All language subtitles for School for Girls (1973)

Operadora, una llamada por
cobro revertido, por favor.

Para Elizabeth Sayers,
de Los �ngeles, K058937.

Gracias.

Martha Sayers,
por favor, dese prisa.

�Ella tiene que estar,
me dijo que estar�a!

�Tiene que estar!

�Elizabeth!

�Elizabeth!

�Elizabeth!

Ella no est� en casa.

Me dijo que iba a estar.

- �Eres su hermana?
- S�.

Fue a la tienda.

Me pidi� que le d� una llave.

No.

�Por favor, no!

�John!

- �Qu� pasa?
- Es su hermana, Srta. Sayers.

Se volvi� loca.
Grita y cerr� la puerta.

Ya prob� con todas las puertas y
las ventanas, est�n cerradas.

Disc�lpenme, por favor.

�Martha, soy yo, Elizabeth!

�Abrea la puerta, por favor!

�Pueden romperla?

DEPARTAMENTO DE POLIC�A
DE LOS �NGELES

No se puede discutir con el
reporte de coronel, Srta. Sayers.

Teniente, mi hermana no se suicid�,
ella no ten�a motivos para hacerlo.

Estaba m�s feliz que en a�os.

Pero nadie pudo haber
entrado a la casa.

Las puertas y ventanas estaban
cerradas desde adentro.

�Ella no se suicid�!

�Por qu� volar�a desde Massachusetts
hasta mi casa, para suicidarse?

No hay suicidio racional, Srta. Sayers.
Entiendo que se sienta mal...

�No, usted no entiende nada!

Pudo suicidarse en
un momento peor,

como cuando murieron
nuestros padres

o cuando nos enviaron a colegios
distintos, muy lejos, pero no ahora.

Pero usted admite que era
una chica melanc�lica.

- Dije que era solitaria.
- Usted casi no la vio en los �ltimos a�os.

Preg�ntele a sus
amigas de la escuela.

Lo hicimos.

�Habl� con su ex compa�era
de casa, Lucy Dembrow?

�Realmente cree que
har�a la diferencia?

S�, vivieron juntas dos a�os,
ella conoce a Martha.

Bueno, Srta. Sayers,

vimos a la Srta. Lucy Dembrow,
en Massachusetts,

y a otras compa�eras de la
academia, as� como a la directora.

Nadie nos pudo dar m�s informaci�n.

No puedo aceptar eso.

No hay suficientes
evidencias para que sigamos.

Lo siento, pero el caso est� cerrado.

No para m�.

No pude volar al funeral.
No hubo advertencias, nada.

Se lo dije a la polic�a cuando
llamaron, todo estaba bien.

Martha estaba ocupada,
trabajando, y yo tambi�n.

Si no te gusta el jerez,
puedo traerte vodka.

No, por favor, no te preocupes,
no bebo mucho.

Me vine aqu� luego de graduarme,
espero que mis plantas no se marchiten.

Lucy, �Martha ten�a
un diario o algo?

Ya sabes que ella no era as�,
ella s�lo viv�a en el presente.

Algo muy malo ten�a
que estar pas�ndole.

Nada que yo supiera.
�Segura que no quieres vodka?

No, gracias. �Ella estaba
alterada, ansiosa o algo?

Tal vez ansiosa por graduarse y
porque ustedes iban a vivir juntas.

- �Nada m�s?
- �C�mo que?

Alguien o algo de
la escuela, tal vez.

- Tiene que haber algo all�.
- No.

Tuvo que haber pasado algo en la
academia, si fuera otra cosa, lo sabr�a.

Te digo que no.

- Ir� all�.
- No encontrar�s nada.

- �Nada!
- Debo intentarlo.

No le dir�s a nadie que me viste
o que hablamos, �lo prometes?

�Lo entiendes?
�A nadie!

Lo siento, Martha est�
muerta y con todo...

