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EL HALC�N Y LA PRESA

- �Eres Goolic?
- Los estaba esperando.

- Parece que ha sido un viaje largo.
- 300 millas, desde Texas hasta aqu�.

Tanto as� que matamos a nuestros
caballos y nos quedamos sin municiones.

Pero tenemos el bot�n a salvo.

El problema es que Corbett est�
detr�s nuestro.

Deja ya de temblar.
Ahora estamos en Colorado.

Corbett no podr� encontrarnos aqu�.
Y cu�ntanos...

- �C�mo andan las cosas por aqu�, Goolic?
- P�sima para los bandidos.

Y peor para los asesinos.

Los cuelgan, al igual que en Texas.

Si no me crees a m�,
preg�ntaselo a Goolic.

- �Qui�n eres?
- �No lo comprendes, idiota?

�Cre�mos que lo dejamos atr�s!
Pero siempre nos llev� la delantera.

�Es �l!
Es Jonathan Corbett.

Si tuviera una bala...
Solo una.

Creo que no entendi� mis reglas.

�Qu� hay de ti?

�Cuerda, o pistola?

Enfrentamiento, Corbett.

�No dispares, Corbett! �Soy inocente!
�No dispar� durante el robo!

Solo tengo 20 a�os... no me mates.
Por favor.

Qu�tate el cintur�n, despacio.

Quien lo dir�a, jam�s pens� en
ver esa pared vac�a.

S�, se�or. Cualquier hombre
de bien puede vivir en nuestro estado.

Y todos los malvados fueron borrados
del mapa por el gran Jonathan Corbett.

Es tan listo que no tiene
que perseguir a los bandidos.

�Son ellos los que van hacia �l!

�A celebrar!

Ahora puedes decidir
si te conviertes en senador.

Basta de persecuciones, basta de bandidos,
basta de balas silv�ndote las orejas.

Y sobretodo... basta de muertes.

�Cu�nto tiempo m�s seguiremos esperando?

Solo un momento Sr. Brokston.
No se muevan...

No se muevan...

- Buenas tardes Corbett. �C�mo est�s?
- Bien. Gracias.

- Le presento al Sr. Brokston.
- He o�do hablar mucho de usted.

Estoy seguro que no tanto
como yo de usted.

Miller, como padre del novio, supongo
que tienes invitados que atender.

Oh, es cierto.
Caballeros.

Bueno, este es mi secretario, el Sr. Lynch.

Y este es el Capit�n von Schulenberg,
es un genuino Bar�n austriaco.

- Y mi guardaespaldas.
- Desde que llegu� a Texas...

- Estaba deseando conocerlo.
- Curiosidad profesional.

Antes de dejar el ejercito imperial el
var�n ya era el mejor tirador en Europa.

- 33 duelos, 33 viudas.
- Mis felicitaciones.

Gracias, aunque usted sabe hacerlo mejor.

Creo que el Bar�n est� deseando
hacer una apuesta con usted.

Dej� de jugar con las armas
cuando ten�a 12 a�os.

Ahora, cada vez que saco mi
arma es solo para salvar mi vida.

Bien... �ha conocido a--?
�Ah si, Melissa!

Es una belleza, �no le parece?

Alg�n d�a ser� famosa en el teatro,
caus� furor en el boulerville.

Como puede ver, me rodeo
con los mejores de cada �rea.

Venga, demos un paseo.

Corbett, se dice que
tiene ambiciones pol�ticas.

Es la iniciativa de un grupo de amigos...

Pero no tengo la menor posibilidad
de que me elijan.

No se valora lo suficiente.

En Texas es m�s popular
que Davey Crockett.

Ha limpiado toda la regi�n de bandidos y
se ha negado a aceptar las recompensas.

- Adem�s, fue Sheriff.
- No oficialmente.

Y tampoco por mucho tiempo.

- Mi sal�n de juego era m�s rentable.
- No sab�a que ten�a un sal�n.

Ya no lo tengo,
lo perd� jugando al p�quer.

Tampoco sab�a que durante la guerra
lleg� a Coronel en solo 10 meses.

Eso tampoco dur� mucho.

Le di un pu�etazo al general y
volv� a ser soldado raso en una hora.

Bueno, hay luces y sombras en
la vida de cada hombre.

Pero la Historia preserva las luces
y olvida las sombras.

Corbett, le dir� lo que pienso.

Con su reputaci�n tendr� sin duda
la posibilidad de estar en el Senado.

