All language subtitles for Camino de la jungla (Robert Mulligan,1962).(Subs.Espa).[filibusteros.com].(493).por.Marc27

CAMINO DE LA JUNGLA

A�O 1936

�Tan pronto de regreso, Jano?

El barco ha llegado puntual.

Los "totoks" subir�n
en cuanto dejen los equipajes.

Nunca falla,

siempre hay alguno que lleva salacot.

�Qu� nos han mandado este a�o?

Algo un poco mejor que la media.

Hay varios que parecen brillantes.
Y uno ha ganado la medalla de oro.

Ha conseguido todos los premios
durante cuatro a�os.

�De verdad?

El que va junto al del salacot,

el m�s alto, Anton Drager.

Caballeros, bienvenidos a Batavia.
Soy el doctor Kramer.

Ya conocen al doctor Sordjano,
nuestro director asistente.

El Dr. Martens, encargado
del servicio de expediciones.

El Dr. Sanders, del
personal residente.

No les preguntar� sus nombres ahora.

Primero, porque me cuesta
recordar los nombres,

y segundo, porque con su llegada,
nuestro personal alcanza

los 341 m�dicos.

As� que por ahora me dirigir�
a ustedes simplemente como Doctor.

El personal antiguo les
llamar� a ustedes "totok".

No se ofendan.
S�lo significa reci�n llegado.

Descubrir�n que les queda
mucho que aprender de su profesi�n

en esta parte del mundo.

Nos ocuparemos de que lo aprendan.

Ahora...

Doctor.

�Doctor!

Dr. Drager.

Oh, lo siento.

Por favor, no se disculpe.

Puedo entender su inter�s
por nuestro mapa.

Dentro de un tiempo, algunos
ser�n destinados a otros lugares,

pero durante los pr�ximos 6 meses
permanecer�n aqu�, en el hospital.

El Dr. Sanders les mostrar�
sus habitaciones.

Buenos d�as, caballeros.

S�ganme, por favor, caballeros.

Una cosa m�s,

esta noche habr� una cena
en el Club de Campo

en la que conocer�n al personal
del hospital y a sus familias.

A las 20h en punto.
Eso es todo, caballeros.

Y si coopera usted un poco,
doctor Drager,

puede que encuentre agradable
la vida en las colonias.

Con todo lo atractivo que usted
lo pinta, se�ora Kramer,

no he venido aqu� a
clases de baile,

o a hacerme socio del Club de Campo.

Suena como si esperase un
destino peor que la muerte.

Yo no creo en el destino.

�En qu� cree usted?

En Anton Drager,

y en el Servicio
Sanitario del Gobierno.

Y en una cl�usula de mi contrato
que, m�s o menos, dice:

"En consideraci�n a la beca que le fue
concedida, al graduarse

prestar� sus servicios en las
Indias Orientales Holandesas

por un periodo no menor
de cinco a�os."

�No es algo tarde para arrepentirse?

Tampoco creo en el arrepentimiento,
se�ora Kramer.

Quiero sacar provecho
de esos 5 a�os.

�Nada m�s concreto?

Muy concreto.

Quiero trabajar con el Doctor Jansen.

�Oh!

Louise, Sordjano ha organizado
una partida de poker.

�Quieres atender a las se�oras?

Se estar�n aburriendo.

Muy bien, cari�o.

El Dr. Drager acaba de contarme
algo muy interesante.

Quiere trabajar con Brits

y est� decidido a hacerlo.

As� que quiere trabajar
con el Doctor Jansen, �eh?

Quer�a hablarle de ello
en otro momento, se�or.

�Por qu� no ahora?

La respuesta es no.

Usted ser� destinado
igual que los dem�s nuevos,

seg�n nuestras necesidades
y su capacidad.

Creo que estoy capacitado, se�or.

�Qu� he de hacer para prob�rselo?

No s� c�mo podr�a hacerlo.

Pero ya que es una solicitud �nica,
�Por qu� con Jansen?

Porque es el m�s sabio
en medicina tropical,

y una autoridad mundial
en la lepra.

Pero, �No es cierto que, aparte de unos
escritos hace ya 20 a�os,

no ha escrito nada m�s sobre su trabajo,

sobre sus �xitos, fracasos,

sus m�todos o sus propuestas
de investigaci�n futura?

Es un problema que le
planteamos a �l mismo.

Hace tiempo que tratamos
de convencerle.

Perm�tame cumplir mis
5 a�os de servicio con �l.

As� aprender� lo que �l sabe

y divulgar� sus hallazgos.

Dr. Drager, �Tiene intenci�n de irse
al final de los 5 a�os?

S�.

Cuando baje del barco
al regresar a casa

ver� que el campo de la medicina
tropical no es muy lucrativo.

� Y en cuanto a investigaci�n?

Si un hombre como el Dr. Jansen
estuviese ahora en Holanda

le ofrecer�an millones
para investigar.

Y usted cree que eso es tambi�n
posible para un joven ambicioso

que volviese con los
conocimientos de Jansen.

Dr. Kramer,

no quisiera volver s�lo
con un traje blanco

y la esperanza
de curar la malaria.

�Hay algo malo en eso?

Dr. Martens, �Quiere venir un momento?

�A qui�n va a enviar con Jansen?

A Stappel.
Saldr� ma�ana.

Canc�lelo.
Enviaremos a un voluntario.

�Drager?

Eso es.

El Dr. Martens le informar�.

Buena suerte.

Gracias se�or.

Su avi�n sale a las 8:00 de la ma�ana.

Est� en la oficina del
servicio de expediciones a las 7:00.

Sea puntual.

Descuide, Doctor.

�Va a mandarle un "totok" a Jansen?

Exactamente.

No lo entiendo.

Marty

nuestro ganador de medallas
quiere m�s medallas.

Si es capaz de aguantar a Jansen,
yo mismo se las pondr�.

Si no es capaz, volver� dispuesto
a trabajar y a portarse bien.

�Est� usted vacunado?
- No.

H�galo en Macassar.

All� tendr� que esperar dos horas
el tren para Rokul.

Me han puesto varias inyecciones.

�Contra la plaga tambi�n?

�Hay plaga en la leproser�a?

Jansen no est� all�.

Est� en Rauwatta, tres millas r�o arriba.

Ah�. Ha descubierto
un brote de epidemia.

El peor en a�os.

Hemos enviado un radio a Krasser en Rokul.

Es el due�o del hotel y le dar�
el equipo para su viaje.

Bien, ya est�.

16 de anti plaga, equipo para la selva,
su equipaje,

y eso es el P.G.
�Eh, t�!

Esas cajas contienen el P.G. lo
m�s importante para el viejo Jansen.

Cu�delas aun a riesgo de su vida.

- Muy bien. Hasta pronto.
- Gracias.

�Eh!

Olvid� pregunt�rselo. �Qu� es el P.G.?

�Es usted el nuevo doctor?

�El se�or Krasser?

S�. Vamos dentro.

Ellos cuidar�n de eso, doctor.
Vamos dentro.

�Eh, doctor!

�Doctor?

Ese tren �Sigue con todas sus ruedas?

- El �ltimo que vi, s�.
- Bien.

Ma�ana me voy de aqu�.

Es nuevo, �Eh?

�C�mo sigue nuestro pa�s?
�Ha cambiado mucho?

Seg�n cu�nto tiempo lleve fuera.

Diez a�os. Tres de ellos aqu�,
de contramaestre del r�o.

Estar� contento de volver a casa.

No me voy a ir.

Pensaba hacerlo
hasta hace tres o cuatro d�as.

Pero ahora, voy a Batavia
para otro destino.

No pregunte por qu� he cambiado de opini�n.
No sabr�a dec�rselo.

�Le gusta Beethoven, Doctor?

Desde luego.

Mejor as�.

Bueno...

La ducha est� al final del pasillo.

Gracias.

A prop�sito. Me llamo Drager.

Y yo Harry Frolick.
Encantado de conocerle.

�Por qu� no come usted algo?

�Noto cierto reproche, doctor?

No. S�lo es un consejo.

Lo pasar� mejor si
mezcla la bebida con esto.

Soy al�rgico a los consejos,
mi reciente amigo.

Y aqu� est� el consejero m�s ilustre.

Buenas noches, Harry.

El capit�n Willem Wattereus,
del Ej�rcito de Salvaci�n.

Aleluya. Aleluya.

Buenas noches.

�nase a nosotros.

Consiga su trono en el cielo.

He venido a despedirme.