- Por favor, perd�name.
- S�, por supuesto.

ACADEMIA SALEM
PARA MUJERES

Hola, soy Roberta Rockhart, somos
del comit� de bienvenida de la clase.

La "dragona" nos hizo memorizar un discurso
de bienvenida que te har�a vomitar.

Soy Elizabeth Morgan.

Lo sabemos, te est�bamos esperando.
Ella es Debbie Jones y Jody Keller.

- Hola.
- Hola.

- Jody, �por qu� no llevas las maletas?
- Bueno.

La dragona quer�a que
te mostr�ramos el lugar.

As� ves nuestras
c�lidas instalaciones

y te sientes como una de nosotras,
a 15 minutos de llegar.

- �Qu� tal lo hacemos?
- Ya me siento como en casa.

- Bien, la dragona dijo que...
- �Ella no tiene otro nombre?

Directora. Es mala pintora, una peor
escultora y una p�sima m�sica.

Es una directora perfecta para
una academia de bellas artes.

Los que no pueden hacer,
son los que pueden ense�ar.

Pero este lugar tiene una
reputaci�n maravillosa.

Varios profesores
son s�per, de verdad.

A Debbie le gusta el titular
de la c�tedra de bellas artes.

Como todas, es un pasatiempo
de esta escuela.

Si te gustan esa clase de cosas.

Puligny-Montrachet, a�o 69.

No habla franc�s, s�lo
lee muy bien las etiquetas.

Por nuestra nueva amiga.

Dale un trago largo, te
har� falta para la dragona.

Salud.

En la Academia Salem, creemos
que las chicas de buena clase

son m�s f�ciles de educar para que
se vuelvan cultas y refinadas.

Tenemos nuestras tradiciones.

Pero, supongo que la mayor�a
de las tradiciones se rompen.

No todas.

Qu� bien, me alegra mucho
escucharte decir eso.

Me da la impresi�n de que muchos
j�venes, especialmente los artistas,

tienden a darle poco valor
a las t�cnicas tradicionales.

Las formas cl�sicas.

Picasso hac�a realismo,
antes de ser impresionista.

Adorable referencia, mi querida.

Esta academia tiene
su propia tradici�n,

con distintos nombres y ha estado
aqu� mismo, por m�s de 300 a�os.

Elizabeth, estar�s muy cansada
despu�s de un viaje tan largo

y como te anotaste luego del inicio de
clases, ser�a mejor que empieces hoy.

- Gracias por aceptarme.
- S�lo porque calificas.

Quiero que tengas una de �stas.

Al estar lejos de la central
de energ�a el�ctrica,

solemos tener fallas el�ctricas
err�ticas y exasperantes.

No es para tener miedo.

Conserva eso en tu dormitorio,
los apagones suelen durar poco.

Esta es tu curr�cula y
tu lista de clases de hoy.

Profesor Clampett, arte
gr�fico y bellas artes;

profesor Delacroix,
psicolog�a conductual.

S�, creo que ambas clases te
resultar�n muy interesantes.

Buena suerte, Elizabeth.

Espero que la Academia Salem te
resulte tan gratificante como a m�,

cuando fui estudiante aqu�.

Gracias.

Habla la Sra. Williams.

S�.

S�.

S�, acaba de llegar una
chica nueva. Ella...

Entonces, si la ilusi�n y
la realidad son diferentes,

entonces tambi�n son lo mismo.

Lo que creemos ver, es tan real
como lo que de verdad vemos.

Por ejemplo, la ilusi�n �ptica.

�Cu�ntos ven a los cuadros
saliendo hacia fuera del lienzo?

Levanten las manos.

Bien. �Cu�ntos ven lo opuesto?
A las cajas ingresando al lienzo.

Ahora, voy a aplaudir, ustedes van
a parpadear y mirar�n el dibujo.

Las que vean lo opuesto a lo que
acaban de ver, levanten la mano.