�Sabe que necesita?
Alguien que lo financie...

- una campa�a electoral de alto nivel.
- �Alguien como usted?

- Exacto.
- �Por qu�?

Corbett, yo no intento comprarlo.

Pero solamente usted puede ayudarme
a realizar un gran proyecto.

La construcci�n de una ferroviaria desde
EE.UU. hasta M�xico a trav�s de Texas.

Tengo todo preparado.

Lo �nico que me falta es un hombre como
usted en el Senado, para respaldarme.

Mi ferrocarril lograr� un progreso
de 20 a�os en tan solo 1 d�a.

�Y es solamente el progreso
de Texas lo que le interesa?

Bueno, digamos que se puede ganar
tambi�n unos cuantos millones.

Pero lo construir� y solo yo
puedo hacerlo. �Qu� me dice, Senador?

Muy bien, pero aclaremos una cosa.

A mi solo me interesa Texas.
No su enriquecimiento personal.

Me parece justo.

- �Fot�grafo! Una foto aqu�.
- De inmediato.

- Y bien... �vamos?
- No se muevan, por favor.

- �Hola Chet!
- �Pero si son los hermanos McCoy!

- Hac�a mucho que no los ve�a.
- Perd�n por interrumpir la fiesta.

- Sucedi� algo terrible en Lonely Corner.
- La hija de Baker, de tan solo 12 a�os,

ha sido violada y asesinada.

- �Saben qui�n ha sido?
- Un mexicano, un vagabundo...

llamado "Cuchillo S�nchez".
Lo seguimos durante 20 millas.

- Pero le perdimos el rastro.
- Se dirige al sur.

Probablemente se esconda en uno
de esos campos de obreros mexicanos.

- Por eso venimos a pedir ayuda.
- �Por supuesto! El Sheriff organizar�...

una patrulla.
�D�nde est� Jellico? �Jellico!

- Aqu� estoy.
- �Has o�do eso?

S�, se�or. Pero la oficina del Sheriff
est� cerrada esta noche.

�Jellico! T� llevas la estrella,
�entendido?

Miller, �qu� sentido tiene enviar
una patrulla de 20 o 30 hombres...

cuando tenemos a un hombre
que puede hacerlo todo �l solo?

Siento molestar a Corbett...

por un vagabundo mexicano, es
como matar una mosca a ca�onazos.

Mas toda la gente honesta estar�
muy agradecida al hombre...

que capture al
autor de tan terrible delito.

Le traer� al mexicano, Jellico.
Ser� mi regalo de bodas.

Oh grande y glorioso Corbett.

Ya se te impacienta el dedo, �eh?

Toma.

- Te nombro mi ayudante.
- �Para qu� necesito eso?

Yo no lo he inventado, es la ley.

Te convertir�s en leyenda, amigo m�o.

Y debes respetar eso.

P�ngasela, esa estrella
puede resultarle muy �til.

- �Para que me sirva de
gu�a hacia el senado? - Cierto.

- Hasta ma�ana.
- Corbett.

�No necesitas mas informaci�n
sobre el mexicano?

Se llama Cuchillo S�nchez
y se va al Sur.

- �Qu� pasa?
- Un gringo.

- �Lo conoces?
- Se llama Corbett.

- Es un cazador de hombres.
- �Qu� est� haciendo?

- Preguntas.
- Oiga usted �Est� Cuchillo?

Hey, Se�or.

Esta aqu�, ese hijo de puta.

Cuando alguien me habla
quiero verlo a la cara.

Cuidado, Se�or.
Es r�pido con el cuchillo, como puede ver.

- �D�nde est�?
- En el sill�n del barbero.

�Ap�rtate barbero.
Quiero al hombre del sill�n!

�Lev�ntate!

�Lev�ntate, Cuchillo!

�Ahora est� libre barbero?

Entonces afeiteme a mi.

�Marchad, hermanos!
�Escuchad la palabra de Dios! �Adelante!

CIUDAD DE WILLOW CREEK
HABITANTES: 350

�Estos mormones no tienen
verg�enza ni la conocen!

- �Ll�vense a mi esposa! �Se las regalo!
- Oigan muchachos, miren.

Vaya vaya.
Miren quien ha llegado.

El gran Corbett llegando de su cacer�a.

- �Atrapaste alguno grande?
- No tanto.

Un tal Cuchillo S�nchez.

Lo hubiese tra�do vivo.
Pero empez� a disparar.