Muy amable, capit�n.
Me ha conmovido.

Me han dicho que ya no va a volver a casa.

Es cierto.
Una decisi�n gloriosa.

- Le aconsejo que lo piense mejor.
- �Lo ve?

"Ya que �l me ha vestido
con las prendas de la salvaci�n

como una novia adornada con sus joyas"
Isa�as 61:10. �Cierto, capit�n?

Por favor, Harry

Venga, cantemos el
Cantar de los Cantares.

"Mirad que sois bella, mi amor.

Tus labios son de escarlata.

Leche y miel bajo tu lengua."

Pruebe. Pru�bela, capit�n.

"Un mont�n de trigo
rodeado de lirios..."

Basta, Frolick.

"Los tontos se burlan del pecado,
pero entre los virtuosos est� el favor."

- Basta.
- Sus labios est�n secos, Willem.

El deseo brota de su frente.

Basta, Frolick.

Est� bien.
"Benditos sean los piadosos."

"Bienaventurados los humildes,
porque heredar�n la tierra."

Vamos, Harry.

Eso es para sus virtudes,
Capit�n Salvaci�n.

Ha sido una exhibici�n rid�cula.

Pobre Harry.

Est� atravesando un infierno.

Intenta probar que
Dios no existe.

Pero si Dios no existe, tampoco
existen los pecados de Harry.

Y eso lo hace violento y desgraciado.
�Me comprende?

Me temo que no, capit�n.

Para m�, Frolick es s�lo un
pobre idiota que no sabe beber.

Buenas noches.

Vigile a los porteadores

Si se enteran de lo
de la plaga le abandonar�n.

As� que, durante
las tres pr�ximas semanas,

duerma de d�a y vigile por la noche.

Suba. Ya est�n listos.

Tenga a mano el rifle.
Eso lo entienden todos.

No se preocupe. Podr� manejarlo.

Bien, "totok",

act�e siempre como si
fuera usted el due�o de esto.

Es igual que un zoo, pero m�s grande.

Se lo dir� cuando vuelva.

�No tiene sombrero?

No me lo pongo nunca.

Ya se lo pondr�.

�Vamos ya!

�El Doctor Jansen?

�A qui�n se esperaba?
�A Robinson Crusoe?

�D�nde est� el P.G.?
�Lo ha tra�do usted?

S�, se�or.

Bien, tr�igalo.

Deja, yo lo coger�.

�Por qu� ha hecho eso?

Porque lo he tra�do desde
tan lejos y no estaba...

�Un "totok"!

�Por todos los demonios!
Me han enviado un "totok".

Doctor, �Quiere decirme
qu� es el P.G.?

Ginebra.

�Ginebra?

P.G. significa pura ginebra.

Si va a desmayarse,
mejor tome un poco.

Doctor Jansen.

�Qu� quiere usted que haga?

�Oh, es usted!
�C�mo dijo que se llamaba?

Anton Drager.

- �Ha manejado dinamita alguna vez?
- No.

Pues ya puede empezar.

No tenga miedo. Nada le ocurrir�
si no prende fuego a la mecha.

�Qu� tengo que hacer con ella?

Hijo, venga conmigo y se lo dir�.
Traiga esta caja.

�Sabe lo dif�cil que es
separar a los enfermos de los sanos?

S�, la dinamita es magia.

Y aqu� hay que recurrir a la magia.

Ahora, siga usted
con este trabajo.

Y procure no lastimarse.

No conseguir� nada por la fuerza.
Soltadlo.

Iny�ctele.

�Iny�ctele!

Magia, doctor. �Recuerda?

�Lleva un diario sobre
sus arriesgadas aventuras?

No, se�or, es s�lo una carta.

Es m�s o menos lo mismo.

�Claro! Esto es No falla nunca.

Cada "totok" tiene su corderita que
espera ansiosa sus cartas.

Para darle �nimos.

Empezar� hablando de su dulce corderita
hasta que ella se convierta en un carnero.

Observar� que yo no
le doy ning�n �nimo.

Ni yo se lo he pedido.

Lo pedir�.

Soy una autoridad en "totoks".

He sido ni�era de medio centenar.

Lo que me recuerda

que a�n no me ha hecho usted
la gran pregunta.

�Qu� pregunta?

"Doctor,
�Cree que sirvo para este trabajo?"

Venga, preg�ntemelo.

Maldito, que me importa
que usted crea si sirvo o no.

Bien dicho. Bien dicho.

A�n hay esperanza para usted, muchacho.

Y ahora, c�mbiese y
p�ngase guapo.

Vamos a visitar al sult�n.

Y no hierva tan pronto,
o se quedar� sin vapor.

Es un viejo diablo.

Nos odiamos el uno al otro
desde hace treinta a�os.

Eso nos une.

Sabes, "totok": seg�n se envejece,

lo que importa son las relaciones,
no su naturaleza.

S�lo el hecho de que existan.

�l y yo somos aqu� dos instituciones

Ya os veo, Se�or.

Ya te veo, Sappo-lidi.

S�. Deb�is afrontar un caso grave
que no admite demora.

Sr. Le dije ayer que

si quer�is seguir vivo
deber�is trasladaros aqu�.

Le advert� que la fiebre negra
la traen las pulgas

y las pulgas las traen las ratas.

Si no lo remediamos
os quedar�is sin s�bditos.

Al sult�n no le gustan los s�bditos.
Al sult�n le gusta el billar.

Tambi�n os gusta su majestad la reina.

Ahora ya es mayor.

�No os gustar�a ir otra
vez a Holanda a ver a la reina?

El sult�n es ya demasiado viejo
para ver a la vieja reina.

Sr. Abandonar�is el palacio por la ma�ana,

porque voy a quemar toda
esta madera infestada de pulgas

y el pueblo entero.

El pueblo s�. El palacio no.

�Jugamos al billar? �Quiere?

No.

Jugu�monos el palacio al billar.

- �S�?
- Ahora entiendo vuestro prop�sito.

�Quer�is la revancha,

eh, enano loco?

Hace treinta a�os, cuando
yo llegu� aqu�, jugamos una partida.

A mil carambolas

Apostamos que �l y su pueblo

aceptar�an el Servicio
Nacional de Sanidad.

Jugamos toda la noche, �No es verdad?

Os cre�ais invencible,
pero yo os gan�.

Y ahora, despu�s de treinta a�os,

quer�is la revancha.

Muy bien.

Nos jugaremos el palacio.

Si el sult�n gana, Sappo-lidi
se queda para siempre

a jugar con el sult�n

todas las noches.

Muy bien, muy bien.
Lo que dig�is.

Pod�is salir.

� Y si le gana?
Parece jugar bien.

Es muy bueno.

Pero al este de Singapur, no hay
quien me pueda al billar.

Est�is perdiendo la pericia, se�or.
Me regal�is un tanto.

V�yase, "totok". Tiene trabajo que hacer.
Compruebe que se hayan ido todos.

Ah...

Y ponga le�a bajo el suelo del palacio.

Un par de buenos golpes y borrar�
esa sonrisa de vuestra cara.

A Sappo-lidi le faltan 500.

Al sult�n s�lo 18.

�Puedo hablarle, se�or?

No, no puede.

�Qu� pasa?

El pueblo est� evacuado
y todo dispuesto.

Amanecer� en media hora.

Espere un momento.

Este pavo real me tiene acorralado.

No se extra�e.

Conoce su mesa de billar
mejor que usted. Mire esto.

- Abolladuras.
- Mire aqu�.

Abolladuras hechas a prop�sito.

Y sab�is al dedillo
la situaci�n de cada una.

Est� bien, viejo tramposo.
Esto lo aclara todo.

Ten�is media hora
para abandonar el palacio.

Porque en 30 minutos quemar� esta
sala de billar de una vez por todas.

Y si quiere hacerme un favor,
�No se vaya y fr�ase!

V�monos, "totok".

Bien, "totok", vamos a repasar
lo que ha hecho.

No hay necesidad de eso.

Las zanjas alrededor
del pueblo est�n cavadas

Prenderemos fuego a los edificios.

Las ratas s�lo podr�n correr
hacia las zanjas.

�Est� bien, vamos!

�Vamos!

�Ha visto al sult�n por alguna parte?

No, no lo he visto.

Parece que no lo ha visto nadie.

�Pobre peque�o bandido orgulloso!

Quiz�s me tom� la palabra.

Ya te veo, "tuan totok".

Ya os veo, se�or.

T�, por favor.

Vete.