�Listas? Parpadeen.
Ahora, miren al lienzo.

�Manos?

S�.

Bien.

Bien, todos, excepto la nueva
alumna, que estaba concentrada.

Lo siento, creo que no lo estaba.

Pienso que s�, por eso, qued� en tu
mente la primera imagen que viste.

Tienen que dejar que
la mente se libere.

- Yo parpadee.
- Pero no liberaste tu mente.

El artista debe liberarse para ver
las cosas de distintas maneras.

Atreverse a ver las cosas
como nadie las ha visto antes.

Ahora veamos algunas de
las viejas obras maestras.

Tenemos el paisaje de Roberta,
el cual es bastante obvio,

pero, estoy seguro de que ella
ver� m�s, mientras se desarrolla.

Y la visi�n l�gubre de Debbie.

Espero que ilumine un poco las
cosas cuando vuelva a trabajar.

O cuando encuentre
un novio nuevo.

Recuerden: todo es
ilusi�n y realidad.

Excepto por la nota que
sacar�n al finalizar el curso.

Hasta ese entonces, no
rechacen nada y acepten todo.

Lib�rense.

Nos vemos esta noche.

Oye, vamos.

�Me disculpas un minuto?

Debbie, a m� me gust� tu pintura.

- Eres la �nica a la que le gust�.
- La chica es muy bonita.

- �Es una alumna de aqu�?
- Lo fue.

Martha Sayers, ella ha muerto.

- �Eran muy unidas?
- La verdad que no.

S�lo pens� que ella...

- �Qu�?
- Encajaba en esa habitaci�n.

- �Lista para el round 2?
- S�, �qu� clase sigue?

�Ratas!

El ciclo de alivio de los
roedores se volver� m�s intenso.

Trabajar�n m�s duro y
pelear�n para obtener comida.

A veces, estar� donde la
esperan y, otras veces, no.

Les hemos ense�ado
que la comida

est� siempre detr�s
de la puerta roja.

Y, para cuando hayan aprendido
bien eso, sacaremos la comida

y la colocaremos detr�s
de la puerta blanca.

Y, cuando aprendan eso,
la volveremos a cambiar.

Y otra vez y otra vez.

�Con qu� prop�sito?
�Roberta?

Para frustrarlas, enloquecerlas.

�Por qu� querr�a hacer eso?

Debbie.

No lo s�.

Claro, bien podr�a preguntarles
a los roedores, en lugar de a ti.

Elizabeth, �cu�l es el
fin de este experimento?

- Que se vuelvan pasivos.
- �Por qu� querr�amos eso?

- Para que no sigan luchando.
- Exactamente.

La mente puede ser reducida a cualquier
nivel, mediante manipulaci�n

y quedar en ese nivel, para que
crea lo que nosotros queramos.

Para que act�e de acuerdo
a nuestra voluntad.

Pueden retirarse.

"Entonces, cuando se le
pisa la cola, chilla".

"Cuando se le pisa la
cabeza, no chilla".

"�Alguien quiere
explicarme el prop�sito?"

"Por otra parte, no olviden cerrar la
puerta blanca cuando... cuando..."

- Tiene mucha temperatura.
- El doctor estar� por llegar.

Debimos decirle a la directora
que notifique a su familia.

- No podemos.
- �Por qu� no?

No tiene padres, s�lo tiene un
tutor legal y est� en Europa.

- Hola.
- Debbie, el doctor llegar� pronto.

�Para qu�?

- No necesito un doctor.
- �Esto te pas� antes?

�Qu� cosa?

�No recuerdas haber gritado,
al salir de la clase de psicolog�a?

Como si tuvieras un dolor terrible.

No siento ning�n dolor.
�Qu� hora es?

Las seis y media.

Ir� a lavarme la cara, no quiero llegar
tarde a la fiesta del profesor Clampett

Ir� a buscar m�s.

