All� siempre ponen obras buen�simas.
Quiz� llegue a Broadway.

Vamos.

- Ponte el vestido de lentejuelas.
- Bueno.

Yo ir� de etiqueta. Cena en el Trocadero.
Y un Rolls-Royce con chofer.

- Tan grande como el Ritz.
- M�s.

TEATRO PASADENA

�Me habr� equivocado de d�a?

No parece una noche de estreno.

No, est� todo muy oscuro.

Mira, ah� viene alguien.
Vamos a preguntar.

C�mo me gustar�a uno de �stos.

- Jovencito.
- �S�?

�Esta noche ponen
Un diamante tan grande como el Ritz?

S�, la interpretamos nosotros,
los estudiantes. Para los estudiantes.

En la sala de arriba.

Ya veo.

Podr�an subir si quieren.
Seguro que a nadie le importar�a.

Es una obra preciosa.

�Ah, s�?

- �Qu� papel interpretas?
- A Kismine.

Qu� bien.
�Y qui�n hace de tu hermana Jasmine?

�Conoce la obra?

Bueno, s�. Yo soy el autor.

�El autor? �F. Scott Fitzgerald?

Pero yo cre�a...
Encantada de conocerle.

Encantado.

Vamos, Billy.
Seguro que a nadie le importa...

Scott Fitzgerald.
Me he quedado de piedra.

Menos mal que me he callado.
Cre�a que estaba muerto.

Vamos.

El agua est� buen�sima.
�Por qu� no te ba�as?

No...

Soy de secano.

- Hoy tienes un aire especial.
- Es el mar, querido.

�Cu�ntas veces has estado enamorada?

Cari�o, no me acuerdo con este calor.

- �Por qu�?
- Por curiosidad.

A ver.

Hubo un noble
que me enviaba rosas.

Y un importante industrial.

Invert�a dinero.

Y hubo un marinero
que me llevaba a navegar.

- �Est�s enfadado?
- No pares ahora. Ibas por el marinero.

- Estaba bromeando.
- Bueno, sigue.

Cari�o, de eso hace muchos a�os
y yo era una ni�ita tonta.

Ya me conoces, sabes que exagero.

�Que exagero?
En realidad miento, de vez en cuando.

- S�lo quer�a ver c�mo reaccionabas.
- No pasa nada. Fui a la universidad.

- Puedo soportar unas cuantas verdades.
- Vamos, Scott, s� amable.

Bueno... Ser� amable.

�Qu� clase de chica eras?
O sea, antes de que...

el marinero te llevara a navegar.

Graham. �Qu� clase de nombre es �se?

�Es escoc�s? �Alem�n?

No lo s�.

�A qu� se dedicaba tu padre?
�Negocios?

Y tu madre, �qu� clase de mujer era?

Muri� cuando ten�as 17 a�os.
Eso dijiste, �no?

- �En Londres?
- S�.

- �En qu� parte de Londres?
- En el West End.

�Eras una ni�a peque�ita
o una ni�a grande?

�Llevabas trenzas con lazos?
�Ibas a buenos colegios?

- �A qu� clase de colegios...?
- �Basta, c�llate!

Lo siento.

Si hay algo que no quieras decirme,
no me lo digas.

Perdona.

D�jame en paz.
�Por qu� me interrogas?

Porque te quiero.
Quiero saberlo todo de ti.

No puedo seguir minti�ndote.

Ya no.

Me cri� en un orfanato.

Nac� en un barrio de mala muerte.

A los 17 a�os trabaj�
como ayudante de cocina.

Me lo he inventado todo:
la madre rica y hermosa, sir Richard de caza...

Hasta las fotos son todas falsas.

Incluso mi nombre.

No es escoc�s ni alem�n.
S�lo es com�n.

Lily Shiel. As� me llamo.

�Por qu�...? �Sheilah, qu� cambia si...?

Porque no quer�a ser del mont�n.

Porque ten�a miedo.

Ya basta.

A mucha gente no le gusta su vida
y se inventa una mejor. Eso has hecho t�.

Y todo, absolutamente todo...

Todo lo que eras y todo lo que eres
hace que te quiera a�n m�s.

No pod�a seguir viviendo como Lily Shiel.

Me has preguntado si llevaba trenzas.

Trenzas. Nos rapaban la cabeza. Al cero.

Era fe�sima y no quer�a serlo.

- Quer�a ser guapa y lista...
- Lo eres.

Quer�a que me aceptaran
y me quisieran, y estar a salvo.

Y lo eres. Eres todas esas cosas.

Ojal� te hubiera conocido entonces.
Habr�a cuidado de ti.

- Podr�as haber acudido a m�.
- S�, �d�nde estabas?

No hab�a nadie para decirme
lo que estaba bien y lo que no.

Deja de llorar, Sheilah.

Te quiero mucho.

Te quiero tal como eres.

Tal como eres.

Mis d�as s�lo empiezan
cuando vienes a esta casa.

Tengo celos de todos los instantes
que pasas con otra persona.

Me parece bien.

Seamos ermita�os juntos.

No volveremos a salir hasta Nochevieja.

Ni siquiera entonces.

Me he sentido tan perdida en la cena

cuando Stan, Bob, t� y todos los dem�s

hablabais de la Guerra
de los Treinta A�os.

Soy inglesa, habl�is de historia inglesa
y ni siquiera puedo participar.