Jonathan, te equivocaste de hombre.

Este es Paco Molinas. Condenado a
muerte por robo y 5 asesinatos.

Sentencia cumplida. Am�n.

�C�mo es posible que te
equivocaras de hombre?

Porque vest�a parecido a cuchillo.
Y el mismo caballo que me rob�.

Bueno, si las cosas fueron as�,
puedes dejar de buscarlo.

Molinas lo encontr� primero y el mexicano
no ser� mas que comida para buitres.

- Por cierto, �viste que no te falte nada?
- S�, una estrella de Sheriff.

Ya sabes que esas placas queman,
alguno de los dos la habr� tirado.

- Probablemente.
- �Que te sucede?

- pareces desilusionado, Corbett.
- Lo estoy.

Como dijiste, ese chico
result� ser mas r�pido.

Bueno, me voy a buscar un hotel.
Y ma�ana seguir�.

Ya no hay albergues. No queda nada.
Se acab� la mina de oro...

y los que pudieron se
fueron y dejaron todo vac�o.

Lo �nico que puedo ofrecerte
son los camastros de las celdas.

O puede ser un alojamiento mas
estimable si lo prefieres.

Lo mejor de mi trabajo es que
tratas con toda clase de hombres.

Ayer vino un mexicano y me dijo:

"Si conoces a alguien que se parezca
a mi, le dar� un arma y un caballo."

"�Por qu�?", le pregunt�.
"Para gastar una broma" dijo �l.

- �Y puede creerlo?, lo hizo, vaya tipo.
- �Ven aqu�!

�Que pasa, te sorprende?

�D�nde encontraste esto?

- �Qui�n te lo dio?
- Me est�s apretando.

- �Qui�n te lo dio?
- El mexicano del que hablaba.

- �Cu�ndo?
- Ayer, al mediod�a.

- �Por qu� te interesa tanto?
- �C�mo era?

�Mas simp�tico que t�!,
eso seguro.

Mira como me dejaste.

Si, era m�s simp�tico,
m�s gentil, y muy alegre.

Un hombre, un aut�ntico hombre.

Si no se hubiera ido con los mormones
se habr�a quedado toda la noche.

Y hubiera estado feliz que se
quedara conmigo, un hombre--

�Oye!

�Qu� demonios?

Y aqu� se quedar�n,
porque �sta es la Tierra Prometida.

Que �stas palabras nos sirvan de
alivio durante el resto del viaje.

Que la Divina Providencia
nos acompa�e siempre,

y la paz est� con vosotros hermanos.

Vayan.
Vayan, hijos m�os.

�Si saco mi mano se
va a quedar callado?

D�game. �Hay alg�n
joven mexicano con ustedes?

S�. Un buen chico que respeta la
ley de Dios de una buena vida.

- �En qu� carro lo trajo?
- No recuerdo ahora.

Pero est� en el r�o, recogiendo
agua con la peque�a Sarah.

- �La peque�a Sarah, qu� edad tiene?
- Trece. �Por qu� lo pregunta?

Porque este "buen chico" es buscado por
violaci�n y asesinato de una menor.

No puedo creerlo.

�Eh, Sarah! �Sarah!
Ven al agua.

�Vamos! �Mira los peces!
�Son muy bonitos!

�Ven Sarah!

El agua es baja.

Se puede tocar el fondo.
�Lo ves--?

- �No! �No, no!
- �Sarah, por favor! �Vamos!

Yo estar�a aqu� hasta ma�ana, �prueba!

�Ven aqu�, ni�a!

Yo soy el lobo y t�
la peque�a mormona, �eh?

�Que preciosos pies blancos tienes!

�Hermosita! �Ven aqu�! �D�jame verte!
�Sarah, vamos! �As� es!

�Su�ltame, su�ltame!
Me voy a mojar, no, me asustas.

D�jame.

�Lev�ntate, Cuchillo!

- Deber�a matarte ahora mismo.
- �Por favor, no tenemos nada!

�Somos pobres no tenemos nada. Por la
virgen de Guadalupe, no nos mate!

Tenga piedad de mi,
�Quiere robarnos bandido!

- �Disp�rale! �Disp�rale!
- �Basta, payaso!

Era un bandido �verdad?
Tuve que hacerlo.

Iba a matarnos.

- Tuve que disparar, era un bandido.
- Cierto.

Pero peor a�n, era un idiota.

Adi�s chica.
Y gracias.