No puede negarlo as�,
nosotras lo vimos.

No niego, s�lo no doy por verdad
a algo, con tan poca evidencia.

No pedimos que juzgue al profesor
Delacroix, s�lo que le hable de su clase.

De por qu� es tan duro con Debbie
y, entonces, saque sus conclusiones.

- �Y si no saco ninguna conclusi�n?
- Daremos el tema por terminado.

- A menos que...
- �Qu�?

A menos que pase algo m�s.

Esperemos a que pase
otra cosa, si es que pasa.

�Y Jody?
Prometi� venir.

Sigue trabajando para la dragona.

No hace falta que mires el reloj, querida,
te avisar� cuando termine tu horario.

S�, se�ora.

- �C�mo est� Debbie?
- Ahora est� bien.

Jody, �has notado conductas inusuales
en tus maestros o compa�eras?

Adem�s de la crisis de Debbie.

No, se�ora.

Si es el doctor...

Si es el doctor, dile que
a�n quiero que venga.

Academia Salem.

S�, se�or.

S�.

S�, se�or.

Es la polic�a de Boston.

Lucy Dembrow...

...se suicid�.

Ya son dos de nosotras.

�Debbie?
�Est�s despierta?

�Estabas dormida?

No, no pod�a dormir;
espero que no te moleste.

No, no me molesta.

No la conoc�a, pero el suicidio
de esa chica me alter�.

�Lucy?

Lucy era muy agradable.

En la fiesta dijiste:
"Ya son dos de nosotras".

Martha Sayers, ella tambi�n
se suicid�.

�No es la chica de tu cuadro?

�Qu� crees que las
motiv� a hacerlo?

No lo s�.

Es como si hubieran sido ratas
en el laberinto de Delacroix.

Tal vez todas lo seamos.

Ojal� volviera la luz.

Es verdad lo que dije de tu
cuadro, en serio me gusta.

Pero esa chica, Martha,
parec�a estar muerta de miedo.

Pinto lo que siento.

�De qu� tiene tanto miedo?

No s�.

�Habr�a algo en esa habitaci�n?

�D�nde est� esa habitaci�n?
Es tan extra�a, fr�a y oscura.

Parece un calabozo.

Es como si fuera un recuerdo.

Como una habitaci�n que
vi hace mucho tiempo.

�Sabes en d�nde?

Aqu�, estoy casi segura... estoy
segura de que fue en este edificio.

Bueno, mejor voy a dormir.
Te ver� ma�ana.

Buenas noches.

Buenas noches.

�Debbie, soy Elizabeth!

�Debbie, soy Elizabeth!
�Por favor!

�Qu� pasa?

Encontr� la habitaci�n
de tu cuadro.

�No, no!
�Yo invent� esa habitaci�n!

- �Pero es id�ntica!
- �Nunca vi una habitaci�n as�!

- �De qu� tienes tanto miedo?
- �No tengo miedo!

- �Dime, por favor!
- �Nada, nada!

- �No tuve nada que ver!
- �Con qu�?

�Nada, vete de mi habitaci�n!

�Qu� pasa?

Le dije que vi la habitaci�n de
su cuadro, en el s�tano de aqu�.

- �Y?
- Est� aterrada por algo del cuadro.

O algo que ella cree
que hay en el cuadro.

Ella es muy emocional,
ya lo viste.

Y aqu� hay una leyenda tenebrosa de
unas personas asesinadas en un s�tano.

�C�mo se supone que pas�?

En los Juicios de Salem, ocho
j�venes fueron acusadas de brujer�a

y las colgaron en los s�tanos.

S�, pero todas estas casas tienen
s�tanos, pudo haber sido en cualquiera.

- Me voy a la cama.
- Buena idea para todas.

Roberta, hab�a alguien en
esa habitaci�n, yo lo vi.

Por el amor de Dios,
no le digas a Debbie.

