All language subtitles for Os verdes anos-1963

Esta copia corresponde a la restauraci�n
digital de "Os verdes anos" hecha a partir
de un nuevo m�ster de resoluci�n 2K

producido todav�a en vida del realizador
y por iniciativa de este.

El material de imagen transferido fue
el negativo de imagen de 35mm,
en el cual fueron insertados algunos

planos que fueron cortados por motivo
de censura, en este caso obtenidos
de una copia de 16mm sacada originalmente

por iniciativa del realizador para
divulgaci�n en Jap�n.

La versi�n final con la adici�n
de estos insertos obedece al montaje
de la versi�n que hab�a sido restaurada

anal�gicamente en el laboratorio de la
Cinemateca Portuguesa en 2006,
aprobada por el realizador.

El sonido fue restaurado digitalmente
tomando como referencia la mezcla final
del negativo de sonido �ptico pero

recuperando tambi�n bandas magn�ticas
parciales de sonido ambiente y m�sica.

Continuando la colaboraci�n originalmente
ofrecida a Paulo Rocha, las varias etapas
de restauraci�n tuvieron supervisi�n

del realizador Pedro Costa, a quien la
Cinemateca Portuguesa - Museu do Cinema
manifiesta su profundo agradecimiento.

LOS A�OS VERDES

La primera vez que vi Lisboa, pens�:

Esta tierra es como una dama que
tiene que ser seducida con tiento.

Nada de prisas.

Nada de echarle mano antes de lo debido.

Es preciso ir despacio, con ojo vivo
y no oler los pies.

Sobre todo uno tiene que recordar
que naci� en una aldea de paletos

y aprender a aguantarse.

Casi todos mis vecinos fueron
echados de la ciudad.

Vinieron con tanta prisa que se
dieron de narices con el primer muro

y quedaron desperdigados
por ah�.

En verdad, tampoco yo tengo una
direcci�n para la tarjeta de visita.

Pero es por cautela.

Tengo tiempo para pasar a mejor.

Nunca me gustaron las prisas.

Mis vecinos deben desconfiar de mi,
nunca me han visto en problemas.

Que les aproveche el no saber hacer nada

m�s que quejarse los unos de los otros.

En la ciudad a�n se dice:
"�zapatero, mira el globo!"

pero quien anda en la construcci�n civil
sabe quienes son los paletos...

y cuanto cuestan los globos.

Nada como nacer paleto para que
los de la ciudad conf�en en ti.

- Hola.
- �Va a buscar al chico?

S�. Llega en el tren de la tarde.

- Tengo que irme.
- Estar� aqu� hasta las ocho.

Si piensas en explotar al chico,
lo llevas claro.

Esta ciudad se ha comido a muchos...

Pero conmigo les sali� mal.

Encontraron caldo �cido
en lugar de pollo.

Si tienen hambre que coman lechugas.

Si el chico consigue aguantar,
ser� uno menos que lo pase mal.

No es de provecho para otros,
pero ser� un enfadado menos.

Oiga, Joaquim, dejo la bici
en el patio hasta la noche.

- Est� bien.
- �Afonso!

Si�ntate aqu�, hombre.

T�mate algo.

No puedo, tengo que ir a la estaci�n
del Roc�o a buscar a mi sobrino.

�Qu� Roc�o? Te tomas una jarra
con nosotros.

- �Cu�ndo llega el chico?
- En el tren de las 6.22.

Entonces tienes media hora,
por lo menos.

Por favor, �sabe decirme d�nde
queda esta calle?

- Oh, lo s�.
- �Lo sabe?

- Entonces, por favor...
- Venga conmigo.

Ver� como se habit�a.

Lisboa es una tierra bien bonita.

Le gustar�.

Esto es un para�so.

Ver�, ver�.

Yo era m�s joven que usted
cuando vine a Lisboa.

No sabe cuantas veces
me la jugaron.

�Una vez cada d�a!

Que lo pobres se mangoneen entre ellos...

no vale para nada.

�Usted no sabe lo que va a aprender!

Cuando vine a Lisboa no hab�a todo
este movimiento de buses y metro...

pero las calles no eran
para jugar, no se�or.

Hab�a aquellos coches de caballos,
carruajes, con dos o tres paradas.

