All language subtitles for El Barón Rojo (1971)(Dual+Subt.)

F�cil. �Lo veis? Un juego de ni�os.

Como aterrizar un viejo albatros.

- Vaya, Rittmeister...
- Von Richthofen.

- Voss. Werner Voss.
- Voss.

�se es el teniente Ernest Udet.

- Teniente.
- Bienvenido.

Y Hermann Goering.

Es un honor.

- �Juega usted, Rittmeister?
- Yo nunca juego, teniente.

�Va a darme
oportunidad de jugar, Richthofen?

El juego consiste en tomar, teniente,
no en dar.

Juega usted muy bien, bar�n.

Gracias, comandante.

L�stima que no se puedan pilotar
las mesas de billar, �verdad?

O que se puedan pilotar los aviones
como si fueran mesas de billar.

- Mi comandante, el aterrizaje...
- No pasa nada.

Creo que servir�.

Practicaremos el vuelo.

- Mi comandante.
- �S�?

Si prefiere que vuele en otra escuadrilla...

No, no.

Me gusta c�mo juega al billar.

- �Ha pasado fr�o en el viaje, bar�n?
- �Mi comandante?

S�, mi comandante.

Vaya, ha hallado a su presa.

Lo que ha quedado de ella.

�Quiere recordar
su primer derribo, Richthofen?

S�. Quiero recordarlos todos.

En eso consiste la victoria,
�no, mi comandante?

Debo admitir que no s�
en qu� consiste la victoria, Richthofen.

Pero en cuanto a acordarse
de los hombres que ha matado,

yo no me preocupar�a.

Por cierto, Rittmeister, �qu� velocidad
de sustentaci�n tiene su avi�n?

No lo s�, mi comandante.

�Qu� resistencia tiene la tela de las alas?

No lo s�, mi comandante.

Pues yo he recogido este trofeo
del ala de su avi�n...

mientras usted iba en busca
de ese franc�s.

Bien podr�a estar �l
brindando con sus compa�eros...

y ser usted el que est� en el barro.

Nunca vuele en l�nea recta
m�s de 30 segundos seguidos.

Si lo hace,
ofrece un blanco f�cil al enemigo.

No deje de mirar a todos lados
como en una silla giratoria.

Col�quese detr�s del otro avi�n
para poder hacer un rizo...

sin perder al enemigo.

Ac�rquese. Ac�rquese deprisa. Hola.

Gire y m�tase.
Col�quese justo detr�s de �l.

Intente acercarse todo lo que pueda.

Hay que estar muy cerca, justo encima.

Ojo con los se�uelos.

Pueden ser parte de una trampa...

en la que pasar� de ser cazador a cazado.

Vuele �nicamente
cuando cuente con ventaja t�ctica,

y entonces apunte bien.

Nunca dispare cara al sol.

Mire, no tape el sol con la mano as�,

t�pelo con el pulgar. �Me entiende? As�.

As� ve en todas direcciones.
Muy bien. En marcha.

�Qu� tal?

La escuadrilla 10 ha sufrido da�os.

Los alemanes han perdido dos.

- Los nuestros vuelven todos.
- Estupendo, estupendo.

- Entonces no han sido rivales.
- S� lo han sido.

Hemos tenido suerte de lograr un empate,
m�s o menos.

Veo que han llegado los nuevos aviones.

Ahora podremos darles bien. Acosarlos.

S�, no estar�a mal.
De liebres a perros de caza.

Tengo entendido que el AA es mejor avi�n.

Mortal, si no se anda con ojo.

�C�mo dice?

Poca envergadura, menos sustentaci�n.

Si uno no sabe lo que se hace, muere.

S�, dicen que 120, como poco.

Eso con la llave a 200.

�stos est�n a 190.

As� tienen 1.000 pies m�s de techo.

Hay que ir por encima de esos cabrones.

Creo que no nos conocemos.
�Est� destinado aqu�?

Brown.

Acabo de llegar.

Tengo que encontrar al fulano
que manda la escuadrilla 24.

Yo soy el fulano
que manda la escuadrilla 24.

Pues encantado de estar aqu�.
Imagino que le ser� �til.

Eso imagino yo.
Me tocar� buscarle algo que hacer.

�Lleva sus �rdenes?

He ido a 890 pies por minuto.

A 21.000 pies de altitud media tarde.

De maravilla.

- Es usted americano, �verdad?
- Canadiense.

- Eso es medio americano, �no?
- Y medio brit�nico.

- Oiga, eso es la Cruz Victoria, �no?
- En efecto.

Dicen que cuesta lograrla.

Que yo sepa,
los �nicos que la han recibido est�n...

Muertos.

S�.

Manfred, han confirmado el S.E.5
hace una hora.

Casi cae
sobre una bater�a de artiller�a nuestra.