Ni siquiera pas� de la escuela primaria
y soy plenamente consciente de ello.

Ni siquiera domino la gram�tica.
Empiezo a odiarlo todo.

Todo escritor que se precie
se siente as� en alg�n momento.

Llevo dos semanas trabajando
en mi primera emisi�n de radio.

Tengo que envi�rsela
a John Wheeler a Nueva York.

No s�, cada vez que la reescribo
me parece peor que la anterior.

D�jame echarle un vistazo.

- �Lo har�as, cari�o?
- Pues claro.

�De verdad?

Toma.

- �Te importa si lo cambio un poco?
- Claro que no.

Ten. Ponte una revista debajo.

Por ejemplo, �ves?

Queda gracioso.

Eso est� bien.

�No crees que les costar� un poco?

No lo creas. Si les das lo mejor de ti,
te querr�n m�s.

Algo de cotilleo est� bien,
pero comb�nalo.

Mete una idea de vez en cuando.
No temas hacerles usar la cabeza.

Ojal� aprendiera a usar la m�a.

No ha sido expuesta a una idea
o a un libro serio en su vida.

�Y si te hiciera una lista de lecturas?

Podr�amos leer libros buen�simos.

Literatura, pol�tica,
historia antigua y moderna...

Puedes tomar notas
y las comentamos juntos.

- �De verdad? Me encantar�a.
- Pues claro.

A m� tambi�n me vendr�a bien.

Lo bueno de la literatura
es que es eterna.

Descubres que tus deseos son universales,

que no est�s solo ni aislado.

Formas parte del mundo.

Quiero que est�s orgulloso de m�.

Hasta ahora,

siempre he pensado
que s�lo ten�a que ser hermosa... guapa,

que la gente me aceptar�a por esa raz�n.

Y siempre he tenido miedo
a ser rechazada de mayor.

Los j�venes bellos
son accidentes de la naturaleza.

Los ancianos bellos se crean a s� mismos.

Una de las mujeres m�s atractivas
que he conocido ten�a 80 a�os.

Cielos. Pues cuanto antes
empiece las clases, mejor.

Bien. Empecemos por literatura inglesa,
por una buena obra de Shakespeare.

Bueno, al ser la primera noche,
�podr�a elegir la alumna?

�En qu� est�s pensando?

En literatura actual.

Con una referencia especial
a un pasaje de Suave es la noche,

de mi autor favorito,
F. Scott Fitzgerald.

Yo no lo llamar�a actual,
pero, mi peque�o p�blico leal, adelante.

"Nicole le sonri�,

procurando que su sonrisa
mostrara todo lo que llevaba dentro,

y se la dedic�, haci�ndole
una profunda promesa de s� misma

por tan poco, por una mera respuesta".

"Minuto a minuto, se fue impregnando
de la dulzura de los sauces".

Suena mejor que cuando lo escrib�.

Son esos malditos sauces. Nunca fallan.

Supongo que mujeres de ocho a 80 a�os
se han arrojado a tus brazos

desde que tienes uso de raz�n.

Ser�s mala. Crees que un escritor
tiene que experimentar todo lo que escribe.

Sud� sangre para escribirlo.
Y lo �nico que haces es...

Escucha. "Ella se levant�,

tropez� con el tocadiscos
y qued� moment�neamente junto a �l,

apoyada en el hueco
de su hombro redondo".

Deja Fitzgerald y empieza
por Shakespeare.

Prefiero mil veces un autor vivo.

Lo sab�a.
Un poco de saber es algo peligroso.

Tengo que encontrar el hueco
del hombro redondo.

�Ah, s�?

- Bueno, lecci�n n�mero uno.
- No...

No te r�as del profesor.

- �Ya ha terminado la reuni�n?
- �Terminan alguna vez?

Vuelvo enseguida.

...las tropas de Hitler
han entrado en Viena.

El ex canciller Kurt von Schuschnigg
ha sido detenido.

Tras un ultim�tum
del l�der nazi austriaco,

las fuerzas del Frente
han sido desarmadas

y la esv�stica ondea
en los edificios p�blicos.

- �stas han sido las noticias del d�a.
- Diez segundos, Srta. Graham.

La conexi�n desde Chicago
tardar� 30 segundos.

Espere a que le haga una se�al.

Pasamos a Hollywood
y a Sheilah Graham

con las �ltimas noticias
del mundo del cine.

Buenas tardes.

Les habla Sheilah Graham desde Hollywood.

El Sr. Sam Goldwyn,
conocido por su ingenio

as� como por
sus excelentes pel�culas,

buscaba una comedia
protagonizada por Eddie Cantor.

Recibi� una llamada de un guionista

que dec�a tener la comedia perfecta
para �l.

No s�lo era una buena comedia,
insisti�, sino que ten�a un mensaje.

"Lim�tese a la comedia",
dijo el ingenioso Sr. Goldwyn.

"Los mensajes son para la Western Union".

Ha sido un desastre.
Me siento miserable.

- No seas tonta. Lo has hecho bien.
- Mientes y te quiero por ello.

Ojal� hubieras estado all�.

Siempre se est� nervioso
la primera vez.

- La semana que viene lo superar�s.
- No habr� una semana que viene.

El Sr. Robinson ha llamado desde Chicago.

Les ha gustado el texto, pero no mi voz.
Van a contratar a una actriz de radio.

- Eso es rid�culo.
- Lo s�. He discutido con ellos.