Aquello era tremendo, empez�bamos el d�a
bebiendo champ�n...

y cuando llegaban las tantas de la tarde,
�era tremendo!

- �Es aqu� el taller del se�or Ra�l?
- Si, pero no est�.

Sali� pero vuelve en una hora.

- �Una hora?
- S�, m�s o menos.

Soy el nuevo empleado.

- El sobrino del maestro Afonso.
- Oh, s�.

- �Puedo dejar aqu� las maletas?
- S�, tranquilamente.

Voy a pescar los domingos
desde los quince a�os.

�Todos los domingos?

Casi todos. �Y si la marea
es buena, nunca falto!

A mi, si me quitas el f�tbol
me quitas el sol.

He recorrido todo Portugal
detr�s de once hombres.

Nunca me gust� el f�tbol.

Toma un verde.

- No debes estar tieso un domingo.
- Gracias.

Me voy, para conseguir asiento.

En el f�tbol, de pie, s�lo los jugadores.

�Mirad, "Julio el de las patatas"!

- Julio, tenemos una patata.
- Vamos.

- Ven.
- Ven con nosotros.

No me empujes.

Lo quieres s�lo para ti, �no?

- �Tienes la navaja?
- Est� aqu�.

- �Qu� vas a hacer?
- Espera, ahora ves.

- Una es para mi.
- Para mi, que yo le di la patata.

Id a por una espiga.

Toma.

Mira, �es la cara de tu t�a!

- �Qu� t�a?
- Tu t�a Madalena.

No se parece a mi t�a Madalena.

- �Ya te vas?
- D�mela.

- D�mela a mi.
- Es para mi.

- �Es para mi!
- �No, para mi!

- Me ha dado un susto de muerte.
- No se mojaron por dentro.

Ya se secar�n. Mi se�ora
tiene m�s urgencia de los otros.

�Su Se�ora manda hacer
las reparaciones de una tacada?

- �Le parecen mucho tres pares?
- S�.

Si viese todo el calzado
que hay en casa...

- Entonces no hay urgencia. - Ah no,
mi se�ora los necesita para el jueves.

�Qu� va a hacer el jueves?

�Piensa que yo s� de todas
las vueltas que mi se�ora da?

Ya tengo bastante con no
perder yo el norte.

�Entonces, a d�nde va ahora?

Voy para donde no deb�a
que mi recado es en el taller.

- Mira a ver no te pierdas.
- Adi�s.

�Y mis zapatos?

Ocurri� una gran desgracia.

�Se transformaron en botas!

Empezar� con ellos por la tarde.

�Y los zapatos? Los de los
tacones rotos, �est�n listos?

No se enfade, se�orita.
Ya casi est�n.

Antes de ayer, ya casi estaban...

Usted est� siempre casi.

Calma, Julio se los lleva hoy mismo.

- Dentro de poco los lleva.
- �Vengo hasta aqu�, lloviendo, para esto?

�Qu� desea?

Vine a entregar estos zapatos,
pero no s� si es aqu�.

�La se�ora tiene una colega
llamada Ilda?

Tengo la colega y tengo
la certeza.

Reconozco los zapatos.
Ten�an que haber llegado antes.

Ya estoy aqu�, otra vez.

Y estos tambi�n.

�Pero estos fueron arreglados ayer!

Pues si, lo son.
Mire el tac�n izquierdo.

Mire el bonito arreglo que hizo
que ni dur� un d�a.

�Yo no tengo la culpa de que
su patrona baile el fandango!

El fandango... en Lisboa que no
saben hacer calzado.

�Mire esto!
Comprado la semana pasada.

Venga aqu�, esto se
arregla en un instante.

Si�ntese.

Tiene aqu� un lugar.

Vea, que si va a ser caro no quiero.

�La se�orita Ilda anda as� tan necesitada?

No puede gastarlo todo en las playas.
Debe dejar algo para los de aqu�.

Ustedes son unos careros.
�Se llevan un ri��n y parte del otro!

�Creen que no s� cu�nto gasta mi se�ora?

A su se�ora s�lo le llevamos un ri��n.

El otro es para el carnicero.

- Pero para la se�orita, es gratis.
- Tampoco quiero favores.

El favor nos lo hace usted,
sent�ndose con nosotros.

- �Ya no tiene miedo de las puertas?
- �Miedo de las puertas?