Y con �se ya eres un as.

- Enhorabuena.
- Enhorabuena.

Lo ten�a en la mira.
O sea, no ten�a escapatoria.

Le indiqu� que descendiera, pero se neg�.

Luchaba como una rata acorralada,

as� que le di... Lo ametrall� a base de bien.

Qu� asco de tiempo.

As� no hay quien se cure un catarro.

Werner, necesitas un descanso.

El m�dico ha dicho...

Los descansos d�jamelos a m�.

Se me puso a tiro, �sabes?

Hermanito.

Vengo a pedirle un aut�grafo,
bar�n von Richthofen.

Werner, te presento a mi hermano, Lothar.

- Werner Voss.
- Dios, otro.

No nos quedar�n aviones brit�nicos
a los dem�s.

Ya has volado en combate, �verdad?

Algo. No tanto como vosotros,
desde luego.

Todo el mundo conoce a Udet,
a Wolff y a Voss.

- �Qu� narices es esto, Goering?
- Nada.

No es nada.

Algo s� que es.

Si es como el �ltimo,

una chica desnuda con las piernas...

Venga, ens��amelo. Vamos.

�Qu�?

No est� mal.

No est� mal. No est� mal.

Resulta que es
una ganga de 30.000 marcos.

No est� mal.

Caballeros, por el Rittmeister Richthofen
y su d�cima victoria.

Y por nuestra escuadrilla.

Que siga como ha empezado...

al servicio de la patria.

Un brindis por un distinguido
y joven enemigo.

Por el Rittmeister bar�n von Richthofen.

- Por von Richthofen.
- Por von Richthofen.

Oye, Thompson, �qui�n es �se de ah�?

Ah, �no lo sabes?
Es el nuevo, Brown, canadiense.

Un apunte cultural, teniente Brown.

Tenemos una costumbre llamada brindis.

Se produce cuando los caballeros
se levantan y beben por algo de estima.

Se espera que participen
todos los caballeros presentes.

Prefiero no hacerlo, teniente.

�No le gusta nuestro vino?

Es que tampoco puede beber.

- �Y por qu� no?
- �lcera.

Se toma algo blanco para ella.

�Le gustar�a brindar con leche, Sr. Brown?

No tengo en ninguna estima
a su von Richthofen, teniente,

y no voy a brindar por ese cabr�n
ni con vino ni con leche.

Caballeros, ya est� bien.

Lamento que lo vea as�, teniente Brown.

No tiene por qu� explic�rselo,
mi comandante.

Nosotros opinamos, teniente Brown,

que los hombres pueden ser enemigos
sin convertirse en animales.

Los que sobrevivan a todo esto ver�n
que seguir�n necesitando las tradiciones...

que distinguen a los caballeros
de los b�rbaros.

Me guardo mi vino para el pr�ximo
que derribe su caballero alem�n.

Buenas noches, se�ores.

Racista cabr�n.

Dejad su vino ah�.
Que se quede ah� y se avinagre.

Hay que darles m�s fuerte, se�ores.

Hay que darles m�s fuerte, se�ores.

Ahora tenemos ventaja,
pero no siempre la tendremos.

Hay que ganar mientras la tengamos.

Mucho ojo con los nuevos S.E.,

que son muy r�pidos. Muy r�pidos.

Richthofen.

No se lo dec�a a usted �nicamente.

No espero que gane la guerra usted solito.

�Por qu� no, mi comandante?

Porque le necesito.

No hay muchos como usted.

Otro a�o as� y a�n quedar�n menos.

Dentro de un a�o
estaremos almorzando en Londres.

Manfred,

a veces me parece
que no oyes nada de lo que te digo.

�Crees que vas a vivir eternamente?

Todo momento que paso en el aire
con estas Spandau en mis manos...

es eterno.

Buena suerte.

No te apartes del sol.

Boelke ha muerto por culpa
de ese maldito payaso de provincias.

Calma.

- �Von quer�a otra victoria!
- No se dio con Richthofen.

Se dio con tu tren de aterrizaje.

�Por qu� no te elevaste?

Le diste a Von, �no? �No?

�se es el tema.

No tengo un "von" delante de mi apellido.

Sois todos una panda de campesinos.

Le dej�is pasar ese asesinato
porque es el bar�n von Richthofen.

Hice lo que me pareci� mejor.

Pens� que si me dirig�a
directo hacia el ingl�s,

aunque le embistiera, �l...

Se lo deb�a todo a Boelke.

- Si hubiera podido ocupar su lugar...
- Te gustar�a, �verdad?

Maldito seas, t� nunca ocupar�s su lugar.

�Le has matado!

Y si me dan a m� la escuadrilla...

Pedir� el traslado diez minutos despu�s.