Dr. Jansen, no se preocupe por el sult�n.
Est� en su tienda.

�De verdad?

S�. Acabo de servirle el t�.

�El t�?

Lo voy a ahogar en t�.

Lamento haberle dado su taza.

De saberlo no lo habr�a hecho.

�De saberlo?

Que est� leproso.
Lo advert� en sus mano sal coger la taza.

�Que advirti� qu�?

Que est� leproso.
�No lo sab�a usted?

No, no lo sab�a, �Sabiondo!

�Porque no est� m�s leproso que yo!

Pues �chele una mirada a su mano derecha.

Mire, "totok",

puede diagnosticar resfriados,
tendinitis, hongos

abolladuras en una mesa de billar,
�Todo, menos la lepra!

�Est� claro?

Ya te veo, Sappo-lidi.

S�, ya os veo, viejo embustero.

Buen t�.

Os habr�a quemado y guardado en una urna.

M�s t�.

Bien, "totok".
�C�mo lo supo?

Al ver su mano.

� Y qu� vio?

El principio de una lesi�n.
De coloraci�n, reblandecimiento tisular.

Podr�a ser otra cosa.

Filariasis el inicio de
cualquier erupci�n de la piel.

�Por qu� est� tan seguro de que es lepra?

Lo s�, eso es todo.

- Querr� decir que lo supone.
- No. Lo s�.

�Un diagn�stico intuitivo?

Ll�melo como quiera.

Muy bien.

Pues digo que ha hecho un
diagn�stico por intuici�n.

Eso es un don excepcional, Dr. Drager.

�l se quedar� en mi tienda
hasta que nos marchemos.

Yo dormir� en la suya.

Ronco como un elefante, pero
�se ser� su problema...

Basta de t�, se�or.

Esta noche, raci�n doble de P.G.

No hay modo de dormir.
�Seguir� siempre con el canto?

Est� rezando, el viejo brib�n.

Pide la paz a sus dioses.

Al final, tuve que decirle que hab�a
que mandarlo a la leproser�a.

� Y c�mo se lo tom�?
Al principio, mal.

Hasta que le asegur� que ser�a all�
el �nico sult�n.

Y le promet� una mesa de billar.

Me pregunto si le gustar�
cantar en el coro de Willem.

- �Qu� coro?
- El de la leproser�a.

Lo han organizado los salvacionistas.

�Los del Ej�rcito de Salvaci�n?

S�. Le dar�n cuantos c�nticos quiera.

D�game �Est� all� un tal
capit�n Wattereus?

S�, es el encargado.

Pues dudo de que me reciba
con los brazos abiertos.

- �Por qu�?
- Lo conoc� en el hotel de Krasser.

Tuvimos unas diferencias de opini�n

sobre los motivos por los que
se emborracha un hombre.

El capit�n pretend�a
persuadirme de que aquel hombre

luchaba por creer en la existencia de Dios.

Le dije que aquel hombre
s�lo luchaba por una botella.

Entiendo que usted no cree en Dios.

Francamente, no.

Ya veo...

En la llamada civilizaci�n, se puede
ignorar a Dios y salir adelante.

Pero aqu� en la jungla,

Dios coge a la gente
que dice que no existe,

y la se�ala con su dedo
infundi�ndoles inquietud.

Incluso hay veces que uno puede
o�r a Dios canturreando al o�do.

Y a prop�sito,

Willem Wattereus y su mujer,
Betsy, son mis mejores amigos.

Estos son vuestros criados, se�or.
Os llevar�n a vuestro alojamiento.

Os ver� luego.

Gracias Sappo-lidi.

Por aqu�, se�or.

Eh, Ali,

No le habr�is dicho que
vais a quemar sus ropas, �eh?

No, doctor.

�Hola! �Buda sonriente!
�Me has echado de menos?

El silencio es oro para el alma.
�Qu� tal por Rauwatta?

Lo quemamos y sellamos todo.
�ste es el doctor Drager.

- �C�mo est� usted, doctor?
- �C�mo est� usted?

�Brits!

�Willem!

- Me alegro de verte.
- Y yo a ti. Que Dios te bendiga.

�Usted es el doctor Drager!

Volvemos a encontrarnos, se�or.

Desde aquella noche con el pobre Frolick,

he pensado a menudo en el joven
que fue tan amable conmigo

y al que no le di las gracias.

Bien, vamos. Betsy sabe que est�s aqu�
y est� ansiosa por verte.

Bien, entremos.

Vamos. A Betsy siempre
le gustan las visitas.

Aqu� estoy, Betsy

Lleno de mugre y
oliendo como un cocodrilo.

Pero me dije:
Betsy me perdonar�

si no voy a asearme primero.

- Hola, Luti.
- Bienvenido, Doctor.

Es bueno estar de vuelta.
Tuve un desagradable viaje de ida.

Te alegrar� saber
que se me acab� el P.G.

Drager, venga.

Betsy, �ste es el Doctor Anton Drager.

Es... es un "totok", pero tiene
la oportunidad de mejorar.

Doctor, Betsy Wattereus.

�C�mo est� usted, se�ora Wattereus?

Hable alto, muchacho.

Betsy es ciega y muda

pero oye todo lo que
diga si habla alto.

�C�mo est� usted, se�ora Wattereus?

Anton es un novato.

Es un tipo alto, mide
alrededor de metro noventa,

Pelo y ojos oscuros.

Con aspecto de ser del oeste.

�De d�nde es usted?

De Hillegom.

La tierra de los tulipanes.
�Oyes eso, Bets?

�Cree usted que podr�an
cultivarse aqu�?

- No.
- Betsy lo consigui�. O casi.

Ah� fuera en el jard�n.

Hizo traer las semillas y
el abono. �Te acuerdas?

Ten�amos un cocinero chino
que nos hab�a recomendado Krasser.

� Y sabe lo que hizo el idiota?
Arranc� las plantas

creyendo que eran cebollas.

- Luti.
- S�, Doctor.

Eso es, Betsy.
Ahora te dormir�s.

Ma�ana volver� y te contar�
c�mo me ha ido en Rauwatta.

Est� peor.

Est� agonizando, mutilada, muri�ndose
sin que yo pueda hacer nada.

Nada. Absolutamente nada,

excepto sentarme a su lado y

contarle bromas de las
que ya ni puede re�rse.

�Dios, c�mo le gustaba re�r!

Sigue haci�ndolo, Brits

No ha cambiado.

Empiece a trabajar
en el informe ma�ana.

Es el privilegio de ser mi ayudante.

Kramer espera recibir todo por triplicado.

Ah, ya prenda a falsificar mi firma.
No soporto verla.

Hacen su peregrinaci�n diaria
para ver a Betsy

Durante a�os, ella les dio su amor

y ahora se lo devuelven.

As� eran cuando los conoc�.

Al norte de aqu�, en medio de nada.

Extranjeros ingenuos,

que coleccionaban leprosos
como los ni�os los cromos.

Yo ignoraba que hubiera blancos
en 200 millas,

y me fastidiaban
los sanitarios aficionados.

Les pregunt� qu� diablos
hac�an all�

y con qu� permiso

y qu� precauciones tomaban para
su propia protecci�n...

"Ninguna" dijo ella.

"Nos protege Dios."

Entonces le mir� las manos.

"Pues Dios no le ha hecho caso"
le dije, "porque ya est� contagiada."

Me emocion� al dec�rselo.

"�No lo comprende?"
le dije. "Est� usted leprosa."

Estaba arrodillada ante una criatura,
vend�ndole el mu��n del brazo.

"Se pudrir� usted igual que ellos"
le dije.

Ella levant� la mirada y sonri�.

Nunca he sentido tanta bondad y paz.

Cada vez que entro en su cuarto,

la siento de nuevo.

Quiz�s sea ese canturreo
del que te hablaba.

�No ha pensado usted en
poner fin a sus miserias?

Una vez.

Hasta tuve preparada la aguja.

Pero no pude hacerlo.

Si usted quiere, yo lo har�.

�Lo dice en serio?

S�.

Pues d�jeme decirle
por qu� no pude hacerlo.

De eso hace tres a�os.

Ella a�n pod�a hablar algo.

Abri� los ojos y me mir�.

Y lo comprendi�.

Y le pidi� a Dios que me perdonara.

Aunque s�lo lo hubiera intentado.

Aquello me hizo recordar algo

que en aquel momento casi hab�a olvidado.

"Dios nos da la vida y
Dios nos la quita."

Yo no pod�a jugar a ser Dios.