�Listo!

Se peg� un susto uno de estos d�as.

- Adi�s, se�or Raul. Gracias.
- A sus �rdenes.

Siempre a sus �rdenes.

Ahora tengo que ir a la calle...

- Ciudad de Manchester.
- Est� por all� abajo.

Quien no sabe es como quien no ve.

Ma�ana es mi d�a libre. Me paso
la semana esperando el domingo.

- �Siempre tiene los domingos libres?
- Casi siempre.

A mis patrones les gusta pasear.

Yo tengo el d�a libre,
lo que no tengo es dinero.

Mi hermana ha estado enferma. Tengo que
mandar casi todo el dinero a mi madre.

El domingo pasado estuve por ah�
sin saber qu� hacer.

Un hombre sin dinero es como
un coche sin gasolina.

Ve al aeropuerto. Es un paseo
bonito y no cuesta dinero.

- �Ya ha ido?
- No fui, no.

Merece la pena.

Bueno, adi�s. Me tengo que ir.

Venga, vamos. �Venga!

�Estese quieto, jefe!

- Est�n espantando la caza.
- Hay una pareja achuch�ndose.

�Qu� quer�an?

Las gente no deber�a meterse
en la vida de los otros.

Yo tambi�n pienso as�.

Quiz�s ahora nos sigan a nosotros.

- Vamos a ver.
- Vamos a ver.

- Vamos a ver.
- Vamos.

Entonces, �tu padre...?

Mi padre...

�No quedamos en ir hasta el aeropuerto?

Espera ah�.

- Vamos, te ayudo.
- �No quiero!

Dame la mano.

- Dame la mano.
- Te ayudo.

No pasa nada raro con mi padre.
Si quieres te lo digo.

�No te gusta hablar de
esas cosas, verdad?

Yo tambi�n soy as�.

Contigo no me importa hablar.

Cuando supe que mi sobrino
sal�a con una criada,

fue como si hubiese salido el sol.

Son cosas que ocurren todos
los d�as, �verdad?

A las criadas y a los sobrinos.

Cuando uno crece y
se hace hombre,

el romance es otro.

Es el romance de
levantar nuestra vida.

Y ponerla bien alto...
para que no la pisen.

�Eh, Raul!

�Trabajando un domingo?

Hab�a un trabajo urgente pero ya est� casi.

Espabila, chaval.

El trabajo de los otros
es siempre urgente.

�As� que mi amigo tiene aqu�
un aprendiz muy distra�do?

Supongo que vino a trabajar pensando
que era d�a laborable.

- Era un trabajo urgente, �sabe?
- As� es.

�Lo que es urgente, es urgente!

�Falta mucho?

- Ya casi est�.
- Trae aqu�. Vete, yo lo acabar�.

- �Es tu chica?
- S�, lo es.

Oye.

Voy al f�tbol esta tarde
pero tengo la ma�ana libre.

- Si quieres comer conmigo, est�s invitado.
- Podr�a estar bien.

Podr�a.

�Qu� buenas ruedas!

Qu� buenas ruedas para
tomar unas curvas.

Mire, t�o, esta es Ilda.

Buen d�a.

Estaba proponiendo a Julio ir
a comer por ah�.

- Pero �l tiene miedo de que no quiera.
- �Yo? �Ya me gustar�a!

Desde que vine a Lisboa,
nunca atraves� el Tajo.

�Vamos! Por el camino les puedo
mostrar algunas cosas.

Vamos, s�lo voy a por mi abrigo.

Lo primero que os quiero mostrar
est� a veinte pasos.

Uno, dos, tres...

- �Qu� es esto?
- Esto es algo para apreciar.

Miren bien, que yo ya lo explico.

Entonces, �qu� tal?

�Qu� desean tomar?

Esto que est�is viendo fue hecho
por este viejo hombre.

Calculen cuanto cost�
una pared as�.

Esto fue caro, ciertamente.

Hola, amigo Julio.

�Puedo subir y mostrarle la vista a
mi sobrino? Tambi�n es Julio.

- S�, puede.
- Vamos.

Desde all� partieron hacia
el descubrimiento.

- �Mira all�!
- Es el castillo de S�o Jorge.

�Mira!

�Si que esto es alto!