Si Richthofen
fue el causante del accidente,

supongo que se espera
que haya fusilamiento.

No necesariamente, coronel.

Von puede escoger entre la crucifixi�n
o la canonizaci�n.

Est� claro que la escuadrilla
necesita un nuevo jefe.

Pero hay varios candidatos posibles.

- Voss, Goering...
- Conozco a Voss.

Si eligen a Voss, la semana que viene
volveremos a estar con lo mismo.

Hablando con franqueza,
prefiero a Goering.

Me gusta c�mo piensa.

Pero no funcionar�.

No hace buenas migas con nadie.

Y los pol�ticos lo que necesitan
es un hombre que agrade a Berl�n.

Nos hace falta otro Boelke.

�A qui�n habr�a elegido Boelke?

Cuesta saber c�mo despedirse
de un compa�ero as�.

Tan s�lo puedo decirles estas palabras.

�Qui�n defender� a este ej�rcito,

m�s antiguo que el mism�simo imperio?

La guerra es la reina...

y la madre de todos.

Algunos se han mostrado como dioses,

otros como hombres.

�Qu� pinta �l ah�?

�Por qu� le han dado a �l
las condecoraciones?

A saber. No significa nada.

Y un cuerno.

Me pregunto qu� le dar�an
si nos hiciera matar a todos.

No tiene m�s que 23 a�os.

�Se acuerdan de lo que era tener 23 a�os?

Yo no los tuve.

De haberlos tenido, me acordar�a.

Adelante.

Ah, Richthofen.

Von Richthofen, seg�n creo.

Me alegro de verle.

�Tomamos una copa?

Boelke le ten�a en gran estima, bar�n.

Fue m�s que bueno conmigo.

Vamos a darle el mando de la escuadrilla,
von Richthofen.

Bueno, �qu� le parece?

Que estar�a muy bien.

Por el bar�n Manfred von Richthofen.

Que sea tan buen jefe como Boelke,
su maestro.

Y que borre a los brit�nicos del cielo.

Y que viva para disfrutarlo.

Herr Rittmeister, en la guerra
empez� como oficial de caballer�a, �no?

S�.

�Y qu� sensaci�n da volar ahora,
combatir en el cielo?

Mis antepasados
eran caballeros teut�nicos.

�nicamente he cambiado el caballo
por un avi�n.

Entiendo. As�,
�volar s�lo es un medio para lograr un fin?

Volar es una maravilla,
pero es la caza lo que m�s me satisface.

El acecho, la persecuci�n y,
finalmente, la caza.

El cl�max.

Entonces �le gusta la guerra?

�Qu� puedo decir?

La guerra es la madre de las naciones.

Las esclaviza o las hace libres.

La victoria comporta un cl�max,
una sensaci�n de satisfacci�n.

Pero �y el peligro todos los d�as,
siempre que est� en el aire?

Nunca me paro a pensarlo.

Es como el tiempo. Siempre est�.

Pero al cazar, piensa en lo que caza,
�no es as�?

Buenos d�as.

Bonito d�a.

Baja.

�Me entiendes?

Tengo una moto.

Podemos dar una vuelta junto al r�o.

Narcisos... �C�mo los llam�is?

Baja.

Vamos.

Baja.

Tengo que irme.

�Me entiendes?

Soy piloto.

Debo luchar contra los alemanes.

Intentar� volver.

�C�mo que "pintarlos"?

�C�mo quiere camuflar un avi�n?
Ha perdido el juicio.

Yyo qu� s�, Herr Rittmeister.

Es lo que me han ordenado.
Pone: "Pintarlos". Mire.

Holzapfel, �hay que esconderse
del enemigo?

Depende, Herr Rittmeister.

�Debe un caballero
esconderse del enemigo?

No, Herr Rittmeister.

Entonces deber�amos...

�Qu� demonios es esto?

"Pintarlos."

- Qu� estupidez.
- Pone: "Pintarlos de colores...

"para ocultar
el car�cter y la forma del avi�n".

Bien. De colores.

Udet, Goering, todos,
llamad a vuestro personal.

Decidles que es un servicio especial.

Lothar, vete con Holzapfel a Intendencia...

y traed toda la pintura y las brochas
que encontr�is.

- �De qu� colores?
- De todos los del arco iris.

El af�n de Alemania por tener voz
en el destino de Europa, se�ores,

es m�s que una guerra. Es una cruzada.

- �Y qu� exige eso?
- �Racionamiento, comandante?

Sacrificios, Herr Richter.

Jefes j�venes totalmente entregados.

Ya conocen las haza�as de la Jasta
del bar�n von Richthofen y Boelke.

Amarillo.

Amarillo. Azul.

- Azul.
- Azul.

Nos trasladar�n a todos a infanter�a.

Asar� ratas en el Somme.

La he conseguido.