�Cuchillo se va!

- �Sarah! �Qu� ha pasado?
- Era un bandido...

- si no disparo nos hubiera matado.
- Tranquila Sarah, veamos.

No es grave, estese quieto, no se mueva.

- Cuchillo. �D�nde est� Cuchillo?
- Ha escapado cuchillo.

Al menos llegu� a tiempo.
Antes de que lastimase a su hija.

�Mi hija, Sarah?
Sarah es una de mis cuatro mujeres.

�Qui�n eres t�?

Alguien que no se mete nunca
donde no lo llaman, se�or.

- Y lo hago mejor con el est�mago lleno.
- �L�rgate!

- �Vete!
- S�. Pero como acabo de ver...

hay un puesto disponible, y yo con
tal de comer estoy dispuesto a trabajar.

- No queremos mexicanos aqu�, �vete!
- �No, espera!

Nos vendr� bien un trabajador,
al menos hasta que Jeff se recupere.

�Entiendes de animales?

Entiendo de todo, se�ora.

Ya lo veremos.
Por ahora denle de comer.

- Esta bien.
- "Esta bien, se�ora".

Esta bien, se�ora.

�C�mo te encuentras?

Podr�a derribar un toro con las manos.

Muy bien. Ens��anos qu�
puedes hacer. �Alguna idea?

Si, el viejo Barney que est�
encerrado en el montal.

- Hay que llevarlo al corral.
- Ah, el viejo Barney.

Te estamos esperando, mexicano.

Ese es el viejo Barney. Dijiste que
pod�as parar un toro con las manos �No?

Vamos, anda.

�Te ense�ar�!

Castrado.

Ven a la casa.

Yo te curar�, ven.

- �Ven aqu�!
- �Se�ora!

Debes llamarme se�ora,
como los dem�s.

Oiga amigo �Qu� est� haciendo?
�Adonde se lleva a ese hombre?

A este hombre lo busca
la justicia por si no lo saben.

- Pertenece a nuestro personal.
- Te equivocas, pertenece a la ley.

En estas monta�as la ley
la dictamos nosotros �L�rgate!

Me voy, pero se va conmigo.

M�ntate y m�rchate antes que me aburra.

Contar� hasta 3, est�s advertido.

Uno...

Dos...

- ...Y tres.
- �Quietos, quietos!

Perdone, fue culpa de mis
hombres, ellos lo provocaron.

- Se�or...
- Corbett.

�Quiere pasar a la casa?

Para demostrarle que a�n en un
rancho perdido entre las monta�as...

se conoce tambi�n la hospitalidad.

Esta bien, ese hombre es suyo.
�M�tanlo en un lugar seguro!

No le pasar� nada,
se lo aseguro.

�Puta, puta t�, puta tu madre, puta tu
abuela y la sobrina de tu abuela!

Y entonces...

me encontr� sola y viuda
en este rancho desolado.

Un trabajo duro para una mujer, y mas
duro para m�, que me eduqu� en una ciudad.

�Qu� esperan?
V�yanse.

Estos hombres rudos e ignorantes
act�an como bestias.

Y yo sola, debo dominarlos
para hacerlos obedecer.

Parece que lo consigue sin dificultad.

�Qu� est�n haciendo?

- Conversando.
- Si conversando, pobres idiotas.

Ustedes no lo conocen.

Apuesto a que no perdi�
el tiempo cuando salieron del cuarto.

- �C�llate!
- Yo, lo siento por ustedes...

que est�n aqu� como
idiotas mientras ellos...

Parece que lo estoy viendo.

Apuesto a que la debe estar
besando en su suave cuello,

mientras le est� quitando
la ropa lentamente.

Y le va descubriendo sus bellos,
bellos pechos blancos.

- Y al final con su mano le agarrar� su--
- �Basta!

�Te mato si abres la boca!

De seguro piensas que a mi edad
no se puede renunciar a la vida.

�Qu� quieres decir?

Hay cosas que se comprenden...

Sin decirlas.

Pero para eso tendr�a
que dejar mi pistola.

Este bastardo tiene raz�n.

Cierto, claro que tengo raz�n,
y desde el principio.

Lo han visto, ese ciudadano
es experto con la pistola.

�Por que estamos aqu�?
Nosotros somos mas.

Nos meter� el palo por el culo a todos.
Si se queda ser� el patr�n.

Es cierto que yo, no espero
nada bueno de ustedes.