Las personas vistas desde aqu�
parecen hormigas.

Esta es la ciudad de Lisboa.

Y no es s�lo lo que se ve desde aqu�.

En nuestro barrio hay
edificios m�s altos.

El nuestro es para verlo.

Vivo en un barrio en el que las casas
se caer�an con una coz de burro.

Pero a veces, de noche en la ventana,
antes de acostarme...

Miro los edificios...

de su barrio,

y pienso que toda esa gente paga
por estar ah�.

Les sale m�s caro el dormir que el comer.

Hay gente salta desde aqu�.

He estado en todas partes.

Espa�a, Francia, Alemania.

Conozco a un tipo de Almada que
ha estado en Alemania, lavando coches.

- Ganaba m�s que un ingeniero.
- As� es.

�Nunca ha estado en el extranjero?

�Pero se consigue trabajo
tan f�cilmente?

Bueno, no es exactamente as�.

Depende de las personas.
�Es para usted?

No.

Yo ya tengo la vida hecha.

Aqu�l sobrino mio est� en edad
de pensar en esas cosas.

En esa edad, s�.
Pero en la nuestra...

Mire, cuando uno se habit�a
al bacalao cocido...

no hay nada que ocupe su lugar.

Bien, d�jeme ver si el resto se ha muerto.

Est�n all�.

No son esos.
�Hey Julio!

�Llam�?

- �Creen que soy tonto?
- �Y el almuerzo?

El almuerzo, all�. Esto es s�lo para
las vistas o para enga�ar a turistas.

�Entonces?, �estamos mejor aqu� o no?

- Estamos casi unos encima de los otros.
- �Y eso es malo?

Cuando cruzamos al otro lado
del r�o...

hasta el agua parec�a m�s lisa.

Hasta me dio pena cuando
acabamos de atravesar el r�o.

Pues a mi no me da pena
ir a acostarme.

- �Te importa esperar por los patrones?
- Adelante.

Buenas noches.

Ilda, pon estas flores en agua.

No te olvides.

Tengo un horrible dolor de cabeza.

Te dije que no estuvieses
todo aquel tiempo al sol.

- �Te preparo algo de comer?
- Para nada.

Voy a tomar un Saridon
y meterme en la cama.

�Ilda! Tr�eme los comprimidos que
est�n en el caj�n, por favor.

- Un Saridon con el est�mago
vac�o, es malo. - No...

�En ayunas? Acabamos
de cenar hace una hora.

- �Est�s aqu�?
- Vine a buscar los comprimidos.

Tr�eme un vaso de agua, por
favor, voy a desnudarme.

Es una delicia.

Tal vez algo fuerte.

��ptimo!

- Gracias.
- �La se�ora cogi� el sol en la cabeza?

Cog�, s�.

- Pero t� tambi�n est�s quemada.
- Quiz�s fue de atravesar el rio.

- �Fuiste de paseo al r�o?
- S�, se�ora.

- Con el chico de la zapater�a.
- S�, y con su t�o.

Que es el due�o de la casa de Julio.
�Recuerda que le dije...

que Julio viv�a all� abajo, en una casa
al otro lado de la carretera?

No, pero seguro que lo dijiste.

Pues su t�o, Afonso se llama,

nos llev� por ah�,
para mostrarnos la ciudad.

Y nos llev� a almorzar
al otro lado del r�o, a...

�C�mo se llama?
No recuerdo el nombre...

Se necesita tener cuidado
con los chicos de Lisboa.

Este no es de Lisboa, se�ora.

Hasta hace un mes nunca hab�a venido,
salvo escapadas.

Pero aprender� deprisa con los otros.

- �Qu� edad tiene?
- Diecinueve, se�ora.

Es muy joven, muchacha,
m�s joven que t�.

Pero al menos est� en una
edad en la que se es sincero.

- �Te gusta?
- Me gusta, s�, se�ora.

En cualquier caso, es
preciso tener cuidado.

Y no tengas prisa por gustar mucho.

Tienes tiempo...
�y m�s que tiempo!

Entra.

Si�ntete en casa.

Los se�ores pasan los domingos
fuera y vuelven a medianoche.

�Si�ntate ah�, hombre!

Pareces un mu�eco de paja.

�V�monos!

No.

Hoy nos quedamos aqu�.
Tengo una sorpresa.