Muy bien, Lothar. Estupendo.

Primero negro, para pintar una Fr�ulein
en el de mi hermano.

�De qu� color pintamos mi avi�n?

- �Qu� te parece?
- Muy bonito.

�Por Dios!
Lo ver�n a 30 kil�metros de distancia.

Representan lo mejor
de la Alemania actual.

Si uno se embarca en una cruzada,

�stos son los caballeros que querr�a...

�Contratar, comandante?

Es usted un c�nico, Herr Richter.

Est�n acabando de trabajar en los aviones.

Pueden estar cansados e irritables.

T�nganlo en cuenta, se�ores.

Venga. �Deprisa, deprisa!
Acabemos de una vez.

�Dios! Ya ver�is
cuando lleguen esos hijos de puta.

Los hijos de puta ya han llegado, teniente.

Caballeros, es un placer verles.

Rittmeister, quiz� pueda
explicarme todo esto.

Acatamos las �rdenes, mi coronel.

Venga ya, Rittmeister,
las �rdenes estaban bien claras.

M�s claras imposible.
Dec�an: "Pintar los aviones".

Para que sean m�s discretos.

Pon�a: "Pintarlos de colores
para ocultar el car�cter y la forma".

Creo que ah� le han pillado, Cargonico.

Dios sabe que de colores s� que son.

El car�cter o forma que puedan tener
est�n m�s que ocultos.

Pero esto es absurdo.

Todo el servicio a�reo sabe...

que empleamos rombos
marrones y verdes como camuflaje.

Con su permiso, mi coronel.

Somos luchadores alemanes,
no gorriones ingleses.

El Emperador puede ordenarnos morir,

pero nadie tiene derecho
a ordenarnos que nos escondamos.

Caballeros, apruebo su criterio,
como es natural.

Pero este despliegue es extra�o.

- Es un circo.

Tu padre est� bien. Tu madre te env�a
un beso, y mi hermana tambi�n.

Qu� bien.

�C�mo viniste tan r�pido?
Cre�a que estabas en la universidad.

S�.

Hasta que un profesor m�o
dijo que �sta ser�a la �ltima.

- �La �ltima qu�?
- La �ltima guerra, claro.

Ver�s, Roy, ten�a que venir.

Seremos los �ltimos soldados, �no?

Los que vengan despu�s nos envidiar�n.

Bien jugado.

- S�, vas a encajar de maravilla aqu�.
- Eso espero.

Todos dicen las mismas gilipolleces.

No, no. Despacio, despacio.
Cuidado con el brazo.

�Dios!

En fin, est� muerto.

- Roy...
- Se llamaba Kenyon.

�Te parece
que la pr�xima generaci�n le envidiar�?

No hac�a ninguna falta.

Ya no pod�a hacerles ning�n da�o.

Claro que s�.

Si hubiera salido con vida,
ma�ana estar�a volando de nuevo.

Sr. Brown,

algunos de la escuadrilla
vieron su gesto de la otra noche...

como una falta de respeto
al comandante Hawker.

Pues se equivocan.

Pero da igual.
No ir� por la cantina de oficiales...

para que sigan brindando
por von Richthofen y su panda.

Dudo mucho que vuelvan a brindar
por los alemanes.

- Ha acabado usted teniendo raz�n.
- No pretend�a tenerla.

Lanoe Hawker y yo...

Ten�amos las mismas convicciones.

Somos de ese otro mundo
que tan poco aguanta usted.

Me pregunto qui�n nos ayudar� ahora.

Hombres. No m�s caballeros andantes.

Thompsons, Murphys, Mays y Browns.

Si no gana con ellos, otra forma no hay.

Sospecho que por eso
le desprecio un poco, Brown.

�Se�or?

Porque, lamentablemente,
me veo obligado a darle la raz�n.

Rittmeister bar�n Manfred von Richthofen,

le llama Su Majestad el Emperador.

Est� bien matar ingleses
ah� arriba, �verdad?

S�, majestad.

Claro que s�.

Ojal� estuviera con usted.

Lo peor de la guerra
es no estar en el frente.

Por supuesto, majestad.

Nos traicionaron, �sabe?

Los brit�nicos. Nos vendieron
a los franceses. No saben gobernar.

Pero nos ocuparemos de que no lo hagan.

Regrese, Richthofen.

Regrese y aniquile
otros 40 hijos de puta m�s.

Como desee, majestad.

Ah, Herr bar�n. Es decir, Rittmeister.

Las dos valen.

El guardia
me ha dicho que no pasaba nada...

Le he explicado el motivo...

�Por qu� no me lo explica a m�?

Soy Steiner, se�or... Ver�, he tra�do...

Claro, el joyero.

Es un placer conocerle por fin.

- Quiero decirle...
- �S�?