Hola, Doctor. Vamos, Brits,

quiero conocer a tu sult�n.

Hat, ens��ale todo esto al Doctor.

Seguro que le interesar�.

S�, hazlo, Hat.

Tiene mucho que aprender.

De Batavia, Doctor.

Tu letra es para
quedarse ciego.

Confirmado el c�lera
al sur de Sumatra.

Posiblemente sea una epidemia.
Kramer quiere que vuelva.

Tomaremos un avi�n por la ma�ana.

Ser� mejor que vayamos a ver al sult�n.

Estoy con usted enseguida.

A prop�sito, Doctor,

estos archivos est�n
a su disposici�n.

La historia cl�nica de todos los leprosos
del archipi�lago en los �ltimos 30 a�os

Gracias.

D�game, el Doctor Jansen,

�no ha recopilado esos datos
con vistas a escribir un libro?

Bueno, supongo que usted
lo llamar�a as�. Es esto.

En un sentido amplio, podr�amos
llamar a esto una recopilaci�n.

Cuando hace alguna observaci�n
o tiene una idea, lo apunta ah�.

Una vez me ofrec� para ordenarlo,

y prometi� romperme
el cuello si lo tocaba.

Bueno, es hora de
visitar a los enfermos.

�Quiere acompa�arme?

�C�mo? Oh, s�.

Pero, Dr. Kramer,

debe haber alg�n modo de avisar
a Anton de que he venido.

Me temo que no. �l y el Dr. Jansen
viajan ahora r�o abajo.

Les llevar� al menos dos semanas
llegar a Labuan Redjo.

Pero yo debo regresar a
fin de mes con los Boosmans

Lo que significa que no podr� ver a Anton.

Vamos Kramer, le asegur� a esta se�orita

que Drager estar�a de vuelta
en Batavia para estas fechas.

Por desgracia, excelencia, un
brote de c�lera

se ha convertido en epidemia.

Nos llevar� cinco meses
poder controlarla.

Piet, disc�lpame.

Herr Boosmans, en su viaje de inspecci�n,
�Debe usted visitar Sumatra?

S�, desde luego.

Si se pudiera modificar un poco su viaje

podr�a estar en Labuan Redjo
casi al tiempo que Anton.

�Por qu� no?

- Oh, eso es maravilloso.
- Bien.

Le enviar� un mensaje a su
novio para que la espere.

Gracias.

Lo sab�a. Con que llega la corderita.
Con que viene corriendo a la cita.

No pod�as esperar, �Eh, muchacho?
�Me oye?

Yo no le ped� que viniera.
Ni siquiera sab�a que ven�a.

Todos los malditos "totoks"
sois iguales.

�Unos pocos meses en la jungla,
y s�lo pens�is en

iros de aqu� y casaros!

No tengo ninguna intenci�n de irme
ni de casarme. Por ahora.

As� que c�lmese.

Tenga. L�ala.

Todo lo que dice Kramer es
que Els est� aqu� de visita.

Viaja con los Boosmans.
Desembarcar�n ma�ana.

Ni s� cu�nto tiempo
estar�n aqu�...

�Qui�n es ese Boosman?

Un amigo de la familia de Els.

Relacionado con el ministerio
de colonias, creo.

�Se llama Hendrik?

S�, �Le conoce?

He o�do hablar de �l y adivino
a qu� habr� venido.

Malditos bur�cratas.

- Le ver� para la cena.
- �D�nde vas?

A comprar un traje.
Si hay alguna tienda abierta.

�Temes que no le gustes a la corderita
con la ropa de trabajo?

�Bueno, vete y divi�rtete,

pero ma�ana tomo el avi�n para Manpuko

y debes estar all� tan pronto
te libres de esa chica!

�Muy bien!

Solo una visita, �Eh?

Una visita, �venga ya!

P�ngame con la guarnici�n.

�Mayor? BritsJansen.

�Que qu� hago? Nada m�s que
salvarle la piel.

As� que l�vese bien las orejas y escuche.

�Vamos, muchachos, aprisa!

�Qu� es esto? No habr� avisado usted,
�Verdad?

- No, se�or.
- Querido, �qu� es esto?

�Presenten armas!

El mayor Viormansa su servicio.
�C�mo est� usted?

Bienvenidos, excelencia y se�ora Boosmans.

�Bienvenidos a Labuan Redjo!

�La ves?

S�, ya ha desembarcado.
Pero a�n no me ha visto.

Cre�a que se iba usted a Manpuko.

En el aeropuerto me enter�
de que iba a haber una fiesta

y no he querido perd�rmela.

�Qu� fiesta?

Los residentes y el mayor

van a dar esta noche una fiesta
de bienvenida al viejo Boosmans.

Excelencia, esperamos que
su visita sea agradable.

Trae las flores para la se�ora.
Corre.

�Fuego!

�Orden!
Oh, �Cu�nto lo siento!

Por aqu�. Por aqu�, excelencia.

�Els! �Els!

�Els!

- �Els!
- Anton.

�Te ver� en el hotel!

�Te ver� en el hotel!

Y as�, en este feliz momento,
les hago esta pregunta:

�Brindamos por su excelencia,
Herr Boosmans,

un ben�fico dirigente,
que nos libera de nuestro problemas?

�S�!

� Y por la se�ora Boosmans,
siempre al lado de su marido,

una gran reserva para su
fe y su valor?

� Y por la se�orita Els Van Duin,
un soplo de belleza de nuestro pa�s?

� Y ahora, vamos a disfrutar de la noche?

�S�!

�Pues a beber!

- �No quiere hablar, mayor?
- S�, s�.

Damas y caballeros,
distinguido...

Damas y caballeros...

Por favor. Por favor.

Creo que es el momento para
poner un poco de seriedad a esto...

�Si�ntese!
�M�sica! �M�s m�sica!

Quiz�s algunos se han animado
un poco m�s de lo que deber�amos,

- Pero si...
- �Silencio!

�Silencio! �Si�ntense!
�Por favor!

Estoy seguro de que su excelencia
y su encantadora esposa estar�n...

Bueno, quiz�s luego,
cuando hayamos comido.

Quiz�s luego.

No haga caso a esta gente
de frontera, querida se�ora.

S�lo son unos chicos excitados
por su delicada presencia.

Bueno...

Es un placer ver por aqu�
a una chica tan bonita.

Pero no se quedan mucho tiempo.

Los hombres se desenvuelven bien.
Pero las mujeres...

Como esas dos al lado de Anton.

O se hinchan como barriles

o se adelgazan

c�mo fideos.

�Dejadme salir de aqu�!

Mire, Doctor, �Ha sido un ni�o!

Se�ora, tiene sus ojos.

S�.

S�, para esto he venido.

�Sabes? Creo que al Dr. Jansen
no le gusta la idea de que t� y yo...

Por lo menos aqu� no.

No sabes cu�nta
raz�n tienes

Mont� esa pelea s�lo para asustarte,
estoy seguro.

Pues dile que no ha conseguido
su prop�sito.

Olv�dalo.
No es m�s que un toro viejo.

Se le ha olvidado una de las cosas
m�s bonitas de la naturaleza.

�Cu�nto tiempo puedes quedarte?
�Dos semanas?

Los Boosmans se van ma�ana.

�Ma�ana?

�sta era la �ltima parada de su viaje.

Pues no te vayas con ellos.

S�, me voy.

Mi familia s�lo me permiti� venir
porque ven�a con ellos.

He tenido suerte de poder
verte al fin.

Oh, Anton.

Ahora que estoy aqu�,
no me dejes regresar.

Por favor, no me dejes regresar.

Estar�a loco si te dejara ir.

Y yo, Els Van Duin,
ante la mirada de Dios,

te tomo a ti, Anton Drager,
como mi leg�timo esposo.

Y yo, Anton Drager,
ante la mirada de Dios,

te tomo a ti, Els Van Duin
como mi leg�tima esposa.

Yo, Anton Drager,
te tomo a ti, Els Van Duin...

Ante la mirada de Dios

Ante la mirada de Dios, te tomo a ti,
Els Van Duin como m� leg�tima esposa.

Qued�is unidos en santo matrimonio.

Durante la ceremonia me pareci�
que no eras sincero.

�Qu�?

Intentaste no mencionar a Dios.

Ten�a prisa.

Har� de ti un fiel creyente.

�Qu� ocurre?

Un mensaje, tuan. Es importante.

Gu�rdame el sitio.

�S�?