Pero esperando aqu� dentro
�Qu� vamos a ganar?

Por eso muchachos, deteng�moslo
o de lo contrario nos fregar� a todos.

- �A qu� te refieres?
- Ya sabes a lo que me refiero.

Lo esperamos y cuando
se asome lo dejamos seco.

Si no actuamos ahora ver�n
como los va a tener ese tipo.

A todos sirvi�ndole.

Des�tenme, denme un fusil y...

�Escucha, mexicano!
Espero que tengas raz�n.

Si seguro, ver�n como lo mato
antes de que disparen.

- Y luego me podr� ir, �cierto?
- C�mo no mexicano, c�mo no.

Un hombre. Un hombre serio,
valiente, podr�a ser el patr�n aqu�.

No creo, que vaya a
contentarse con un hombre solo.

- Le gusta mucho ser la abeja reina.
- Y a usted mucho cazar bandidos.

Por que solo le interesa el mexicano,
vi como lo miraba.

Le salv� la vida por una sola raz�n.

Para recibir la recompensa.

Me complace mucho que
nos despidamos...

en perfecta armon�a.

�Qu� est�n haciendo?
Ahora ver�n.

No se mueva.

�Por que no est�s
disparando bastardo?

�No viste lo r�pido que cerr� la puerta?

Ir� por atr�s, a ese cerdo
hay que caerle por la espalda.

- �Anda, v�!
- �Contin�a disparando!

�No me vas a atrapar, americano!

�Cuchillo se va!

No dispares bestia, es un truco
para dejarte sin munici�n.

Esta vez no caer�.

�D�nde est�s?,
sal de ah�, te matar�.

Aqu� estoy.

�Espera! �Espera te lo ruego!

�No me puedes dejar sola aqu�!
�Te lo ruego, por favor ten piedad!

�Por favor, tengo miedo,
no me dejes aqu�!

Est� buena el agua, �eh?

- �Eh, Cuchillo?
- �Justo ahora, mierda!

La pr�xima vez que robes un caballo,
aseg�rate que tenga cantimplora.

Si no, tendr�s que parar a beber.

Y como este pozo es el �nico en 100
millas uno sabe donde esperarte.

�Abajo! �Tranquil�zate!

Hijo de puta, te aprovechas por
que eres mas alto y mas fuerte.

- Cobarde de mierda.
- Hablas demasiado.

Y si no fuera por esos
ganaderos est�pidos...

todav�a estar�as
corriendo por el desierto.

T� solo no me habr�as agarrado nunca.
�Entiendes? �Nunca!

�Me oyes?, no eres mas que un cabr�n.

�T� solo no podr�as atrapar
ni a un caracol con reuma!

Adelante. Cuando termine de comer,
tomo el caballo y te alcanzo.

A ti te debi� parir
tu madre corriendo.

�Hambriento?

Aunque quiz�s hasta comes
con las manos atadas.

- �Qu� te molesta de m�?
- No tengo nada contra ti.

Es la ley la que te busca.

- La ley, �y qu� es la ley?
- �De verdad no sabes?

Conozco una ley, la que dice que
el mundo se divide en dos partes,

los que huyen y los que persiguen.

Cierto, en mi pa�s exist�a
esa ley que menciono.

Luego vino la revoluci�n,
y con ella un tal Ju�rez.

Y su ley dec�a, que por fin
nosotros, los que hu�amos...

pod�amos detenernos y
descansar un poco, sin miedo.

Pero luego, cambi� todo otra vez...

y volvimos a estar como al principio.

- Y volviste a emprender la fuga.
- Pero al final te acaban atrapando.

�Sabes a qui�n tienes enfrente?

A un muerto de hambre.

Con tres hijos en casa,
y mi mujer, una santa.

Trabaja noche y d�a la pobre
como sirvienta del p�rroco.

Si yo estuviera en tu lugar dir�a:
"dejar� ir a este pobre hombre"

Si yo estuviera en tu lugar,
dir�a lo mismo.

Pero no ser�a tan tonto de
esperar que el otro me creyera.

Al menos ten un poco de gratitud.
Te salv� la vida en el rancho �recuerdas?

Para huir, necesitabas
15 minutos de tiroteo.

Pero lo hice �no?

Yo no ser�a capaz de matar un
hombre a sangre fr�a, ni hablar.

Y a una ni�a de doce a�os,
�a ella s�?

�Muy bien peque�a v�bora, muy bien!