Quiero decirle...

que para m� es un privilegio...

proporcionarle estos trofeos.

Yo...

Tengo... Cuando leo en la prensa sus...

Sus �xitos...

Tengo la sensaci�n
de estar en el cielo con usted.

Es muy amable de su parte, Herr Steiner.

- Muchas gracias.
- Gracias a usted, Herr bar�n.

�Quiere tomar algo?

No, gracias. Ser� mejor que me marche ya.

Adi�s, Herr bar�n.

Qu� maravilla, �no, von Richthofen?

En unas horas
ha conquistado usted Berl�n.

Una ocupaci�n temporal, mi comandante.

Disculpe, mi coronel. Ma�ana
Berl�n volver� a ser de los bur�cratas.

Le presento a su anfitri�n,
Anthony Fokker.

Despu�s de usted, el hombre
m�s importante del servicio a�reo.

Es usted muy amable, Herr Oberst.

Perm�tame darle la bienvenida,
Herr Rittmeister.

- Hac�a tiempo que le esper�bamos.
- �C�mo dice?

Todos han pasado por aqu�.

Himmelmann, Boelke, Schr�der.

Y claro, hablamos de aviones de guerra.

Buenas noches.

De los problemas de construirlos
y pilotarlos, naturalmente.

Sus aviones son famosos, Herr Fokker,
y merecidamente.

Por favor.

Siempre he querido hablar con usted.

Quiero conocer sus opiniones,

ense�arle unas ideas que tengo.

Gracias. Me imagino aviones mejores
que algunos que he pilotado.

Quiz� pueda ense�arle uno.

Es el nuevo Pegasus.

Dios m�o, Fokker, es...

Adelante, d�galo.

No es un crimen que un soldado
admire algo bonito, pues lo es.

No ten�a pensado que fuera as�.

Lo dise�� para ser tan bonito y preciso
como un ave de presa.

Y no s� c�mo, sali� as�.

Una preciosidad.

- �Es veloz?
- Lo suficiente.

Es su maniobrabilidad
lo que tiene de especial.

- �Y la respuesta?
- Fabulosa. Probada.

Est� a la altura de todas sus exigencias.

- Parece que tiene peligro.
- No para usted, amigo m�o.

Es... Es ideal para usted.

Su manejo no le plantear� ninguna duda.

Debo volver ya con mis invitados.

Si me disculpa,
le dejo que cuide de mi criatura.

Habla mucho.

Intentaba convencerme.

�Necesitaba que le convencieran?

Tiene un dise�o extraordinario.

Ah� vivo yo.

Vaya suerte. No se ha encasquillado.

De suerte nada.
Es el espaciamiento y la carga de p�lvora.

Me ha ayudado
uno de la unidad de ametralladoras.

A partir de ahora, c�rgala t� mismo.

Por Dios, �cu�nto tardar�?

�Cu�nto quieres tardar en morir?

All� va el San Francisco de las m�quinas.

Los motores ronronean en sus manos,

las motos petardean con su bendici�n...

y las armas... Las ametralladoras
dan saltos de alegr�a al verlo.

Por c�mo has jodido las tuyas,
Murphy, seguro que tambi�n te adoran.

Jam�s tendr�s el cerebro ni las agallas
que ten�a Hawker.

Una cosa s� hacer mejor que Hawker.

Seguir con vida.

�Yo puedo remediarlo!

- �Detenedle!
- Ya est� bien.

�Tan mala punter�a tienes, Murphy?

�No aciertas ni por la espalda?

�C�mo se cargaron a Hawker, Murphy?

�C�mo le mataron?

M�s te vale practicar
el disparar por la espalda.

Se acabaron los pre�mbulos.

Quieres que olvidemos
que somos humanos.

Pues ya lo he olvidado, maldito seas.

No.

Quiero que recuerdes
para qu� estamos aqu�.

Quiero que pienses en matar.

Cuando la tarea es matar,
hay que estudiar a los que mejor matan.

�Como por ejemplo?

Los lobos, Sr. Thompson.

Cazan en manada.

Se cree que dejan el cad�ver de la presa
para atraer a otros animales.

�De cebo?

Es Richthofen.

Nos ha costado Reiner y Powell.

Es para ti.

- �Y qui�n es usted?
- Manfred, se�or.

�Manfred? Aqu� no hay ning�n Manfred.

Usted es von Richthofen, �queda claro?
Von Richthofen.

�C�mo se llama?

�Qui�n es?

Richthofen.

No acabo de entender
lo que tienen pensado.

Es lo que �l dice.

�Quieren atacar el aer�dromo alem�n?

A las 17:30 � 18:00 de la tarde.

A la hora de la cena.

S�, m�s o menos. Despu�s del t�.

�Qu� le parece, jefe?

Debo pens�rmelo, se�ores.