Pero primero vamos a tomar algo,
�quieres?

�Qu� prefieres?,
�T� o caf�?

Puedo conseguir algo que ya ver�s.

Una cosa especial.

�Te gusta?

�Es amargo!
�Qu� es?

Una bebida que el se�or ingeniero trae
de Inglaterra cuando va.

- Es un t� de China o as�.
- Entonces �es de China o Inglaterra?

De Inglaterra. �l va mucho de avi�n.

- En unas horas va y viene.
- A�n no he ido al aeropuerto.

- �Qu� hace tu patr�n?
- �Qu� quieres decir?

�Es ingeniero!
Oh espera, tengo algo que contarte.

- �Descubr� que est� liado con su prima!
- �Qu� prima?

La que vive aqu�, la estudiante.

Ya te lo dije.

Escucha, sal�a yo el otro d�a
del cuarto de la se�ora,

pobrecita, le dol�a la cabeza,

y voy por el pasillo...

�y lo veo agarrado a la prima!

�Te vieron?

�Qu� pareja!

No me vieron, me fui.

�Qu� pareja!

Y ella...
�Nunca me gust� esa criatura!

"Ilda..."

- �Una zorra, es lo que es!
- �Pero qu� estaban haciendo?

Cucharas de palo...

Pero la se�ora me gust� en cuanto la vi.

Pero la otra, Luisinha...
�qu� mala suerte!

�A tu se�ora no le importa
que su marido se l�e con las primas?

�Acabaste?

Entonces ven aqu� que quiero
mostrarte una cosa.

Te dije que ten�a una
sorpresa para ti.

- Estos son los aposentos de la se�ora.
- �Es el qu�?

Cuartos, armarios, esas cosas...

Mira.

�Pero esto es una zapater�a!

�No te dije que hab�a calzado
como para un regimiento de se�oras?

Vamos.

Anda.

- Aqu� duerme la se�ora.
- �Y el marido?

Tambi�n.

Pero �l no se merece una se�ora as�.

Ni as�, ni as�.
No merece ninguna se�ora.

Lo que necesitaba era una mujer
que lo pusiese a pan y agua.

Igual si ella fuese como muchas otras...

�l no andar�a por ah�
ni har�a lo que hace.

Si�ntate.
Si�ntate ah�.

Espera y ya ver�s.

Tengo las medidas de la se�ora.
Zapatos y todo.

Estos zapatos son para usar
con vestidos as�...

as�... medio desnudos.

Este lo llev� a una boda.

- �A su boda?
- �Qu� disparate!

Sabes, las se�oras usan ropa diferente
seg�n las horas.

Quiero decir, si van a una fiesta
o algo as�.

Por eso tienen tantos
vestidos y zapatos.

No es por acumular,
es que tiene que ser as�.

Ahora cierra los ojos.

No los abras hasta que yo te diga.

�Ya puedes!

�Sandalias de diamante y todo!

Era el amor

Llegaba y part�a

Estar los dos

Era un calor

Que enfriaba

Sin antes ni despu�s

Era un secreto

Sin nadie que lo oyese

Era un enga�o

Y era un miedo

La muerte ri�ndose

De nuestros verdes a�os

Fue el tiempo que sec�

La flor que todav�a no era

Cuando el oto�o lleg�

En lugar de la primavera

Era el amor

T� quisiste que aprendiese a bailar.

As� que si te piso es culpa tuya.

�Es culpa m�a?
Esa es buena.

Eres muy hermosa.

Dicen que me parezco a mi madre.
Pero ella era mucho m�s bonita.

Si vieses su retrato en mi cuarto,
no dir�as que soy bonita.

Si ella fuese muy bonita,
dir�a que se parece a ti.

Sin antes ni despu�s

Era un secreto

Sin nadie que lo oyese

Era un enga�o

Y era un miedo

La muerte ri�ndose

De nuestros verdes a�os

En nuestra sangre corr�a

Un viento de ser nosotros

Pero si la noche fuese d�a

No consigo seguir los pasos.
Ya te pis� varias veces.

- Vamos a descansar.
- No, tenemos que aprender.

Mira para sus pies.

S� no se le coge el punto es dif�cil.
Hay que atinarle.

Tal vez �l lo entienda.