Algunos roedores se quiebran
ante la presi�n, tarde o temprano;

pero, sin excepci�n, todos padecen
varios tipos de desorientaci�n.

Actos salvajes y aleatorios, que los humanos
considerar�an comportamiento psic�tico.

Pero los sujetos se encuentran
bajo un terror abyecto.

Examinemos a qu� le temen.

Roberta.

Yo los veo m�s enojados
que asustados.

Es el terror lo que motiva el enojo.

Tambi�n es as� con los seres humanos.

Tenemos mayor predisposici�n a
actuar fuertemente ante el terror,

que ante cualquier otra emoci�n.

A reaccionar violentamente,
incluso a matar a nuestro terror.

Pero, que este experimento
no las enga�e.

Los humanos, al igual que los roedores,
reaccionan al terror huyendo y chillando.

A veces, el terror quiebra
todas las fibras de la resistencia

y, as�, la pasividad se apodera.

Y la reacci�n de pasividad es muy
peligrosa en este estado de terror.

Elizabeth, �qu� pasas en limpio de
este experimento hasta ahora?

No estoy segura,

�quiere que reconozcamos el elemento de
terror o la motivaci�n hacia la violencia?

- Jody.
- Estoy m�s perdida que los roedores.

Me pregunto si Debbie se toma este
experimento tan a la ligera, como ustedes.

Continuaremos ma�ana.

- Pero qu� raro que es.
- Y cada d�a est� m�s raro.

Alguien tendr�a que hablar
de �l con la dragona.

- Las veo luego.
- S�.

Me pregunto qu� quiso
decir con lo de Debbie.

Ni idea.

Roberta, creo que fue el profesor
Delacroix a quien vi anoche en el s�tano.

�Qu� te hace pensar eso?

El s�tano, la bodega, esa habitaci�n...
era como el laberinto de sus ratas.

Tal vez podamos ir esta noche,
cuando todas se hayan ido a dormir.

- �Y si estoy equivocada?
- Eso no es lo que me asusta.

�Y si tienes raz�n?

- �Roberta?
- S�.

�Est�s lista?

�Hab�as estado aqu� antes?

Una vez, vinimos a buscar
utiler�a para una obra.

Est� aqu� atr�s.

Nunca vi una puerta as� antes.

As� las hac�an
hace cientos de a�os.

Vamos.

�Qu� significa esto a estas
horas? Conocen las reglas.

Debbie est� muerta.

�Qu�?

Encontramos su cuerpo
en el s�tano.

- �Pero c�mo?
- No sabemos.

Pareciera que se suicid�.

Dios santo.

Tengo que llamar al Sheriff.

Hola, habla la Sra. Williams, la
directora de la Academia Salem.

�Lo necesitamos de inmediato,
por favor, dense prisa!

S�, gracias.

Localizar�n al Sheriff lo antes posible.

�Qu� hacemos con Debbie?

Le pedir� al Dr. Clampett que cierre
el s�tano y esperaremos al Sheriff.

Prom�tanme que no dir�n nada a las
dem�s, hasta que llegue el Sheriff.

No quiero p�nico en
la mitad de la noche.

S�, se�ora.

Pobre Debbie.

�Y Lucy Dembrow y
esa chica Sayers?

Vamos, Roberta, no creer�s
que todas se suicidaron.

Ser�a una coincidencia tremenda.

Ya lo creo, �tres chicas
en la misma escuela?

No, fueron asesinadas.

O, al menos, fueron incitadas
a hacer lo que hicieron.

�T� dices como las
ratas del laberinto?

�Te apuesto mi vida!
�Qu� sabes de Delacroix?

No mucho, pero su legajo
personal est� en ese gabinete.

La dragona tiene uno
de todas las personas.

Vamos a ver.

Espera un minuto.

No est�.

Bueno, ahora busquemos los de
Lucy Dembrow y Martha Sayers.

- �Para qu�?
- Es s�lo una corazonada.