Mensaje del doctor gordo, el barbudo.

Est� en la c�rcel.
�Que est� d�nde?

En la c�rcel.

�Has o�do eso?

�Se lo merece!

Dice que vaya a sacarle de la c�rcel.

Dice que me pague a m� tambi�n.

Dile que ir� en cuanto me vista.

Deber�a dejarle ah� un buen rato.

No, no puedo esperar para
o�rlo gru�ir

cuando sepa que su plan
se ha vuelto contra �l.

Volver� en media hora.

�Eso s� que no! �Voy contigo!

No me perder�a por nada en el mundo
la expresi�n de su cara.

Adem�s, �No crees que deber�as
comprarme un anillo de boda?

Y, hablando de la mujer triunfante,

voy a avergonzarlo hasta que nos
haga el m�s precioso regalo de bodas.

�Bien!

Ya era hora de que aparecieras,

aunque hayas interrumpido
una historia divertida.

Te presento a mi amigo
Stegomyia Fasciata,

as� llamado por su parecido
con el mosquito amarillo.

Un sujeto admirable,
excepto por las pulgas

y que huele como un oso de feria.

Si vas a trabajar para m�,
primero tendr�s que ba�arte.

�Se ha pagado tambi�n su multa?

- S� se�or. Pueden irse los dos.
- �Vamos, Stego!

Hubo algo de pelea anoche,
pero vali� la pena.

Bien, supongo que sus excelencias

y la corderita se habr�n marchado ya,

debidamente impresionados
por nuestra conmovedora recepci�n.

S�.

Los Boosmansse han ido,
pero no la corderita.

La corderita ahora se llama

se�ora de Anton Drager.

Nos casamos anoche.

Y me siento feliz al comunicarle
que esta mujer prosperar� en este clima.

�No nos va a desear felicidad, doctor?

Por supuesto, por supuesto.

Pero yo no hab�a contado con...

Ten�a planes para que siguieras
trabajando conmigo y...

Esto no cambia nada, Doctor.
Se lo he explicado todo a Els.

Le he contado que nos ausentaremos
durante meses

y ella tendr� que quedarse en Batavia.

Y yo estoy de acuerdo.

Despu�s de todo, es mucho mejor
esperar casada en Batavia

que esperar soltera en Holanda.

Al menos, podremos vernos
de vez en cuando.

No, eso no funcionar�.
No ha funcionado nunca.

Funcionar�, se�or.

Puede contar conmigo, Doctor.
Todo ir� perfectamente.

No.

Un hombre en la selva s�lo puede
tener una idea en la mente.

No puede preocuparse por
su esposa en Batavia.

S�lo puede estar atado al trabajo
que he planeado para �l.

Debe ser un hombre solo.

Y ten�a la sensaci�n
de que t� lo eras.

Por eso pens� que
quiz�s alg�n d�a podr�as...

Bueno, eso es todo, creo.

Muy bien. Regresa e informa a Kramer.

�l sabr� emplearte en el hospital.

Doctor, por favor.

No puede hablar en serio.

Acabo de explicarlo.
Es como lo he dicho.

Mire, corderita, les deseo
felicidad a los dos.

Y ahora que la han encontrado,
no la dejen escapar.

Vamos, Stego.

Vamos a poner el l�quido
a ese pelo...

Ah� tienes su precioso regalo de boda.

Vamos, Jano, dinos unas palabras.

S�, Jano, por favor.

Mi esposa y yo estamos conmovidos
por este homenaje

por nuestro 15
aniversario de boda.

Si fuera mi abuelo,
estar�an invitados

a celebrar esta fiesta todos los a�os

Como saben, nosotros los musulmanes,
siguiendo la ense�anza del Cor�n,

podemos tener hasta cuatro esposas.

Pero, posiblemente influenciado
por una larga asociaci�n

con mis queridos amigos occidentales,

siempre agradecer� a Al�

que s�lo dejara sitio
en mi coraz�n para una.

- Hola, Brits
- Hola, Marty

El coche est� ah�
�Has tenido buen viaje?

Estupendo.

�Bueno, corderita!

Doctor, �puedo hablar con usted un
momento?

Claro, claro.

Stego, ve con el doctor.

�Est� Anton con usted?

No. Est� en la leproser�a
desde hace unos d�as.

Entonces, �Qu� hace usted
aqu� a estas horas?

Supe que usted ven�a
y ten�a que hablarle.

Bien...

Bien, hable.

Doctor, quiero que Anton
trabaje con usted.

Tiene que permitirlo. Por favor.

- �Qu� va mal?
- Todo.

Nuestro matrimonio no funciona.

No s� qu� hacer.

Anton es tan infeliz...
Est� tan cambiado...

�Qu� ocurre?
�Otra mujer?

No, si fuese algo as�
sabr�a c�mo manejarlo.

Es algo m�s y no puedo ayudarle.

No creo que Anton
haya aceptado nunca la ayuda de nadie.

No.

Y yo estaba muy orgullosa por eso.

Pero ahora estoy asustada.

No s� por qu�,
pero temo por Anton.

Estoy terriblemente asustada.

Dr. Jansen,
tiene que hacerle volver con usted.

Vino aqu� con s�lo ese
pensamiento en su mente.

Trabajar con usted.
Eso era de lo �nico que hablaba.

Bueno hijita. Todo se arreglar�.
S�lo dele algo tiempo.

Y admitir� usted que mi decisi�n
ha sido correcta.

No, no lo ha sido.

Porque usted no se ha tomado
la molestia de conocerme

y saber que yo pod�a
hacer lo que dije

y que Anton pod�a seguir
trabajando con usted.

Porque es usted terco
y cabezota. Usted lo sabe.

�Cuidado, le subir� la tensi�n!

�Pues que me suba!

Ahora, har� un trato con usted.

Deje que Anton vuelva con usted
y yo me quedar� aqu�.

No crear� ning�n problema.

Y si no sale bien
d�gamelo y me ir�.

Regresar� a Holanda si tengo que hacerlo.
Pero perm�tale volver con usted.

Le amo y quiero verle feliz.

Le hablo con toda sinceridad.

�Hay alguien?

�Eh! �Corderita!

�No hay nadie?

Hola.

Soy yo, el m�dico testarudo.

�Qu� haces t� aqu�?

�Fuera! �Fuera!

Doctor Jansen.

S�, corderita, soy yo.

Es la primera vez que llamo
a la puerta de una mujer

para admitir que me equivoqu�.

He pasado la noche despierto
y bebiendo para darme �nimos

pero me rindo.

�Quiere decir que Anton
volver� con usted?

No me lo restriegue, muchacha.
Usted forz� el trato.

Y ahora v�stete que quiero desayunar.

�Lo que quiera!

Doctor Jansen, cuanto le quiero.

�B�scame otra botella de ginebra,
mu�eco mir�n!

�Bienvenido, forastero! �Toma un trago!
�nete a la fiesta.

�Qu� fiesta?

El Dr. Jansen quiere que
vuelvas a trabajar con �l.

- �Qu�?
- As� es, muchacho.

Los dos sustitutos
con estetoscopio que Kramer me mand�

no me sirven. As� que pens� en ti.

Me dije: "Brits, tendr�s que tragarte
o que dijiste." Y aqu� estoy

En serio, estamos empezando
algo grande en Borneo.

- �Vendr�s conmigo?
- �Que si ir�?

No, Chun. D�jalo.

- �No deshago la maleta, tuan?
- No. No importa.

Hay algunas cosas que quiero
ordenar yo mismo. Gracias.

He o�do que estuviste en Manpuko.

S�, fui a hacer unas investigaciones
y revisar los archivos.

S�. �Qu� tal Betsy y Willem?

Igual. Ninguna novedad.

Supongo que tendr�n
cosas de las que hablar.

No, no. Me parece que sois vosotros
los que ten�is que hablar.

Nos iremos ma�ana por la noche.
�V�monos, Salom�!

Qu�tate el velo.

Nos veremos en la oficina
de Kramer a las 9:00.

�Se�or?

Comida aqu�. Comer.

Luego. D�jala en...

�Qui�n es?

Laja. Hija de cocinera vieja.
Vieja se fue.

Ahora Laja cocinera.

Es una cocinera muy bonita.

�Bonita? S�, s�, bonita.

Ponla encima de la cama.

Bonita. Es bonita.

No ella, idiota, la comida.

Largaos de aqu�.

Doctor.

Disculpe, acaba de llegar
un mensaje del campamento 5.