No puedo evitar
plantearme a qu� conducir�.

El comandante Hawker est� muerto.

La idea es suya, �no, Brown?

M�relo de este modo, mi comandante.

Nos toca batear a nosotros.

- �Hab�a algo por ah�?
- Unos cuantos pichones. Poco m�s.

Ha venido Herr Parsonow. Ha dicho
que un jabal� le destroza su maizal.

Le he dicho que te lo comunicar�a.

Un jabal� no estar�a mal.

- Hace ya...
- En 1913.

- En junio, creo.
- �Qu�?

Tu �ltimo jabal�.

Lothar dijo que no lo hiciste bien. Y t�...

Dios m�o, �c�mo lo haces?

�C�mo te acuerdas de eso?

Me acuerdo
de todo lo que hacen mis hijos.

Lo que es importante para ellos,
lo es para m�.

Pero �qu� es importante para ti?

�Qu� es lo m�s importante para ti?

Mis hijos.

�Te encuentras mejor, hijo m�o?

- Como para volver ya, creo.
- Bien, muy bien.

Queda mucho que hacer
para terminar la guerra.

Eso estar� bien, padre.

Cuando se acabe,
habr� que arreglar las cosas.

Utilizaremos el ej�rcito
para limpiar la chusma socialista.

�Volver a ponerlas como antes, padre?

�De verdad lo crees?

El Partido Obrero. La guerra acabar� con
esos campesinos que creen hacer pol�tica.

Las cosas cambiar�n cuando acabe.

Una opini�n segura, padre.

Anoche estuve leyendo
la historia de Frederico el Grande...

y de su hijo Manfred,
el caballero teut�nico.

Un gran h�roe.

T� te llamas igual, hijo m�o.

�Crees que le gustaba el sol? Deber�a.

En Italia luch� con mucha desventaja.

Muri�. Lo enterraron
en el campo de batalla.

Para vivir eternamente.

Para que lo desenterraran sus enemigos...

y dejaran sus huesos al sol
en la orilla del r�o.

El pueblo alem�n no olvida nada.

Excepto el nombre
de su semental favorito...

y la ciudad en la que viv�a su amante.

Ojal� te hubieras casado o...

No hab�a tiempo.

- �Cu�nto tarda uno en?
- �Olvidarse de uno mismo?

- No tanto como en amar.
- Desde luego.

Aun as�, me gustar�a ver
qu� nos depara el futuro.

Me parece
que es lo �ltimo que quieres, padre.

Despu�s de la guerra
volveremos a poner las cosas como antes.

Todo volver� a ser como antes.

�Por Dios, quitad de ah� los aviones!

Arrancad mi avi�n.
�Ahora ver�n esos cabrones!

�Venga, a por ellos!

Contacto.

- �D�nde le han dado?
- No lo s�.

Dios, mira c�mo tengo la pierna.

- Me noto como si tuviera...
- Es un infierno.

Se han cargado hasta el �ltimo avi�n.

No ha despegado nadie.

Es como las trincheras.

Nos han tra�do las trincheras.

Todo el mundo f�cil y seguro por los aires.

Ha sido una maravilla. Una maravilla.

Teniente, �ha contado
los aviones destruidos?

Entre 15 y 20.
Alcanzamos todo lo que hab�a a la vista.

- �Y personal?
- �C�mo dice?

Dice que cu�ntos cabrones nos cargamos.
A montones.

A�n estaban en la cantina.

Pensamos que atacar a la hora de la cena
ser�a como...

La �ltima cena.

Destruyeron las municiones
y alcanzaron la cantina de oficiales.

�Y el cuartel?

May, t� le diste a la casa larga marr�n.

S�, dos veces. Seguro que era el cuartel.

No, eso ser�a el hospital.

�Debo entender que mi gente
ha bombardeado un hospital?

�Vio una bandera con la Cruz Roja delante
o pintada en el tejado?

Hab�a tanto humo que no ve�a nada.

Entonces no era el hospital, �no?

Con su permiso, comandante.

�Es una bandera
lo que determina que sea un hospital?

La Convenci�n de La Haya
deja claro que su ausencia...

�Y la presencia de heridos,
m�dicos y enfermeras...

no supone nada en esa clasificaci�n?

En lo fundamental, no.

Mi coronel, me temo
que el partido de cr�quet ha terminado.

Pronto recibir�n �rdenes detalladas
de ametrallamientos,

emboscadas a oficiales,

destrucci�n de todo tipo de suministros,
los m�dicos entre ellos.

�Ya no quedan l�mites, comandante?

Nosotros no iniciamos esta escalada,

pero hay que igualarla, claro est�.

No hay m�s remedio.

�No cree?

Herr Rittmeister, menos mal
que ha vuelto. Los brit�nicos...

Todo est� hecho un caos.