Les he dicho que me he puesto nerviosa
por el retraso de 30 segundos,

pero est� decidido a usar a una actriz.

�Ah, s�? Por encima de mi cad�ver.

Vas a ir a Chicago
y har�s el programa desde all�.

Sheilah, hay veces en que uno
tiene que defenderse.

Ir�s a Chicago y har�s t� el programa.

Y yo ir� contigo.

Ser�a maravilloso.

Me siento tan diferente
cuando estoy contigo...

Pero no puedes dejar tu trabajo
cuatro d�as seguidos.

Pueden hacer reuniones hasta que vuelva.
Todas las que quieran.

De todos modos no se me dan bien.

Hoy he estado con ellos siete horas
hablando sin parar. Pura confusi�n.

Voy a ir contigo. Yo me encargo de todo.

�Qu� har�a yo sin ti?

- Hola, Srta. Clayton.
- Hola, Sr. Fitzgerald.

- �Est� el Sr. Harris?
- S�, pero ahora est� con el Sr. Foster.

- �Podr�a verle un momento?
- Seguro que le recibir�.

El Sr. Fitzgerald quisiera verle
un momento.

Gracias.

- Puede pasar.
- Gracias.

- Hola, Stan.
- Pasa, Scott.

- Hola, Scott.
- Sam.

Siento interrumpir. Quer�a decirte
que me voy a Chicago tres o cuatro d�as.

Me gustar�a alejarme del gui�n unos d�as.
Estoy demasiado metido.

Pero volver� el jueves. Ya te llamar�.

Si�ntate un momento.

- �Nos disculpas, Sam?
- Por supuesto.

Si�ntate.

Iba a hablar contigo ma�ana.

Pero ya que te vas,
m�s vale que te lo diga ahora.

He tenido que tomar una decisi�n.
Voy a prescindir de ti.

- �Vas a retrasar la pel�cula?
- No, vamos a seguir adelante,

pero con otro guionista. Lo siento.

�Estoy despedido?

Eres un gran novelista,
pero como guionista...

La verdad es que no parece ser lo tuyo.

Has tenido cuatro encargos
y has fracasado en todos.

Cuatro guiones y ni una pel�cula.

Escribes una prosa preciosa,
pero no podemos filmar adjetivos.

Me gusta trabajar contigo,
pero no puedo justificar tenerte a sueldo.

Hazme caso. Vuelve a escribir novelas.

Pero dec�as que te encantaba
lo que hac�a.

S�. Hay partes geniales, pero no suena
a di�logo, a gente hablando.

Si hay algo que conozco bien
es la voz de mi generaci�n.

Eso pensaba yo tambi�n,
pero no da resultado.

- Ya casi est�. D�jame terminarlo.
- Scott... Tengo que cumplir con un plazo.

El inicio del rodaje,
no puedo correr ese riesgo.

Est� bien. Dime c�mo quieres
que lo escriba y lo escribir�.

�Yo decirle a F. Scott Fitzgerald
c�mo tiene que escribir?

De acuerdo. Hasta la vista.

Como novelista, en mi opini�n,
no hay nadie comparable.

- Ya. Bueno, gracias por todo.
- Suerte.

- Adi�s, Srta. Clayton.
- Adi�s, Sr. Fitzgerald.

La Srta. Sheilah Graham... �Podr�a venir
al mostrador de la TWA, por favor?

Acaba de recibir este mensaje.
Puede usar el tel�fono de mi despacho.

Oh, gracias. Es muy amable.

Cari�o, es una conferencia de Nueva York.
S�lo ser� un momento.

Era John Wheeler, cari�o.
Se reunir� con nosotros en Chicago.

Se alegra mucho de que vengas.
Ser� como en los viejos tiempos.

- Un brandy, por favor. Para el despegue.
- Para m� otra ginebra doble.

Para el despegue.

�Scott! �Qu� est�s haciendo?
Nunca te hab�a visto beber.

Pues me est�s viendo ahora.

Scott �Qu� te pasa?
Por favor, d�melo.

No me pasa nada.
Todo va de maravilla.

- Ponme otra, Charlie.
- No, por favor.

Por favor, cari�o, dime qu� te pasa.

No bebas m�s.

Vuelo 6 de la TWA a Albuquerque,
Kansas City y Chicago,

embarque por la puerta 3.
Todos a bordo, por favor.

Ahora s� nos vamos.

A volar.

Si quieres ayudarme...

�Desea una revista?

No, pero me gustar�a venderle algo
a una de ellas. �Sabe qui�n soy?

No, se�or.
No tengo la lista de pasajeros.

Yo se lo dir�.

Soy F. Scott Fitzgerald,

- ...y ella es Sheilah...
- Scott, por el amor de Dios.

D�jalo ya.

Se�or, �sabe qui�n soy?

- No. �Qui�n es usted?
- Soy F. Scott Fitzgerald.

Habr� o�do hablar de mis libros,
El gran Gatsby

y muchos otros, �no?

S�. Claro que he o�do hablar de usted.

�Lo ves? Sabe qui�n soy.

Sabe qui�n soy.

�Y usted, se�or? �Sabe qui�n soy?

La verdad es que no.

Queda despedido.

Qu� emocionante
conocer a mi autor preferido.

Jam�s pens� que hablar�a
nada menos que con usted.

Siempre imagin� que ser�a
tan guapo, atrevido y rom�ntico

como los protagonistas de sus libros.