Jansen sali� de all� hace 40 d�as.
Deber�a estar aqu� ma�ana.

As� que al fin viene el viejo, �Eh?

Gracias.

�Para esto he venido!
He pisado todas las piedras de Borneo.

Parece que has estado ocupado.

S�, su magia funciona.
Vienen en tropel.

Informaste de cuatro casos de viruela
el mes pasado. �Alguno m�s?

No. Todos llegaron en una canoa.

Hab�an estado cerca de Manawi.

�C�mo le va all� a Sordjano?

Su �ltimo mensaje dec�a que todo
iba bien y trataba de relacionarse.

Creo que har� un buen trabajo.

Muy bueno.

�Qu� alivio!

Bueno, ya que est� c�modo
y de buen humor,

tengo algo para que lo lea.

No me molestes con informes, muchacho.
Estoy de informes hasta la coronilla.

Bueno, no es exactamente un informe.

L�alo.

Jansen, "Sobre la lepra".

Publicado por Anton Drager,
Doctor en medicina.

�Estas son mis notas!

�Mis notas de Manpuko!

Exacto.

Le dije que fui all� a investigar.

� Y qui�n te ha dado permiso
para usar mis notas?

Nadie. Simplemente, las he usado.

�Rastrero, arrogante, advenedizo...!

Ll�meme lo que quiera pero despu�s.

�Estoy ocultando algo?

He trabajado en eso durante
los �ltimos cuatro meses.

Todo lo que le pido es que lo lea.

� Y bien?

Es bueno.

Es muy bueno.

�Maldita sea, es magn�fico!
�T�mate un trago conmigo!

Pero no lo ha le�do todo.

He le�do lo suficiente.

Me interesa conocer su opini�n
sobre el �ltimo cap�tulo.

He llegado a algunas
conclusiones propias.

"...sugerimos que la administraci�n
de los centros m�dicos

ahora bajo el control
de religiosos

y organizaciones de caridad,
sea transferida

al Servicio Gubernamental de Salud."

Esto va dirigido
contra Willem Wattereus

- Me temo que s�.
- �Por qu�?

Los dos sabemos por qu�.
La leproser�a est� superpoblada.

Hay pacientes cuya enfermedad
est� detenida hace a�os,

y en lugar de despedirlos
para hacer sitio a otros,

Wattereus los mantiene all�.

Lleva el hospital con sentimientos,
no con sentido pr�ctico.

S� que este paternalismo
va junto con su vocaci�n,

pero no hay sitio para los sentimientos
en una instituci�n eficaz.

Drager,

hablas de los leprosos
como si fueran n�meros

Y no son n�meros, son personas.

Con la enfermedad detenida o no,
�D�nde crees que podr�an ir?

�Te lo voy a decir!
�A ning�n sitio!

Los rechazar�an hasta
sus familias,

vagar�an de un sitio a otro
entre el miedo y la superstici�n.

Pero gracias a Willem,
tienen un hogar,

un poco de comprensi�n
y un poco de amor.

�Y en mi libro se dir� que se
quedan all�, y Willem tambi�n!

Ten eso bien claro.

No lo tome como si fuera
un ataque a Wattereus.

Despu�s de todo, �l es irrelevante.
La cuesti�n es...

�Qu� quieres decir con que
"�l es irrelevante"?

Que se le deje como est�, pero
que el control debe llevarlo

el Servicio de Salud.

Estamos de acuerdo en que se necesita
m�s presupuesto, m�s equipo, m�s personal.

Eso es lo que lleva usted pidiendo.
Bien, pues podr� tenerlo todo,

porque cuando yo vuelva a Holanda
y se publique esto,

estar� en posici�n de exigir...

�Un momento!

�Qu� quiere decir con
"cuando vuelva a Holanda"?

Eso exactamente.

A Holanda.

� Y cu�ndo piensas hacer eso?

Cuando cumpla mi contrato aqu�.

Cre�a que hab�as venido aqu�
s�lo para trabajar conmigo.

- Y as� es
- �No!

Has venido por esto.
Esto es todo lo que quer�as.

Esto y los beneficios que ganar�s.
�No es as�?

A ti no te importa nada de lo
que intentamos hacer aqu�.

No tengo intenci�n de
enterrarme aqu�

y sudar toda mi vida
en estas islas. �Para qu�?

Cre� que lo sab�as, pero veo que no.

Y no hay manera de poder explic�rtelo.

�Explicarme qu�?

�Sacrificarse por gente que
no sabe ni decir su nombre?

Yo s� el m�o.

Pero empiezo a olvidar el tuyo,

porque no s� qui�n
ni qu� te importa.

Pero hay algo que s� s�.

A uno tiene que importarle
algo o alguien para seguir vivo.

�Especialmente ah� fuera!

Willem dijo que cargabas una cruz,

y es cierto.

Y tarde o temprano,
eso te destrozar�, muchacho.

Pero no aqu�.
No puedo permitirlo.

Pedir� que te reemplacen
lo antes posible.

�Stegomyia? �Mandur?

�Comida, tuan?

Laja.

�Drager!

�Vaya, el inspector Bevers!
Como un milagro.

Hola, Doctor.
Traigo a su sustituto.

�Dr. Drager? Soy el Dr. Schutters.

As� que mandan un "totok", �Eh?

S�, y agradezco mucho
la oportunidad. Yo...

Bien, tome usted posesi�n, Doctor.
Aqu� est� todo.

Por cierto, se llama Laja.

�Qu� tal?

�D�nde dejo las provisiones?

Ah�.

Gracias.

Disculpe.

He terminado. Puedes llev�rtelo.

�Un trago, inspector?

No, gracias. No tengo tiempo.

Y usted tampoco, doctor.
Tenemos que irnos enseguida.

Estoy listo.
�Por qu� tanta prisa?

Me llevar� 10 d�as desviarme a Kokoto
antes de llevarle a usted r�o abajo.

El gu�a del r�o ha desaparecido
o tiene problemas.

La oficina central no sabe
nada de �l desde hace tiempo.

Los �ltimos mensajes que mand�
no ten�an ning�n sentido.

Al principio creyeron que
estar�a de viaje por la selva,

pero ya han pasado seis semanas
y est�n preocupados.

As� que, tan pronto
como tenga el equipaje...

Lo tengo listo desde hace semanas.

Despierte, Doctor.

No se ven canoas,

ni un perro, ni una gallina.

Bueno, por lo menos est� aqu�.
Suena su gram�fono.

- �C�mo se llama este hombre?
- Frolick.

�Harry Frolick?

S�, �le conoce?

Me lo han presentado.

ah-ah...

�Qu� es eso?

Brujer�a.

Magia negra.

�Frolick!

�Frolick?

Tiene que estar por aqu�.

Qu�dese aqu�, doctor. Yo ir�
a echar un vistazo por la aldea.

�Frolick? �Harry Frolick?

�Me recuerda?

Drager.

En Rokul.

Anton Drager.

�Alto, Frolick!

�Frolick!

�Quieto!

�Frolick!

Dios m�o.

Un momento, caballeros

S�lo tratamos de determinar
qu� le sucedi� a ese hombre.

S�lo tratamos de determinar
qu� le sucedi� a ese hombre.

Se lo acabo de decir.

Un estado psic�tico
inducido por exceso de alcohol.

� Y ese es su diagn�stico?

- �As� figurar� en su informe?
- S�.

�No! No es tan sencillo.

No soy m�dico, pero no se puede dejar
escrito que Frolick era un borracho loco.

Alguien le llev� a ese infierno.

Lo que llev� a Frolick

fue la cantidad de botellas
que ten�a.

Muy bien, pero �de d�nde las sac�?

Mire la etiqueta, doctor.
Es de 1916.

Todo un cargamento de ginebra
fue tra�do aqu�

hace 20 a�os por la
compa��a minera de Mamawi.

Sabemos que nunca lleg� all�.
Se perdi� en mitad de la jungla.

Alguien lo ha encontrado
y lo ha usado con Frolick.

Alguien inteligente que consigui�
volver loco a un hombre.

- �Burubi?
- Eso sospecho.

Kokoto se asienta en la orilla de Mamawi.

Tengo la corazonada de que el
viejo diablo anda suelto de nuevo.

Pero nunca hab�a actuado tan al sur.

�Qui�n es Burubi?

El "dunkun", el jefe, el brujo.

Una vieja culebra muy poderosa.

Manda en Mamawi.

Aterroriza a los nativos
con su magia negra.

�Cree que el viaje de Sordjano
haya desencadenado esto?