�Le duele la cabeza?

Desde que me despert�,
pero no s� por qu�.

Pens� que ser�a cosa de los dientes.

Me enjuagu� con aguardiente,
pero sigo igual.

No hab�as dicho nada.

�Para qu�?

Hablar no lo curar�.

Mi pelo no se sujeta.
Parezco una vieja.

�Qu� va!

�T� s� que est�s bonita!

- Hasta pareces mayor.
- �Parezco m�s vieja?

No, quer�a decir que tienes aire
de mujer hecha.

�Mujer hecha?

Ah� hay una farmacia.

�Por qu� no va a por un analg�sico?

Ya lo pens�, pero no
sab�a el nombre del remedio.

Le dice al farmac�utico que le duele
la cabeza y �l ya sabr� qu� darle.

Buena idea.

�Estuvo mal decir que Leonardo
era tu novio?

No, l�stima que no sea verdad.

Y hoy no s� que le pasa.
Parece agresivo conmigo.

- Eso son ideas tuyas.
- No, es verdad.

Rel�jate, hombre.

Se toma una pastilla y en
media hora ya est� bien.

Gracias.

Ir�a con usted, pero no voy
a dejar solas a las chicas.

Yo me arreglo.

Vamos.

�Qui�n lo autoriz� para bailar
con esta se�orita?

�Qui�n iba a ser?
Ella.

�Yo?

Le di permiso, pero no
para bailar as�.

- No tendr�a que bailar con ella.
- �Ah, no? �Y usted qui�n es?

- �S� bien lo que necesita usted!
- Mire amigo,

�nunca le han dado fuerte?

Mire que duele.

�Qu� pasa?

�C�mo va la vida?

Bueno, por la noche
damos una vuelta juntos, �s�?

Raul, danos dos chupitos.

�Hay material nuevo desde la �ltima vez?

No, lo de costumbre.

Bien, lo de costumbre no est� mal.

�Afonso!
�Afonso!

�Hey, chicos!

Manda cervezas para aquella mesa.

Si aparecen chicas guapas
las llevas tambi�n. Vamos.

- �Buenas!
- �Hola!

�Si no aparezco, os mor�s de sed!

�As� que descarriando a la juventud, eh?

�Encarril�ndola, amigo,
encarril�ndola!

Mira que el chaval,
para bajar un barril, vale.

�Tienes prisa?

�Calma, chico!
Aqu� hay que hacerlo todo despacito.

�Todo despacito!

�Camarero, otra ronda!

�Que sea una pinta!
Si t� la pagas...

�Hola!

�Anda el chico seco?

Hey chico, contente, este
no es tu territorio

�Otra m�s!

Quien se mezcla con ni�os...

Pero ten�a que quitarle
una fijaci�n que tiene por una criada.

�Os lo imagin�is?

Si no meto mano seguro que termina mal.

�T�o!
�Mira esto!

- Consume 20 litros a los 100.
- �No te dije que parases?

�Que le parta un rayo!

�C�mo?

�V�yase al diablo! �Haga su vida
y d�jeme en paz!

�Aunque fuese mi padre, no
le dejar�a mandarme!

�Eres tonto o te lo haces?
�Quieres llevarte un porrazo?

Tonto lo ser� usted.
�Si me toca ya sabe!

Si me vuelves a levantar la voz
llevas con la mano cerrada.

�O te crees que soy un ni�ato?

No deber�a hacer cosas as�, Sebastian.

�Qu� pasa?

Usted s�lo es un viejo tonto latino
con mal aliento.

Es el m�s desastroso viejo latino
con el aliento m�s desastroso.

Y ahora voy a estrangularle.

�Qui�n dej� escapar a este
p�jaro de la jaula?

�C�mo te sientes ahora, viejo?

M�rchate, Don Nadie.
�A cavar patatas a tu tierra!

Ah� est�s.

Tambi�n te han dejado tirado, �verdad?

Quiero agradecerle, �sabe?
Por librarme de ese alma podrida.

No entiendo una palabra,
pero estoy dispuesto a darle la raz�n.

Venga, vamos

Todo est� en la l�nea del deber.

Tiene la man�a de que manda en m�.
�Igual cree que es mi padre!

No te enfades, chico.

Como dijo el obispo a la actriz:
seamos felices y rodemos en el heno.