Y no me ha decepcionado lo m�s m�nimo.

Lo es incluso m�s.

�As� que conoces mis obras?

Todas las frases que ha escrito.

Ser�s est�dida.

Me gustar�a que te quedaras aqu�
y tomaras el pr�ximo avi�n a Hollywood.

Ha sido un error que vinieras.
No est�s en condiciones de ayudarme.

Me las arreglar�
mucho mejor sola en Chicago.

Me est�s disgustando mucho.
Por favor, vuelve a casa.

Muy bien.

Me quedar� aqu�, como sugieres.

Ning�n problema.

T� libra tu batalla
y yo librar� la m�a, solo.

Completamente solo.

Lobos solitarios, t� y yo.

Vuelo 6 de la TWA a Kansas City,
Chicago, embarquen, por favor.

�Oh, scott!
Cu�nto me alegro de que hayas vuelto.

No deb� decir eso.
Cari�o, lo siento. Te quiero.

Cu�nto me alegro de que no te fueras.

S� que me fui.

A buscar otra botella.

Por favor, Sr, Fitzgerald.

Por favor.

- John, querido.
- Me alegro de verte. Est�s preciosa.

- �ste es Ted Robinson, de la emisora.
- S�. El enemigo.

- Pase, Sr. Robinson, y si�ntese.
- Gracias.

No lo consideres el enemigo.
A ver si podemos solucionar esto.

S�, bueno. Yo...

S� que puedo hacerlo muy bien

sin ese medio minuto de espera
tan aterrador.

Como director de la programaci�n
soy responsable de mantener...

Sr. Robinson, �ste es el Sr. Fitzgerald.

Encantado.

Siga, por favor.

- El problema es su dicci�n.
- S�, lo s�. Estaba muy nerviosa.

Pero ese medio minuto de espera
se me hace eterno...

Sus nervios no son lo que nos molesta.

Si he de serle sincero,

la mayor parte de la audiencia
es del oeste y del interior.

No est�n acostumbrados
al acento brit�nico.

�Por qu� no pruebas a meterte
una espiga de trigo en la boca?

Requerimos de nuestros locutores

un lenguaje que se reduzca
a su nivel m�s puro y comprensible.

Eso es una gran responsabilidad.

Ver�,

no podemos permitir que los ingleses
vengan a contaminar

nuestro bonito idioma.

Por favor.

D�jalo ya, Scott.

S� t� mismo.

Es el peor consejo
que me puedes dar ahora mismo.

Vamos. �Va a seguir de locutora o no?

Lo siento. Disculpe. No puedo...

- Vamos a hablarlo a tu despacho.
- Lo siento much�simo.

- Ven en cuanto puedas.
- S�.

A ver, carcelera.

Antes de que pongas la corriente,
el preso quiere hacer una declaraci�n.

T�ctica de negocios, querida.

T�ctica de negocios.

�Qu� voy a hacer contigo?

�Qu� tienes que perder
si le das otra oportunidad?

No puedo asumir la responsabilidad.
Buenos d�as, Srta. Arden.

Est� aqu� la Srta. Arden.
Tiene una dicci�n excelente.

Conoce el material y seguro
que le parecer� una buena elecci�n.

�Qu� ser�a de El programa
de Louella Parsons sin Louella?

S� que ser�a preferible
con la Srta. Graham.

�No podr�a hacerme
una prueba ahora mismo?

Si no queda satisfecho,

tiene a la Srta. Arden, yo regreso
a Hollywood y todos tan contentos.

De acuerdo. No tenemos mucho tiempo.

Charlie, que la Srta. Arden
espere en el estudio A.

- Cuando est� lista.
- S�.

Srta. Arden... �Ser�a tan amable
de esperar en el estudio A?

Vamos a hacerle una prueba
a la Srta. Graham.

Muy bien, prueba de sonido, por favor.

Buenas tardes.
Les habla Sheilah Graham desde Hollywood.

Perfecto.

Perfecto, Sheilah. Genial.

Scott, por favor.

Sheilah, no les tengas miedo.

No hay nada que temer.

Ahora mismo lo saco de aqu�.

�Quieres sentarte y callarte, Scott?

El sonido est� bien.
Ahora una prueba completa. �Lista?

- Empiece.
- Espera.

No te pongas nerviosa.

S� t� misma.

S� tan dulce, encantadora
y cautivadora como siempre.

Es lo �nico que tienes que hacer,
cari�o. S� t� misma.

Hola, John.
�Qu� puedo hacer por ti?

- Volvamos al hotel, Scott.
- Muy bien.

En cuanto tranquilice a Sheilah.
Cari�o, vamos a intentarlo de nuevo.

Esta vez, recuerda... Rel�jate.

Vamos, cari�o...

A ver esa gran sonrisa.

S� mi Sheilah.

Buenas tardes...
Les habla Sheilah Graham, desde Hollywood.

Los reci�n casados
Fredric March y Florence Eldridge

recibieron dos entradas por correo
de un benefactor desconocido.

Eran para el estreno de la obra Hamlet,
protagonizada por Leslie Howard,

y como costaba conseguir entradas...

Ahora s�, Sheilah. Has estado maravillosa.

- �A que ha estado genial, John?
- S�, genial. Vamos, Scott.

Le has cogido el truquillo.
Ya no te puede salir mal.

�Lo ves, John?
Es el secreto de todo gran actor.