Podr�a ser.

�Ha sabido algo de Sordjano �ltimamente?

S�, hace unos diez d�as.

Dec�a que estaba bien,

que hab�a contactado
con algunos nativos.

Iba a dirigirse a la aldea
con la mitad del destacamento.

Sordjano sabe lo que hace.

- Estar� bien.
- Eso espero.

Bien, parece que esto es todo lo que
podemos hacer por el momento.

Ustedes dos parecen exhaustos

Drager, s� que est� deseando
volver a casa.

No quiero que haga su informe
hasta que descanse, �Entendido?

Chun.

- �Sigue dormido el doctor?
- Creo que s�, se�ora.

Querido.

- �Has podido dormir?
- Un poco.

Pero no lo bastante,
y t� lo sabes, doctor.

Apenas has comido ni dormido
desde que llegaste.

Anton, s� que tienes en la cabeza
lo que sucedi� all�,

pero intenta olvidarlo, por favor.

No podr�as haber hecho otra cosa.

Por �ltima vez, Els, olv�dalo.
�Porque yo ya lo he olvidado!

�Por qu� no salimos esta noche?

Fuera de la ciudad. Cenar en el club.
Ver a la gente.

- �Qu� te parece la idea?
- Maravillosa.

Capit�n Wattereus.

�Cu�ndo ha llegado?

He venido para mi examen m�dico mensual.

Me alegro de volver a verlo.

Lo he conocido durante tu ausencia.

He llamado a su casa y su
criado me dijo que estaban aqu�.

Magn�fico.
�Tomar� el caf� con nosotros?

Me gustar�a, si me lo permiten.

- Por supuesto.
- Gracias.

�Quiere traer una taza para
el capit�n, por favor?

Es delicioso el caf�
que sirven aqu�.

En la colonia nunca
puedo tomarlo tan bueno.

Gracias.

He visto al inspector Bevers
en el hospital.

Me ha contado lo de Harry Frolick.

Ha debido ser terrible para usted.

No fue agradable.

Me siento en cierto modo responsable.

De haber sido yo m�s sabio,
habr�a podido ayudar a Frolick.

Para ayudarlo habr�a tenido
que hacer un milagro,

transformando el whisky en agua.

Eso no habr�a cambiado lo sucedido.

�Tambi�n usted cree en esa
tonter�a de la "magia negra"?

S�, porque existe.

Pero tambi�n coreo en el poder
del esp�ritu humano.

Y conozco la debilidad
de los hombres sin �l.

�No lo entiende?

Lo torturaron... con el silencio.

Lo forzaron a quedarse solo,
sin tener nada para luchar contra ellos.

Nada.

Se aisl� de Dios y de la gente,

al menos del amor de la gente,

las �nicas fuentes de fortaleza
a las que el hombre puede recurrir.

Y as� estaba indefenso
contra la selva.

Es terror�fico.

Todos hemos entrado en la selva
perdidos y temerosos,

pero ante la elecci�n de

seguir el camino en espiral
que conduce a Dios,

o permanecer en la oscuridad
y volver hacia el estado animal.

S� lo aterrador que es

mirar a la cara de un ser humano,

alguien a quien uno conoce,

pero no puede reconocer,

y ver en ella la imagen de
lo que podemos llegar a ser.

�Qu� cree usted que vimos, capit�n?

�El rostro del demonio?
�Un alma en pena? �Al pecador?

Esa es la palabra, �No?

- No, es eso lo que quise decir.
- �Por qu� no?

Llamemos pecador al pecador.

Todos somos pecadores,
�No es as�, capit�n?

Pecadores o santos.
�No es esa la elecci�n?

- Anton, por favor...
- No, espera un momento.

Tengo algo que puede
interesarle al capit�n.

Cuando volv�a a casa, supe que

un amable tendero, temeroso de Dios

hab�a cometido un brutal crimen sexual.

Recib�a un tratamiento de hormonas
por una prostatitis cr�nica,

y una sobredosis accidental
pudo ser la causa.

As� que, si una simple inyecci�n

puede hacer un pecador de
un hombre piadoso,

lo contrario tambi�n
podr�a ser cierto.

Consid�relo.

Es muy posible exista,
esperando ser descubierta,

alguna singular
combinaci�n qu�mica

que pueda trasformar en santo
a un pecador.

Pi�nselo.

Ser�a la primera explicaci�n
qu�mica de la fe,

como poner a Dios
en un tubo de ensayo.

La religi�n s�lo ser�a
una cuesti�n de gl�ndulas.

Con una inyecci�n,

10 cent�metros c�bicos de suero santo,
y tendr�amos el cielo en la tierra.

Es como para considerarlo,
�No, capit�n?

Y ahora, si me disculpa,
ir� por un trago.

No s� qu� decir, capit�n Wattereus.

- No s� qu� hay dentro de Anton.
- Yo s�.

Me temo que he sacado a relucir
el tema deliberadamente.

Y usted ha sido muy amable,
como siempre.

- Buenas noches, querida.
- Buenas noches, capit�n.

�De verdad era eso necesario?

�Qu�?

Humillar al capit�n de ese modo.

Me pareci� divertido.

Ha sido cruel, ofensivo
y embarazoso.

S�lo fue una explicaci�n
sobre las probabilidades

Anton, intentaste
molestarlo deliberadamente.

�Por qu�?

�Para limpiar la atm�sfera!

Toda esa basura espiritual
sobre el pobre Harry

el hombre sin Dios, golpeado por
sus pecados por un pu�o celestial...

Pero �l no dijo eso.

Pero es lo que quer�a decir.

S�lo dijo que necesitamos creer en
un poder mayor que nosotros

que nos necesitamos unos a otros
y, sin eso, estamos solos,

que nadie es lo bastante fuerte.

He venido oyendo eso
desde ni�o

y entonces me asustaba.

Amaos unos a otros. Amad a Dios o
�l os destruir�. Lo tengo muy o�do.

Mi padre pretendi� subirse
a ese p�lpito

y gritarnos el infierno y la
condenaci�n hasta enronquecer.

�Amar los unos a los otros?

�Qu� chiste!

Me golpeaba a diario para
ense�arme a amar a Dios

y salvarme del fuego del infierno.
�El muy hip�crita!

Nunca am� a ning�n ser vivo.

El capit�n Wattereus no es como tu padre.
No lo es de ning�n modo.

Predica lo mismo.

S�lo que ya no me asusto.

Eso se acab� hace mucho.

Acab� con eso cuando yo
ten�a 10 a�os

De una vez y para siempre.

Me arrodill� en su iglesia,
mientras �l nos asustaba desde el p�lpito,

y desafi� a Dios a que me matara.

Dije, "No te amo, Dios. �Me oyes?"

"As� que m�tame. Te odio
y te temo y te odio.

Adelante. Qu�mame.
Apl�stame. Adelante.

Pero no te amar�."

Segu� arrodillado

le saqu� la lengua y le dije:

"Adelante. Hazlo. M�tame."

Y esper�.

Estaba tan asustado que empec� a llorar,

pero mi padre gritaba tan fuerte
que nadie pod�a o�rme.

Mi madre estaba arrodillada junto a m�.
Pero ni ella me o�a.

Y esper�.

Y no ocurri� nada.

Nada.

Hice lo mismo todos los domingos
durante un mes.

Y entonces,

lo supe.

Supe que Dios no pod�a tocarme.
No pod�a herirme.

Y si no pod�a herirme,
tampoco pod�a ayudarme.

No pod�a nada.

Deb�a cuidarme solo.

Y eso he hecho.
No necesito a nadie.

Anton, todos necesitamos ayuda alguna vez.

Todos tenemos miedo y
necesitamos de algo, �No?

No creas eso.

No hay que tener miedo a nada,
a nada de este mundo.

Ni necesitar a nadie porque
s�lo est� uno mismo. No hay m�s.

�De verdad crees eso?

�No necesitas a nadie?

�No me necesitas a m�?

- No he dicho eso.
- Pero es lo que crees.

Nunca me dejas acercarme a ti.

Nunca me dejas formar parte de ti.

Y ahora no me dejas que te ayude.

Y quiero ayudarte, Anton.

Pero, �C�mo?

S�lo dime c�mo, por favor.

�Qu� te diga qu�?

�Qu� quiere o�r?
�Mis aventuras en la jungla?

Quiero saber qu� te est� pasando.

Muy bien. �Quieres saberlo?
Pues voy a dec�rtelo.