- No hay legajo de Martha Sayers.
- El de Lucy Dembrow tampoco est�.

Tal vez ella los sac� luego
de que ellas murieran.

Busquemos a Debbie Jones.

No est�.

Pero la directora se acaba de
enterar de que ella muri�.

No se lo llevar�a para esconderlo
en otro sitio, eso no tiene sentido.

Seguro que ella ni siquiera
sabe que no est�n.

- Veamos en el laboratorio de Delacroix.
- �No debemos esperar al Sheriff?

Podr�a ser demasiado tarde.

Bueno, pero te digo una cosa:
ma�ana me ir� de aqu�, a primera hora.

�Qu� sucede?

Acabo de pensar en otra gran coincidencia,
algo que las tres ten�an en com�n.

- �Qu� cosa?
- No ten�an nadie que las ayude.

Sus padres hab�an muerto.

Los m�os tambi�n, pero no
por eso me suicido. �Vamos!

Dembrow, Sayers, Jo...

Ten�as raz�n.

Roberta, mira.

Todas est�n muertas.

�Fueron masacradas!

Fueron masacradas.

S� por qu� est�n aqu�
y s� qui�n las envi�.

Pero eso no me detendr�,
no me amedrentar�.

Las mat�, del modo en
que me quiere matar a m�.

- �Qui�n las mat�?
- No fue una persona, t� lo sabes.

A m� no, �yo no voy a ceder!

- �Qu� diablos pasa?
- �Gracias a Dios eres t�!

Delacroix estaba en su laboratiro
y mat� a todos sus animales.

Est� loco, cree que lo persiguen.

- �D�nde est� ahora?
- Se fue hacia el bosque.

- Intentar� detenerlo.
- �No, tiene un rev�lver!

�Espere a que llegue la polic�a!

La Sra. Williams ya me cont�
y me ocup� de Debbie.

Si lo ven con un arma, podr�an dispararle;
tal vez �l me escuche a m�.

Qu�dense aqu� y no asusten
a las dem�s. Esperen aqu�.

�Jody, ay�dame!

�Jody!

�Ay�dame!

�Ay�dame!

�Por favor!
No hablar� de esto.

�Por favor, d�jenme salir!
No le dir� a nadie.

�Por favor, d�jenme salir!
No le dir� a nadie.

- Me preocupa el Dr. Clampett.
- No te preocupes, puede cuidarse solo.

Es especial, nunca conoc�
a alguien como �l.

Ni lo har�s.

Para las que venimos a esta escuela,
m�s a�n las que no tenemos padres,

�l ha logrado satisfacer una
necesidad muy especial.

- No podemos quedarnos as�.
- Es exactamente lo que �l dijo.

Siempre lo hago.

Me parece que est�s enamorada.

Tal vez.
Es un amor muy especial.

Cuando llegu� a la Academia,
estaba muy perdida;

�l me dio confianza en m� misma.
Me hizo creer en mi propia...

- �Habilidad?
- M�s bien iba a decir "poder".

- �Para hacer qu�?
- No esa clase de poder.

Poder para vivir y nunca
volver a sentirme vulnerable.

No sentir que tu vida est� al borde y,
de estarlo, a nadie le importar�a.

- ��l te dio todo eso?
- Y m�s.

�l no puede ayudarte si das
pelea, si te resistes a �l.

�Qui�n quiere pelear? Ahora mismo,
aprovechar�a toda la ayuda que me den.

Supongo que para ti fue m�s f�cil,
no tienes padres, ni familia.

No, s�lo ten�a una hermana
y ella ya no est�.

Mi verdadero apellido es Sayers,
Martha Sayers era mi hermana.

Nunca cre� que realmente se haya
suicidado, por eso vine aqu�.

Cuando estuvo aqu�, el Dr. Clampett
quiso ayudarla y ella no lo escuch�.