S�lo tienes que ser t� mismo.

Piensa en cualquiera: Jack Barrymore,

Bernhardt, Duse,
Lunt y Fontanne, Helen Hayes.

Un secreto. �Cu�l es?
Muy f�cil: s� t� mismo.

Todo en orden. Sigamos adelante.

- �John! �D�nde est�?
- Dormido. Te estaba dejando una nota.

Es espantoso haberte metido en todo esto.

No te preocupes por m�.

Es mi primera experiencia
con Scott as� y...

estoy totalmente furiosa con �l.

Dadas las circunstancias,
el pobre no se ha portado tan mal.

Vaya. �Qu� quieres que haga?
�Que le despierte y le pida perd�n?

�No sabes que se ha quedado sin trabajo?
�Que lo han despedido del estudio?

�Despedido?

Pero no me lo ha dicho.
No ha dicho ni una palabra.

No pod�a ocurrir en peor momento.

Zelda, las facturas del hospital,
su hija, su autoestima... Todo al traste.

Y yo preocupada
por mi est�pido programa de radio.

John... Tengo que ayudarle. �Qu� hago?

Llama a un m�dico. Te recomendar�
ingresarlo hasta que supere todo esto.

John, no puedo hacer eso.
No, no puedo hacerle eso.

Pobrecito m�o, yo...

Ay�dame, John. No s� qu� hacer.

Hola, cari�o. �C�mo te encuentras?

- Mejor de lo que deber�a.
- �Ha venido el Dr. Hoffman?

S�. Estoy lleno de pinchazos
y de vitaminas.

Scott. �Qu� vamos a hacer?

La bebida me asusta. Yo...

Cari�o, acepto lo malo con lo bueno, pero...

tal vez antes deber�a saber
cu�nto voy a tener que aguantar.

Se acab�.

Voy a volver a trabajar.

Ya he llamado a mi agente
para otro posible gui�n.

Cari�o, �sabes qu�?
No quiero que escribas m�s guiones.

Este lugar no te conviene.
Necesitas algo tranquilo, sin distracciones,

para poder hacer lo que se te da mejor:
escribir novelas.

Has tomado notas para una novela
sobre Hollywood y deber�as empezarla.

Escribir en serio lleva tiempo.

Tiempo.

Tengo ciertas obligaciones.

Ya sabes que Zelda est� en un sanatorio.

No puedo permitir
que acabe en un manicomio.

Y Scottie est� en la fase
m�s decisiva de su educaci�n.

Necesito tener ciertos ingresos.

Escribir una novela...

Lleva tiempo.

S�, lo s�,
y tambi�n lo he estado pensando.

Creo que tengo una soluci�n.

Espero que te guste.
�Sabes qu� he hecho?

He alquilado una casa en Malib�,
lejos de todo esto.

Si te concentras durante seis semanas,

podr�as conseguir
un buen adelanto de una editorial.

Eso solucionar�a tus problemas, �no?

Oh, Scott. Es una casita preciosa.

S�lo el sonido de las olas
y las gaviotas y...

- �Qu� te parece?
- Suena bien.

Podr�a funcionar.

Me intrigan los magnates
de esta industria. Es un buen tema.

�Cu�ndo nos vamos?

�Ahora mismo?

- Muy bien. Te ayudo a hacer la maleta.
- No tardaremos mucho.

Aqu� est�n las maletas. �Sabes?

Siempre he pensado que Hollywood
tiene una grandiosidad rid�cula,

como una corte italiana del Renacimiento.

Tiene sus reyes, bufones,

pr�ncipes malos y amantes listas,
todos movidos por la ambici�n.

Y sus escribas, cronistas
y cotillas como yo.

- �Qu� haces con esto?
- Lo ten�a en Baltimore.

Una vez vinieron a merodear a mi casa.

Creo que el tema

ser�a el conflicto
entre un hombre superior

y todas las fuerzas mezquinas
que intentan debilitarlo, hundirlo,

hacer que se conforme con menos,
algo que ellos puedan comprender.

- Probablemente al final lo destruir�an.
- �Qu� es esto?

- Un rabo de toro.
- Claro. Pero �para qu�?

�Para qu�? Me la dio
Juan Belmonte en Madrid en 1926.

�Y lo has llevado contigo desde entonces?

S�, desde entonces.
No puedo tirar una cosa as�.

EL �LTIMO MAGNATE
CAP�TULOS

- �C�mo ha ido hoy?
- Muy bien.

Me ha llamado mi agente de Nueva York.

Cuando tenga cuatro cap�tulos,

quiere ense��rselos
al Saturday Evening Post y a Collier's.

Cari�o, eso es maravilloso.
Sab�a que venir aqu� era lo mejor para ti.

Estoy muy contenta.

�Y a ti c�mo te ha ido hoy?

No ha estado mal.
He conseguido una entrevista con Garbo.

Luego he vuelto a la oficina
a escribir mi columna.

- Y he hablado con John Wheeler.
- �Qu� te ha dicho?

Dice que no ser�a mala idea
que yo fuera a Nueva York.

�Para qu�?

Hay una convenci�n anual de editores.

Cree que yo deber�a ir

y hacer nuevos contactos para mi columna.

�Te gustar�a ver a alguien
en particular en Nueva York?

No pensar�s...

No seas rid�culo.

Ven aqu�.

Esc�chame bien
porque lo digo muy en serio.