Lothar. �D�nde est� mi hermano?

Le dieron. Lo ametrallaron en tierra
mientras despegaba.

- �D�nde est�?
- Est� vivo. Tiene un balazo en una pierna.

�Quiere verle?

M�s tarde.

Tenemos que reconstruir
una escuadrilla entera.

�Qu� nos queda?

�Se refiere a aviones? Eche un vistazo.

Tardar�amos dos d�as en reunir piezas
para poner un solo avi�n en condiciones.

Llame a Werner.
Que se re�na conmigo en el hangar.

�Qu�?

Voss. Quiero a Voss.
Le necesito ahora mismo.

Herr Rittmeister, Voss muri�
el d�a en que le hirieron a usted.

Claro.

Es verdad. Ya me acuerdo.

Quiero un informe de todos los oficiales.

No quiero suposiciones descabelladas.

Quiero saber
si hay aviones que puedan volar,

cu�ndo podremos contar
con reposiciones...

y cu�ndo podremos aterrizar
en la pista de al lado.

Quiero que todos...

�Qui�n est� al mando?

Soy von Richthofen. �Qu� trae usted?

�Qu� traigo?

Les traigo trece aviones.

Los aviones de Fokker.

Venga, vamos a sacarlos y a montarlos.

Cada uno habr� de trabajar por tres...

si queremos atacar a los brit�nicos
esta tarde.

Lo mejor es que no perdimos ni un avi�n.

No es m�s que el principio.

Y con los americanos...
�Dios m�o! Los haremos pedazos.

No pareces muy contento.

S� que lo estoy.

Es que pensaba que podr�amos
pasar sin fingir. Hacerlo y punto.

Tienes raz�n.

Me pregunto si Hawker lo sab�a.

�Qu�? �Qu� pod�a saber �l?

Que tenemos que fingir
que nos volvemos locos.

Creo que le has dado demasiadas vueltas.

Al fin y al cabo, no hablamos de filosof�a.

La guerra es un problema
de f�sica aplicada. �No crees?

S�, un problema de f�sica.

Destacamento de la bandera,
presenten armas.

�Cabrones!

�Dios m�o!

�Dios m�o!

Cre�a que los hab�amos aniquilado.

No, cometimos un error.

Un error de c�lculo, como en la f�sica.

Goering. Teniente Goering.

�Se�or?

Se sali� de la formaci�n
sobre el aer�dromo brit�nico.

Se le vio ametrallar a personal m�dico.

Cumpl� con mi obligaci�n,
Herr Rittmeister.

- Fue decisi�n m�a.
- A usted no le corresponde decidir.

Pues sus decisiones s�lo le dan trofeos
de plata mientras perdemos la guerra.

�Maldita sea!

�Qu� sentido tiene jugar con ellos?
Ma�ana volver�n a atacarnos.

�Si yo estuviera al mando,
los bombardear�a, ametrallar�a y gasear�a!

�P�ngase firme!

�Qu� diablos har�a usted con un mando?

Usted no hace la guerra, no es militar,
�es un asesino!

Los militares van perdiendo.

Yo hago la guerra para ganar.

Me da igual c�mo.

Puede que lleguemos a eso,

pero no empezar� en mi escuadrilla.

Fuera de mi vista.

Y Goering.

�Se�or?

Como vuelva a tomar una decisi�n similar,

vaya olvid�ndose del mando,

pues acudir� al Emperador
para que lo fusilen.

- Teniente Brown, los lectores
delToronto Star quieren saber cosas...

sobre el nuevo as canadiense.

No hay mucho que contar.

- S�lo soy un t�cnico. Cambio las cosas.
- �Cambia las cosas?

Si se me planta delante
un avi�n con un hombre dentro,

los transformo en chatarra y cad�ver.

Bueno, �qu� le parece Francia?

Es un pa�s bonito, �verdad?

Muchos amigos m�os se quedar�n
cuando acabe la guerra.

�C�mo le gustan
las chicas francesas, teniente?

Con los dos brazos y las dos piernas, creo.

�Son peligrosos los aviones alemanes?

Matan a tantos alemanes como nosotros.

Con los nuestros pasa lo mismo.

Pero ahora que los superamos en n�mero,
vamos ganando, �no?

�C�mo quiere que lo sepa?

Un d�a vuelvo y me dicen que soy un as.

Pero es que ha derribado
ocho aviones alemanes.

�Son ocho?

Dios m�o, yo cre�a que eran 100.

No dejo de derribarlos,
pero al d�a siguiente siguen ah�.

�C�mo voy a saber
qui�n va ganando la guerra?

Una ma�ana de �stas...

- Una ma�ana de �stas habr� terminado.
- �C�mo se puede terminar?

A�n quedamos algunos con vida.