Que mande en sus hijos.
Si no los tiene, que los haga.

No s�, es un lugar fantasmag�rico.

Quiero decir que toda la ciudad
es como...

una pesadilla.

�Sabe lo que yo quer�a?
Irme ya.

Mi �nica forma de soportarlo
es hacerme el duro.

�Sabe lo que le digo?

En cuanto un hombre viene al mundo,
todos a chupar de �l.

Ven para aqu�, ve para all�.
Todos quieren dar �rdenes.

Echemos un vistazo.

No, est� bien.
Ni siquiera una mand�bula rota.

Me gustar�a irme, pero
en mi tierra dec�a lo mismo.

Vine a Lisboa y no mejor�.

Lisboa...

�C�mo se llama su tierra?

�Sabes una cosa, hombre?

Deber�as aprender a ahogar
a tus semejantes.

Como hice en aquel pub.

El truco m�s �til en Lisboa,
cr�eme.

Cualquier d�a me meto en un barco
y me voy.

- Me gustar�a llevar a Ilda.
- Ilda, �es el nombre de tu chica?

S�, Ilda.

Mira, aqu� hay dos.

Mira, guiris calentitos.

Hagamos un fiesta.

T� para �l...

- Y... yo para ti.
- �T� y yo?

�Qu� ha dicho?

Buenas tardes, Sr. Afonso.
�Est� Julio?

Aqu� no.

Hab�amos quedado en el camino
y no apareci�.

�No sabe decirme a d�nde ha ido?

�Crees que mi vida es saber d�nde est�n
los tarados de este barrio?

Si quieres un consejo, m�rchate.

Los locos son como las bestias.
No te acerques que te llevas una coz.

Ya le dije, a finales de mes
debe encontrar otro hotel.

Aqu� ya no hay vacantes.

Oiga, Sr. Afonso,
�usa ropa de esta?

Ya no me acordaba de esa chaqueta.

Es de una hu�sped que no
quiso pagar la posada.

- �Una hu�sped?
- S�, una se�ora hu�sped.

Estuvo en el hotel,
con cama, mesa y...

y despu�s no quer�a pagar.

Esta nuevecita, �eh?
Mejor que su antigua due�a.

Te la doy como regalo.

�Pero qui�n est� dispuesto a pagar
para dormir en un sitio as�?

Dispuestos, tal vez no.
Pero "dispuestas" hay siempre.

Pero aqu� no entra quien quiere.
S�lo quien yo quiero.

Aqu� se reserva el derecho
de admisi�n.

Oye...

T� no te quedas en casa.

Un domingo entero encerrada
porque tu chico anda enfadado.

�Por qu� no vienes conmigo
al f�tbol?

�Sabe qu� har�? Visitar a mi t�a enferma
y llevarle esta chaqueta.

Pobrecita, no hay lumbre que le
caliente los huesos.

�Julio!

�Por qu� no apareciste?

�Est�s enfadado por algo
que he hecho?

�O es tu t�o?

- �Qu� es esto?
- Calma, que me partes las u�as.

Tu t�o me lo dio, �por qu�?

�Qui�n te dio permiso
para aceptar regalos de �l?

�Qui�n te dio permiso
para meterte en mi vida?

�Trae eso!

�Ya est�, se acab� la chaqueta!

No, est� ah� abajo.

Veamos si no te has olvidado.

Dos partes de esto.

- Dos partes de esto.
- Media parte de esto.

Diez gotas de esto.

Lim�n y hielo.

Y despu�s llamas a una ambulancia
para llevar a los invitados.

Entonces, �fumando el cigarrillo
del descanso, no?

Son todos iguales.

Piensan que el trabajo se hace s�lo.

Son todos unos santos.

Mira esto, �te dije que hicieses esto as�?

Al domingo siguiente,
volvieron a encontrarse.

Nunca sabr� la raz�n
de lo que sucedi� esa noche.

Ni aunque viva mil a�os.

Para entender lo que ocurri� esa noche
tendr�a que saber qu� ocurri� esa tarde.

Se que estuvieron paseando,
no s� nada m�s.

�Cu�ndo dejas de la casa de tu t�o?

Por m�, sal�a hoy.

�Y a d�nde ir�s?

No lo s�.