Si me dejas ahora y te vas a Nueva York,
no vuelvas nunca.

- Scott, no hablar�s en serio...
- S�, hablo en serio.

No quiero que vayas a Nueva York.

Cari�o,
claro que no ir� si t� no quieres.

Pero soy una mujer que trabaja
y tengo que pensar en mi futuro.

Has encontrado lo que buscabas
toda tu vida.

Buscabas amor y comprensi�n, me dijiste.

Yo te comprendo y te quiero.

�Acaso tengo que dec�rtelo?

Eres lo m�s importante de mi vida.

Oh, Scott, d�melo otra vez.

Por favor, d�melo otra vez.

Era lo que quer�a o�r
y lo que necesitaba saber.

Lo eres todo para m�.

Aqu� contigo tengo
toda la emoci�n que necesito

y no me importa nada m�s.

Te quiero, cari�o.

Habr�s notado...

Sabr�s cu�nto deseo casarme contigo.

�C�mo es que nunca has preguntado
qu� va a ser de nosotros?

Una Graham es un animal confiado.

Es una buena mascota.
Se la adiestra f�cilmente

y le gusta jugar
e ir a buscar un palo o el peri�dico.

Y nunca hace preguntas.

�Es confiada?

S�.

Tolsto� tard� cuatro a�os en escribirlo.

Si hubiera querido ah� el final,
ni lo habr�a empezado.

Ya s� que es un sacrilegio,
pero has de reconocer que es muy largo.

- S�, �verdad? �Ya ha venido el cartero?
- No.

Aqu� est�n. Cuatro cap�tulos
listos para Nueva York.

Cari�o, es maravilloso.
�Recuerdas lo que dijo el librero?

- "Volver�n a usted, Sr, Fitzgerald".
- Ser�n bienvenidos.

Me quedar� aqu� con el Sr. Tolsto�
hasta que llegue el cartero.

Hola.

Es muy importante.
Que salga con el primer correo.

JACK MONROE Y ASOCIADOS
AGENTES LITERARIOS

Y otra para Fitz-Harris.

Muy bien expresado.

- Barco a la vista.
- Leven anclas.

Salud.

Tengo un regalo para usted. Vamos.

Algo muy especial.

Pru�besela, amigo.

P�ngasela.

As�, ya est�.

Perfecta. Realmente elegante.

Brindo por el hombre
mejor vestido de la sala.

Usted, Sr. Fitz-Simmons, es un caballero.

Y yo reconozco a la legua a un caballero.

Yo tambi�n.

Viniendo de usted, se�or,
lo considero un enorme cumplido.

�Me han dicho que tienen
un problema de alojamiento?

Pues ya est� resuelto.
Se quedar�n aqu� y ser�n mis hu�spedes.

�Hu�spedes? Estupendo.

Pasa. �nete a nosotros.

Scott... �Qu� est� pasando aqu�?
�Qui�n es esta gente?

Bien, Sheilah. Son mis amigos.

�ste es el Sr...

El Sr. Smedley-Jones.

Y �ste es el Sr. Darby-Forsyth.

Pens� que te gustar�a conocerlos.
Son marineros.

- Y, caballeros, la se�ora es...
- Ser� mejor que se vayan.

Qu�tense los trajes,
corbatas y dem�s, y d�jenlos aqu�.

- �Los dejamos?
- Inmediatamente.

Te lo advierto.
No les hables as� a mis amigos.

- �l nos los ha regalado, �verdad?
- Desde luego. Yo cumplo mi palabra.

Vamos, qu�tenselos y v�yanse.
Si no, llamar� a la polic�a.

�A la polic�a? Eso no ser� necesario.

La joven quiere que nos larguemos.
Hasta la vista, amigo.

Si no estamos en la playa,
estamos en el Freddie's Bar.

- Fuera.
- Si no te importa, los voy a acompa�ar.

Escuchen. Vuelvan cuando quieran.

No vuelvas a hacerme eso.

Por favor.

Yo invito a quien quiero cuando quiero.

- �Has comido algo?
- No. Deja de mimarme y de agobiarme.

Scott, si no me dejas cuidarte,
llamar� al Dr. Hoffman.

No me importa si lo llamas o no.
No necesito que me cuide nadie.

- En ese caso, me voy.
- No.

Te quedar�s aqu� hasta que yo lo diga.

- Quiero irme.
- Te vas a quedar.

Aqu� mismo.

Mi querida farsante.

Mi farsante querida.

Mi damita de los barrios bajos.

- No eres m�s que la tontita Lily Shiel.
- No, Scott, para.

Te odio. Ya no te quiero ni te respeto.

Te voy a matar. �Y mi pistola?

- �D�nde est� mi pistola?
- No lo s�.

�D�nde est�?

Dios.

Abre la puerta. Abre.

Operadora. P�ngame con la polic�a.

�sta es mi direcci�n: el 31...

�Scott, para!

He llamado a la polic�a
y habr� un esc�ndalo terrible. Para.

�No!

Adelante. C�gela. Dispara.

Vamos, hazlo.

No me importa lo que te ocurra.

No vale la pena salvarte. No vales nada.

No he salido del arroyo para acabar
con un borracho despreciable como t�.

Despreciable. Te odio. �Te odio!

- �C�mo est�, doctor?
- Est� tranquilo de momento.

Le he puesto una inyecci�n:
3 cc de medicaci�n.

- �Caf�?
- Gracias.