Ellos no la terminar�an
si quedamos algunos con vida.

�Gunther! Holzapfel, llame a Gunther.

�Dios m�o, Manfred!

Voss, Wolff. �Qui�n ser� el siguiente?

Todos, hermanito.

Ahora s� c�mo se sentir�n los faisanes
en oto�o.

�Te prometieron una guerra tranquila
cuando te alistaste?

De alistarme nada. Me reclutaron.

Estaba en el Ministerio de Defensa.
Ya ser�a vicesecretario.

No sab�a que reclutaran gente
para el servicio a�reo.

Acaban de empezar.

�Pasa algo?

Me muero de ganas de que pinten
los aviones de un marr�n bien apagado.

Los ingleses nos ven
a kil�metros de distancia.

Mira, ah� llegan los yanquis.

Eh, quiero cerveza, chicos.

F�jate, William.
�C�mo vamos a perder ahora?

�A qu� te refieres?

Repuestos para las m�quinas, Brown,
100 millones.

Vamos a arrollar a los alemanes.
�C�mo vamos a perder?

- Eh, ve con ojo, colega.
- Eres americano, �eh?

- No, canadiense.
- Bueno, eso es medio americano, �no?

Hemos venido s�lo para hablarle,
von Richthofen, del futuro.

El de Alemania y el suyo.

El panorama que pinta Inteligencia
es sombr�o.

Coronel Trackl, su informe.

Dentro de seis meses,
la ofensiva general aliada,

reforzada con varias divisiones
americanas, dar� comienzo.

Est� claro que la ofensiva ser� mortal.

En la primera fase
nos har�n retroceder hasta el Rin.

Y en la segunda fase nos invadir�n.

As� que comprender�, von Richthofen,

por qu� le retiro del servicio de vuelos.

�Quiere decir
que la escuadrilla dejar� de volar?

Pues no.

De hecho, la escuadrilla...

se ver� obligada
a realizar servicios m�s peligrosos.

�Quiere decir que s�lo me retiran
del servicio activo a m�?

Entiende los motivos, �no?

Nos vemos obligados
a pensar en el futuro.

Debemos organizarnos ya.

As�, la pr�xima vez los jud�os,
los comunistas y los mercaderes...

no podr�n volver
a apu�alarnos por la espalda.

Si lo desea, puede ser jefe
de pilotos de pruebas en mi empresa.

Har�amos dise�os
que se pudieran modificar para uso militar.

Dise�aremos aviones de carreras,
�no lo entiende?

Bueno, Herr Rittmeister,
�qu� tiene que decir?

Que est�n todos locos.

Maldita sea, Richthofen,
�vamos a perder la guerra!

Pero nadie de arriba
est� dispuesto a admitirlo.

Para que haya una futura Alemania,
alguien tiene que moverse.

Me importan un bledo
sus planes de futuro...

y su pr�xima guerra.

Capit�n,

le hablamos de igual a igual.

Yo no soy igual suyo.

Yo soy militar.

Tengo 30 hombres luchando
por sobrevivir. No voy a dejar de volar.

Yo hice de usted lo que es.

Le escog� y le di forma.

- Ahora espero que los brit�nicos le maten.
- No le quepa duda, mi general.

Me matar�n.

Roy, �qu� narices haces aqu� solo?
Es hora de volar.

Ya.

Estoy listo.

An�mate, hombre, que casi se ha acabado.
Antes de oto�o...

Jam�s se acabar�.

�Cu�ndo cambian el sistema de dataci�n?

"A.C." significar� "antes del combate".

"D.C." significar� "despu�s de cascar".

D�jalo ya. No pueden matarnos a todos.

�Qu� m�s da? �Ya estamos muertos?

"Mi estimado Herr Rittmeister,

"debido a las restricciones de guerra
lamentamos comunicarle...

"que ya no se consigue
la plata necesaria para sus tazas.

"Pero podemos hacer una taza id�ntica...

"de metal chapada de hojalata."

- Deber�a haber ido a por aquel jabal�.
- �Qu�?

Nada.

Tendr� que escribir a Steiner.
No quiero las tazas de hojalata.

�Quieres decirme
qu� sucedi� en la reuni�n de ayer?

Los dem�s se fueron
con pinta de largarse a Suiza.

No fue nada. Rutina.

Vamos.

He tenido que rehacer algunas piezas.

Tengo la impresi�n
de llevar toda la vida en este avi�n.

Creo que se acabar� pronto,
Herr Rittmeister.

�Qu� pasa con Goering, no vuela?

Le ha llamado von H�ppner.
Le han obligado a quedarse en tierra.

Qu� raro.

No tanto.

Contacto.

- �No es posible!
- �Muy bien, Brown!

�Menudo piloto!

�Por la escuadrilla Richthofen!

Y por su nuevo jefe.