Tienes que buscar un cuarto barato,
en cuanto puedes.

Si no tendr�s que aceptar lo primero
que encuentres y te saldr� caro.

�Has preguntado a tu patr�n
cuando te sube el sueldo?

S�, pero no me respondi�.

No puedes seguir haciendo trabajo de
hombre a precio de chico.

Tienes que hacerte valer. �Quieres
pasar tu vida trabajando para otros?

�Sabes lo que querr�a?

Irme al extranjero.

Oh, tambi�n yo.

Pero no te puedes ir sin nada fijo.

�Recuerdas lo que acostumbra
a decir tu t�o?

La gente no debe salir de donde est�,
sin saber a d�nde va, ni qu� har�.

�l supo hacerlo. Esper� lo necesario
y encaj�.

Mi t�o... cada d�a lo odio m�s.

- �A�n no te olvidaste la chaqueta?
- No es por eso.

Cada vez que lo miro...

pienso que si todo lo que hizo
fue para ser aquello...

m�s le val�a haberse dedicado
a la buena vida.

Tienes que recordar que tu t�o ten�a
m�s de 30 cuando vino a la ciudad.

Pero t�... tienes la vida por delante.

Puedes trabajar de oficio y
por la noche estudiar.

Si yo estuviese en tu lugar
ya te dir�a como ser�a.

Mira la cara de este.

�Dios!

A veces hasta me fastidia ser mujer.

Cuando mi madre muri�
estaba aprendiendo costura.

Entonces ella muri�...
y bueno.

Si no hubiese encontrado
esta casa para servir,

me habr�a quedado en casa de
mi madrina, trabajando gratis.

As�, al menos me pagan. Pero
no voy a pasar mi vida as�.

Prefiero pasarlo peor y
trabajar para mi.

Mi madre dec�a que yo era
m�s h�bil que ella.

�Y no sabes c�mo era de buena!

Con aquellas manos,
si hubiese venido de joven a la ciudad...

no tendr�a que enterrarse
entre ropa vieja.

Si no fuese por aquella
molestia...

La habr�a convencido
para venir aqu�.

Entre las dos consegu�a trabajo
en la modista

y yo ir�a aprendiendo y ganando...

Pero si no fue de una manera,
ser� de otra.

Me gusta coser y soy buena
y ver�s como va a ser.

No es que mi t�o me trate mal.

Quiere que me abra paso en la ciudad.

Pero sus maneras, como si fu�semos
todos tontos.

Piensa que no es tonto
quien hace de los otros tontos.

Y despu�s...
si no hago las cosas como �l quiere,

me llama palurdo.

�A d�nde vamos ahora?

A mi me da igual.

S�lo quer�a ver el hospital de cerca.

Ahora vamos donde t� quieras.

No quiero ir a ninguna parte.

Pero, al final �qu� es lo
que t� quieres?

Lo que quiero es casarme contigo.

Deprisa, sin demora. S�lo tengo
que arreglar los papeles y esas cosas.

�Casar?

�As�, con prisas?

�D�nde vivir�amos?

A�n no has hecho el servicio militar.

Ya pens� en todo.
Mira...

Buscamos una habitaci�n.

S�lo tendr�amos que pagar eso.

T� comer�as en casa de
tus patrones.

Y yo me alegrar�a.

Despu�s, cuando fuese al ej�rcito,

t� podr�as quedarte a dormir
en casa de tus patrones,

o en la habitaci�n.

Siempre tendr�amos dinero para eso.

- No puede ser.
- Pero, �por qu�?

No, no.

Pero, �por qu� no?

No, no puede ser.

�No?

�Aida!

Esa gente son todos de mi tierra.

Vinieron a acompa�ar a un primo m�o,
que se fue hoy a la pesca del bacalao.

Si no te importa, me gustar�a...

ir con ellos, para
saber noticias.

Vete, vete.

Buenas noches.

Deseo hablar con Ilda.

�Ilda? Ilda est� ocupada. No
tiene tiempo para conversar.

�Eres Julio, no es as�?

No dejo que las chicas enamoren
estando de servicio.

El noviazgo acab�, se�ora.

S�lo vine para devolver a Ilda
un retrato antes de irme.

Conf�e en mi,
no llevar� m�s de un minuto.

Ay, mi se�ora.

FIN