- �Leche?
- No, gracias.

- �Es muy grave?
- Doctor.

�Puede hacer algo?

- Procure estar tranquilo.
- No noto los brazos.

- Espere a que act�e la medicaci�n...
- �Cu�nto tiempo voy a estar as�?

Depende. Puede que no vuelva a ocurrir.

Pero si sigue bebiendo,
su coraz�n no aguantar�

y podr�a acabar paralizado de por vida.

Entonces me volar� los sesos.

�Qui�n sujetar� la pistola?

A lo mejor ni la necesita.

El Se�or le ha dado una palmadita en el hombro.
Que le sirva de advertencia.

- Volver� por la ma�ana.
- Gracias, doctor.

- Buenas noches.
- Buenas noches, doctor

Tiene raz�n.

No puedes seguir as�.

S�lo conseguir�s ponerte peor.

S�, lo s�.

Dios. Vaya que si lo s�.

Me gustar�a superarlo.

Pero, �c�mo?

�D�nde?

Estoy acabado.

Emerson lo expres� muy bien.

"En los escombros de la desesperaci�n,
construimos nuestro car�cter".

Collier's y el Post
han rechazado tu libro.

Pero en realidad no,
s�lo un par de cap�tulos.

No habr�n captado lo que pretendes.

Term�nalo.

Demu�strales que a�n tienes talento.

Soy Scott.

�Sheilah? Por favor, h�blame.

Y lleva dos d�as acos�ndome

con cartas y llamadas
a las dos y tres de la madrugada.

Le envi� un telegrama a John Wheeler
para que me enviara a Inglaterra.

�Por qu�?

Si John se niega,
amenaz� con hacer que me deporten.

- Lo dice por decir.
- Ya no puedo m�s. En serio.

Estoy harta del Sr. Fitzgerald,
de su encanto, su bebida y su talento.

Estoy hasta las narices.

- �Est�s segura?
- S�.

No sabes lo que ha sido.
No puedo trabajar ni dormir.

�Por qu� no contratas a un abogado?

S�, ll�valo a juicio.

No, contrata a un par de detectives.
Que vayan a ver al Sr. F.

y prometan meterle en la c�rcel
si no deja de molestarte.

- �Podr�a hacer eso?
- Por cien d�lares.

- Voy a buscar mis gafas de sol.
- Har� cualquier cosa...

para que deje de llamarme.

- Cualquier cosa.
- Seguro que deja de llamarte.

Una visita de los agentes
justo antes del amanecer le convencer�.

Llamar�n a su puerta sobre las cinco...

- No pueden hacer eso.
- �El qu�?

Llamar a esa hora.
Se acabar� de dormir y duerme fatal.

�No quieres una copa?

SUAVE ES LA NOCHE

A ESTE LADO DEL PARA�SO

A falta de poder verte,
lo mejor ha sido pasar aqu� la tarde

en el entorno que tan feliz me ha hecho.

Te quer�a con toda mi alma,
pero algo sali� terriblemente mal.

Est�bamos condenados
al fracaso desde el principio.

Dije e hice cosas espantosas,

pero lo que no puedo soportar
es que confiaras en m� y te traicionara.

No soporto pensar que te hice sufrir

cuando quer�a hacerte feliz.

Me alegro de que te hayas librado de m�.

Espero que seas feliz

y que tu �ltima impresi�n de m�
se desvanezca con el tiempo.

Adi�s, Sheilah.

�S�?

Gracias, Shelah.

Tengo que verte.

Yo tambi�n quiero hablar contigo.

Voy a buscarte, cari�o. Iremos a
alg�n sitio donde podamos hablar.

He dejado la bebida
y no pienso beber nunca m�s.

La evasi�n es mucho m�s terrible
que la realidad.

S� que...

S� que lo dices en serio,
pero �cu�nto durar�?

�C�mo s�...?

Nunca lo hab�a prometido antes.

Ni a ti ni a m� mismo.

He dejado la bebida.

Estoy escribiendo El �ltimo magnate.

Va a ser lo mejor
que he hecho nunca, gracias a ti.

Te quiero, Scott.

Te quiero como eres ahora.

Pero el otro Scott...

Era una pesadilla.
No podr�a volver a soportarlo, de verdad.

Aunque no quieras volver conmigo,

y lo deseo much�simo,

no voy a beber m�s.

Se acab�.

S�, pero �c�mo puedo estar segura?
�C�mo puedo creerlo, saberlo?

Ponme a prueba.
No s�lo tomes mi palabra.

Ponme a prueba.

Llevas todo el d�a trabajando.

Tienes que parar.

S�. Es un cap�tulo muy especial.

Bastante personal. Es...
Bueno, trata de nosotros, de ti y de m�.

�De nosotros?

Cari�o.

- L�emelo.
- Me gustar�a.

A ver si encuentro el pasaje
en que nos conocemos t� y yo.

S�, aqu� est�.

Te he llamado Kathleen
y yo soy Monroe Stahr.

Aqu� est�.

"Stahr y Kathleen bailaban".

"Cuando ella se acerc�,
a �l se le enturbi� la vista".

"Ella le pareci� moment�neamente irreal".

"Stahr segu�a deslumbrado
mientras bailaban".

"Ella estaba absorta en �l,
al margen de las palabras".

"Sus ojos le invitaban a una comuni�n
rom�ntica de una intensidad asombrosa".