Creo que estamos cerca de saber
lo que realmente le pas� a ella.

Y a Lucy... y a Debbie.

Eso espero, Elizabeth.

De verdad.

- No lo encontr�, se fue.
- �Y la polic�a?

No s� por qu� se demoran, pero �l
podr�a volver a buscarlas a ustedes.

Tal vez �l siempre supo que Elizabeth
es la hermana de Martha Sayers.

Lo siento, deb� dec�rselo antes,
pero no sab�a en qui�n confiar.

Lo entiendo.

No las quiero aqu�, ni en sus habitaciones,
es el primer sitio en el que �l buscar�a.

Vayan a mi sal�n, cierren la puerta,
bajen las persianas y que nadie entre.

- �No!
- Ir� por la l�mpara.

Ser�a mejor sacar a las
chicas de aqu� por esta noche.

�Por qu�?

- �Qu� va a hacer?
- S�lo vac�e la escuela.

No.

No le permitir� hacer m�s nada.

No s� por qu� le permit� hacer
lo que hizo, pero se termin�.

�Se termin� todo!

Por favor.

Por favor.

No me haga hacer m�s cosas.
�Por favor!

Jessica.

�S�, Dr. Clampett?

- Har�s lo que se te dice.
- S�, Dr. Clampett.

Les dir�s a ellas y al resto del personal,
que es debido al corte de luz.

Les dir�s que la compa��a
el�ctrica dijo que no volver� la luz

y que es peligroso, as�
que todos deben irse.

S�, lo que usted diga.

No demorar� mucho.

Ya casi termina.

El autob�s est� lleno, se�oritas,
prueben con el microb�s.

Profesor, �por qu� no podemos
ir con nuestros autos?

�rdenes de la dragona,

para preservar sus corazones puros y
que no tengan reuniones clandestinas.

- No le digas que la llam� dragona.
- Ser� nuestro secreto por siempre.

S�, para siempre.

Por cierto, el profesor
Jenkins dice que,

seg�n el registro,
a�n quedan ocho chicas.

Dile que las trasladar�,
junto con la directora.

�Bien?

Muy bien, vayan.

- �Qu� es eso?
- Parece que son coches.

�La polic�a!

El profesor Clampett
dijo que nos quedemos.

- No voy a esperar.
- �Elizabeth, espera!

�Elizabeth!

�Esperen!

�Esperen!

�Elizabeth!
�D�nde estuviste?

�Delacroix est� muerto,
lo encontr� en mi auto!

�D�nde est� la polic�a?
�Qu� pas� con ellos?

Vamos, llamaremos un taxi.

�Sra. Williams? �El profesor
Delacroix ha sido asesinado!

La directora no est� ahora,
me dijo que la espere.

S� que me va a castigar, pero est�
equivocada, le mintieron sobre m�.

No estuve en esa habitaci�n,
yo nunca ir�a all�.

- �Qu� le pasa?
- No lo s�.

�Ustedes le dijeron? Seguro
le dijeron que yo baj� all�.

Olv�dala, llama a la polic�a.

�Qu� hacen? No pueden usar ese tel�fono,
la Srta. Abigail no quiere que lo usen.

�Operadora...?
No hay respuesta.

- �El tel�fono estar� cortado tambi�n!
- Se fueron todas, las vi irse.

- �De qu� hablas?
- Los autobuses iban al centro.

Roberta, creo que somos
las �nicas aqu�.

Mejor v�yanse, la Srta. Abigal las
va a sancionar, si las encuentra.

- �D�nde est� auto?
- Alguien se llev� las llaves.

Podemos caminar a la carretera y
pedir un avent�n hasta la ciudad.

- No, es un camino largo y oscuro.
- Es mejor que quedarse aqu�, con ella.

S�, y con la persona que
asesin� al profesor Delacroix.

�Ojal� tuvi�ramos un
rev�lver o algo!