Mi trabajo con Jansen y sus notas
no me han servido de nada.

Jansen me ha apartado.

Le dije que �l era un loco idiota
pudri�ndose en estas islas,

y que yo no iba a hacer lo mismo
ni un minuto m�s.

Y luego tuve que matar a un hombre.
�Qu� m�s quieres saber? �Los detalles?

- Olv�dalo. Me voy
- No, espera. Quer�as que hablara.

Una noche tom� a una muchacha nativa.

No dijo una palabra en dos semanas.
No habl�, no hizo preguntas.

�Es eso lo que quer�as saber?

No, no era eso lo que quer�a saber.

Pero puedo perdon�rtelo

porque eso no me preocupa.

Lo que me preocupa eres t�.

Anton, tengo miedo.

No dejo de pensar en si
pudi�ramos volver a Holanda.

�sa es la respuesta para ti, Els:
volver a Holanda.

Nunca debiste venir aqu�.

Fue un error.
Deb�a haberlo sabido,

porque tienes raz�n:
no te necesito,

ni a ti ni a nadie.
As� que, por nuestro bien, vete.

Vuelve a casa.

�Diga?

S�, est� aqu�. �Doctor Drager!

�Doctor Drager?

Es para usted. El doctor Kramer.

S�, Doctor.

S�, desde luego.
Voy para all�.

Sordjano se encuentra en dificultades

Sordjano se encuentra en dificultades

Hace una hora que recibimos
se�ales d�biles desde Mamawi.

Todo lo que podemos deducir
de la se�al tan difusa

es que est� muy enfermo, que necesita
un m�dico y que est� solo all�.

�Qu� ha pasado con su grupo?

Desertaron o los mataron.
Sabr� Dios

Anton, usted es el �nico a
quien puedo mandar all� r�pidamente.

- �Se siente capaz?
- Desde luego. �Cu�ndo me voy?

Ahora estamos cargando
algunas provisiones.

Podremos volar all�
por la ma�ana,

llegaremos al Campamento 4
por la tarde,

tomaremos unos hombres
y subiremos r�o arriba.

Viajando d�a y noche, podr�an
llegar en diez d�as.

Estoy seguro de que esto
es tambi�n cosa de Burubi.

Est� decidido.

Llegar� usted all�, sacar� a
Sordjano y cerrar� la estaci�n.

�se es el viejo Burubi.

Nos hace notar que sabe
que estamos aqu�.

�Qu� hace aqu� un vag�n de ferrocarril?

La compa��a minera lo usaba como base en
la obra del ferrocarril que intent� construir.

Drager, �Venga!

�Dasi! �Trae mi malet�n!

Burubi ha estado trabaj�ndolo.
O intentando trabajarlo.

Pero Jano no tocaba el alcohol.

Trae esa l�mpara.

Voy a mandar un mensaje a Batavia.

Esto est� sin bater�a.
Debe haber repuestos.

Los repuestos tampoco valen.
La lluvia los ha estropeado.

�Qu� ha pasado, Jano?

Jano, tenemos que saber qu� ha pasado.

- Bamb�.
- �Qu�?

En la comida. Bamb�.

Lo com�...

- Dios m�o. Conque es eso...
- �Qu�?

Raspan bamb� en la comida.

Miles de peque�as astillas.
Uno no las advierte al comer.

Es como vidrio molido,
pero m�s lento.

Lo desgarra todo por dentro.

Busque su placa de identidad.
Mire su grupo sangu�neo.

- Tipo O. El general.
- Es el m�o.

Dasi, trae m�s l�mparas
Va a anochecer pronto.

Hubo una plaga.

Trat� a todos los que pude en un d�a.

Por la noche nos ofrecieron comida.

Eran muy amigables

Comimos.

Fue un error.

Un descuido.

A la ma�ana siguiente se hab�an ido.

Todos.

Me qued� solo.

Regres� aqu�, empec� a sangrar.

No s� cu�nto tiempo.

Mis muchachos desertaron o los mataron.

No lo s�.

Burubi sab�a que yo no me ir�a.

Por eso intent� matarme.

Ten�a que hacerlo.

Era lo �nico que �l pod�a hacer.

Pero tambi�n fall� en eso.

Ma�ana tengo que
demostr�rselo a Burubi.

Saldr� fuera y me arrodillar�

para dar gracias a Al�.

Debemos quedarnos aqu�.
Debemos quedarnos aqu�.

Salvar de �l a la gente.

Son como ni�os

le temen a Burubi.

Tenemos que ayudarlos.

Tenemos que...

Drager, las �rdenes son muy claras:
cerrar la estaci�n y marcharnos.

- �Qu� pretende usted probar?
- Nada,

excepto que no hay razones
para salir corriendo,

as� que me quedo aqu� con los muchachos

Si esa chusma anda por ah�
tendr� que salir antes o despu�s.

Quiere buscarse problemas,
�Por qu�?

Ya ha visto lo que puede pasar.

Ya ha visto a Frolick,
y ahora a Sordjano.

Yo no soy Frolick,
ni tampoco Sordjano.

No necesito alcohol, ni una alfombrilla
ni la Biblia.

Puedo manejar esto. A mi manera.

Dasi, Mara. �Venid!

Escuche,

No sabe si estos hombres
se quedar�n con usted.

Est�n nerviosos. Si se ponen
m�s nerviosos se ir�n.

Entonces me las arreglar� solo.
Adi�s, inspector.

Vosotros dos os quedar�is con �l.
Dejar� un bote y unos hombres.

Vosotros dos os qued�is.
�Entendido?

�Idiota testarudo!

Vamos, muchachos. A trabajar.

Que vean que vamos a quedarnos.
�Verdad, Tano?

S�, tuan.

�Dasi!

�Mara! �Tano!

�Eh Burubi!
Ah� tienes tu magia negra.

Acaba de llegar el informe de Bevers.
Sordjano ha muerto.

�Oh, no!

Y ahora, �Qu� hay de Drager?

Comun�quese con Bevers.

D�gale que vuelva a Mamawi y saque
de una vez a Drager de all�.

Puede arrestarlo, si es necesario.

P�ngame... P�ngame con
la se�ora Sordjano, por favor.

�T� dukun?

�Burubi?

�S�, t� eres!

Este hombre, fiebre.

�Quieres que lo ayude?

T� dukun.

Quieres que lleve medicina
a tu aldea, �Eh?

�A qu� distancia est�?

Est� bien.

Pero recuerda que yo
no me descuido.

Comer� lo que t� comas.

�Drager!

�Drager!

Traed las bater�as.

�ste es el mensaje de Bevers
tal como lo hemos recibido.

"Sin se�ales de Drager.

Campamento abandonado,
aparentemente desde hace alg�n tiempo.

B�squeda sin resultado.

Me quedar� hasta el amanecer

y dejar� arreglada la emisora
por si Drager regresa.

Por favor, confirmen. Bevers."

Lo he confirmado.

Esto es todo lo que se puede hacer, Els.

�Dejadme solo!

�Dejadme dormir!

�Dejadme dormir!

�Lo ven? No contesta.
S�lo env�a.

Siempre lo mismo: "Anton Drager,

Anton Drager, Drager, Drager,
Drager, Anton Drager."

S�lo repite lo mismo. Nada m�s.

Gracias a Dios.

Al menos est� vivo.

Eso es todo lo que necesitamos saber.

Tenemos que organizarnos.
Tengo que llegar all�.

Mantenga el contacto cuanto pueda.

Tengo que llamar a Els

�Te matar�!

�Te matar�!

�Te matar�! �Te matar�!

�No! �No!

�No!

Soy yo.

�Dios,

ay�dame!

Els

Els

�Drager!

�Anton? �No me conoces?

Soy yo, Brits.

Anton.

Escucha, ni�a,
tienes que descansar.

No.

No, no mejora,

y tengo miedo.

Tengo miedo...

- �Alg�n cambio?
- No.

Els

- Els.
- Estoy aqu�, Anton.

�Els! �No lo dejes ir!

- �Els!
- Estoy aqu�, Anton.

- �Els! �Els!
- �Anton!

- �Els! �Els!
- �Anton! �Anton!

Anton, por favor, estoy aqu�.
�Estoy aqu�! �Por favor!

Els

Els

Els

Oh, gracias a Dios.

Els

Oh, gracias a Dios.

A Dios nunca le vio nadie, si nosotros
nos amamos mutuamente...

Dios permanece en nosotros y su
amor es en nosotros perfecto.
1 Juan 4:12.