"Como si fuese consciente de ello,
dijo, asustada: 'Tengo que irme'"

"Stahr la atrajo hacia s�".

"'No quiero perderte.
�No podr�amos cenar?" '

"Ella baj� los brazos y le mir�,
como una alegre coqueta".

"'Cuando estoy contigo
no respiro bien', dijo ella".

"Se cogi� el largo vestido y se volvi�".

"'Gracias por el baile', dijo".

"'Y ahora, de verdad, buenas noches" '

"Y casi ech� a correr".

Somos nosotros, �verdad?

No sab�a que...

L�eme m�s.

Me gustar�a leerte otro pasaje,
pero antes tengo que pulirlo. Es...

Ma�ana por la noche.
Es cuando Stahr educa a Kathleen.

Le ha dado una lista de libros que leer.

- �Te suena?
- S�, ligeramente.

�Siempre soy tan maravillosa?

�No has descrito las veces
en que soy tonta y rid�cula?

Vamos a celebrarlo.
�Qu� te parece si salimos?

�Te gustar�a?

�Sabes qu�? Tengo una invitaci�n
para una proyecci�n privada en la Fox.

Es algo muy informal.

Habr� gente de la industria
y periodistas.

Podr�a estar bien. Es una comedia.

Una comedia suena bien.
�Es divertida?

Dicen que es divertid�sima.

- Boa noite, ya es de noche
- Mira, mira all� la luna

- Pronto empezar� a so�ar
- ...que voy por el cielo azul

So�ar� estar en tus brazos de nuevo

Boa noite

y esp�rame

Ah� est�n.

�Scott! �Qu� te pasa?

Me siento fatal.

- Cari�o, qu�date aqu� un momento.
- No, vamos.

- Pensar�n que estoy borracho.
- No, nadie te ha visto. Ap�yate en m�.

- Voy a llamar al m�dico...
- Hola, Sheilah.

Scott, cu�nto tiempo.
�D�nde has estado?

Est� trabajando
en una novela emocionante.

Estupendo. Si se puede hacer
una pel�cula, ens��amela.

- Voy a llamar al Dr. Hoffman.
- H�blame. Dame conversaci�n.

- No puedo...
- Hola, Scott. �Qu� tal?

Ay�dame. Hazlo. H�blame.

Anoche Bob Carter tuvo
una discusi�n divertida con la polic�a.

Lo pararon delante
del restaurante Chasen's

haciendo un cambio de sentido...

Le preguntaron su nombre
y dijo: "Perico el conejo".

Luego les dijo que viv�a
en un campo de lechugas.

Y se indign� mucho porque tuvo
que pasar la noche en la comisar�a.

�Qu� aspecto tengo?

Por favor, Scott,
d�jame llamar al Dr. Hoffman.

Le ver� ma�ana de todos modos.

Cari�o, d�jame conducir.

Gracias.

Alemania, Italia y Jap�n
han firmado un pacto de ayuda mutua.

Eso significa que entraremos
en guerra tarde o temprano.

Me gustar�a ir a Europa.

Trabajar de corresponsal de guerra.

Ser�s cobarde.

No creas que te librar�s de m�
por ir a cubrir una guerra.

Yo ir� contigo.

Iremos juntos a muchos sitios
cuando todo vuelva a la normalidad.

Te llevar� a donde t� quieras.

Me encantar�a, cari�o.

Me encantar�a ir a Europa contigo.
Lo ver�a todo por primera vez.

De todos modos no ve�a nada
hasta que t� me abriste los ojos.

Ya casi he terminado seis cap�tulos.

Si todo va bien,
el libro saldr� a la venta en primavera.

Va a ser un �xito.

Va a ser un �xito rotundo y t� lo sabes.

S�lo ten�as que ponerte y concentrarte.

Necesitaba una carta de la editorial
diciendo que aceptaban el libro

y el cheque que lleg� en el mismo sobre.

Soy de esos
a los que les sienta bien el �xito.

Hay gente que necesita un fracaso
de vez en cuando para dar lo mejor de s�.

Yo no.

Tengo algunas ideas
para el pr�ximo libro,

y se podr�a escribir en cualquier lugar.

�Qu� te parecer�a, por ejemplo,
ir a Italia cuando mejore la situaci�n?

De ensue�o. Me encantar�a.

Te debo tanto... Sheilah.

Te recompensar�. Te lo devolver� todo.

Cari�o.

�Qu� te parece si cada vez que...?

Con el Dr. Hoffman, por favor.

�Puede encontrarlo, r�pido?

El Sr. Fitzgerald se ha desmayado.
D�gale que venga lo antes posible.

S�, gracias.

No.

Socorro. Que alguien me ayude.

Por favor, ay�deme.

Ha ocurrido algo terrible.
Es Scott. Venga.

Extensi�n 118, con el forense.

P�ngame con la extensi�n 115,
con el forense.

No, quiero hablar con el forense.

Est� muerto.

Te quiero.

Te quiero mucho.

Te quiero tal como eres.

Tal como eres.

Escucho tu voz
en la canci�n de la brisa

Y me regocijo
con la oportunidad de repetir

Aquellos momentos sin aliento
cuando el amor lanza su hechizo

En el sonido de las olas en la orilla

Querida infiel

Veo tu cara cuando miro a una estrella

Y abrazo todo lo que eres

El tiempo no disipar� jam�s
mi amor por ti

Oh, mi querida

Querida infiel