- �Ella ten�a una?
- Vamos a ver.

�Qu� hacen?

La Srta. Abigail las echar� de la
escuela. Volver� en cualquier...

�Creo que hay una en el s�tano!

Cuando fui a buscar utiler�a,
vi una en uno de los gabinetes

- �Est�s segura?
- S�, alguien de mantenimiento la dej�.

Creo que un rev�lver
y un par de rifles.

No pueden ir all�, por
eso estoy en problemas.

La Srta. Abigail no
deja que nadie baje.

�Qu� dices, vamos a la carretera
o buscamos el rev�lver?

Vamos por el rev�lver.

�Por favor, no vayan, ella
creer� que yo las envi�!

�Por favor, no vayan!
�Por favor!

Usted qu�dese aqu� y nosotras le
diremos que no tuvo nada que ver.

Bueno, �le dir�n que nunca
estuve en esa habitaci�n?

Le diremos lo que usted quiera,
pero qu�dese quieta.

Pero �l se enterar�.

La Srta. Abigal se lo dir�,
ella siempre le cuenta todo.

- �D�nde est�?
- En la pared.

Hay una llave, pegada con
cinta adhesiva aqu�.

La tengo.

Los rifles no est�n.

- �El rev�lver?
- No s�, me fijar�.

- Est� vac�o.
- Tenlo.

- �Sabes usar eso?
- S�, crec� en una granja.

Mi padre siempre ten�a
de estas a mano.

- Vamos, salgamos de aqu�.
- Podr�a ser una de las chicas.

- Tenemos que ver.
- Bueno.

Vamos una al lado de la otra,
por si debo usar esta cosa.

Hay una luz.

Te esper�bamos, Elizabeth.

Mira a tu alrededor.

Ocho de mis chicas
murieron aqu�. Ocho.

Eran no deseadas, como t�,
como todas ellas.

Esper� demasiado y ahora encontr�
ocho para que tomen sus lugares.

Como ellas, abandonadas una vez m�s.

No es coincidencia que no
tengamos familias, Elizabeth.

�l quer�a que as� fuera,
tiene que ser as�.

�Jody, Roberta, qui�n creen que es �l?

Lo sabemos.

Malleus Maleficarum,
el Martillo de las Brujas.

Algunos lo llaman Satan�s.

Le doy la bienvenida a
lo que el hombre rechaza.

Invito a aquello que
el hombre desprecia.

Perdono lo que el
hombre no perdona.

Ustedes no creer�n
que �l es Satan�s.

�Ninguna creer� realmente eso!

Creer�n lo que deben.

Esta noche, sacrificar�n sus
almas mortales, voluntariamente.

Aqu�, donde comenz�.

Y volver�n conmigo.

�Est� loco! Escuchen, no s� qu�
influencia tiene �l en ustedes,

pero �l mat� a
Delacroix y a Debbie.

Lo sabemos, Elizabeth.

Ven conmigo voluntariamente.

Tu hermana no lo hizo,
ni tampoco Lucy Dembrow.

�No lo escuchen, somos
ocho de nosotras contra uno!

�Tienen que irse, antes de que sea
demasiado tarde, por el amor de Dios!

�Por el amor de �l o el m�o?

Ellas ya han elegido.

Ven.

�No!

Nos volveremos a ver
cuando tenga ayuda.

Sra. Williams, hay un incendio...

Olvid� regar estas plantas, no
le dir�s a la Srta. Abigail, �no?

No le dir� nada a nadie,
ahora vamos, debemos irnos.

- Deme eso.
- �Qu� haces?

- Vamos, salgamos.
- �No, quiero ver!

Su gente nos inform� del problema con
la energ�a, parece que llegamos tarde.

�Todas salieron?

No, no todas.

�Y la directora? Tendr� que
notificar a sus familias.

Ellas no ten�an familias.

�Y el Dr. Clampett?

Donde pertenece.

:::Fran:::