�La hab�as visto?

Bueno, esta bien.

Si quieres te succiono la herida. Es la �nica
forma de deshacerse del veneno.

Decide r�pido, decide r�pido.
Que dentro de un minuto ser� tarde.

- �Y bien?
- No basta �sabes?

Creo que hay que quemarlo.

S�, no hay mas remedio que quemarlo.

�Arriba!

�Date vuelta!

�Sin trucos!

No puedo. No soy capaz de matar
a un hombre a sangre fr�a.

No soy tan malo como crees.

Hazlo, De todas formas
morir� en un minuto.

�Ves? Aqu� est� tu v�bora.

Toma. Te lo regalo.

Si despu�s de esto no me matas.

Ser� el �ltimo error de tu vida.

Puede que tengas raz�n.

Pero si te mato enviar�n a otro
y quiz�s peor que t�.

A�n queda una cuenta entre nosotros.
T� me debes la vida.

Y la pr�xima vez, yo te lo recordar�.

Pero no habr� pr�xima vez.

�Porque nunca me atrapar�s!

- �Est�n bendecidas padre?
- No, a�n no, pero...

Calma. Hay mucha aqu�. Despacio.

- Gracias.
- Tienes el aspecto...

de alguien que dio un buen paseo.
�Cu�nto tiempo llevas perdido?

Cuatro, cinco d�as.
No lo s�.

Ahora tranquilo, debes descansar.

Estoy siguiendo a un hombre, un bandido.

- Deme un caballo y una pistola.
- �Bromea?

Se dirige a M�xico y tengo que atraparlo
antes de que cruce la frontera.

No tengo dinero, pero todos los Sheriff
de Texas me conocen y le pagar�n.

Me llamo Corbett.
Jonathan Corbett.

Esta bien Corbett. Ya arreglaremos eso.
Suba a mi carro y descanse.

- Llegando a California lo primero que--
- Perder� tiempo, necesito el caballo.

�Est� loco?, todav�a me quedan
muchas semanas de viaje.

�y quiere que ponga en riesgo
a mi familia y todo lo que tengo...?

�solo para que usted pueda
atrapar a un bandido?

�Al diablo el bandido!
D�jele escapar.

- Que lo atrape otro.
- Si llega a M�xico...

- no podr� atraparlo nadie �comprende?
- No. No comprendo.

Ya empieza a cansarme, puede venir
con nosotros si quiere, y si no...

De acuerdo.
Disc�lpeme.

�Ladr�n!

�Ladr�n!

�Ah! Menos mal que lo vi,
pude haberle dado �sab�a?

- �Puedo ver el cuchillo?
- Si, naturalmente.

Pero le ruego que no se lo
diga al hermano Smith.

No se por qu� pero no aprueba esta forma de bajar la fruta.

- �Qui�n se lo dio?
- Un muchacho mexicano.

- �D�nde est�?
- Ya no est� aqu�. Se march� ayer.

- Aquello es M�xico. Esta es la frontera.
- �Y cuchillo la ha pasado?

- S�. Y su persecuci�n ha terminado.
- �Y usted lo cree?

- All� no tiene derecho de perseguirlo.
- A cuchillo lo busca la ley de mi pa�s.

Olv�dese de la ley.
Cuando cruce la frontera...

usted tambi�n estar� fuera de la ley,
y se convierte en un asunto personal.

- Usted lo sabe muy bien.
- Solo s� que no escapar�.

Portar un arma como esa durante a�os
puede cambiar mucho a un hombre.

- �Qu� puede usted saber de eso?
- �Le molestar�a d�rmela un momento?

Son mucho mas livianas ahora �eh?

�Lo ha visto? Es un viejo h�bito.
Y a�n as�, han pasado 30 a�os.

Cuando llegu� aqu�, los hermanos me
apodaron "Hermano Smith & Wesson".

Por que llevaba una en mi funda.
Estaba huyendo.

Alguien que dispara tan bien como
usted no tiene por qu� huir.

Hu�a de lo que llevaba dentro.
�Lo ves Corbett?

La v�ctima no siempre es la que est�
frente al revolver �comprendes?

S�, lo comprendes, pero no te importa.

- Lo siento.
- Yo tambi�n lo siento, por ti.

-�Una ni�a dice?
- S�.

- �Qu� edad ten�a?
- Doce.

�Era bonita?

�Era hija suya?
�Su sobrina?

- No la he visto en mi vida.
- No lo entiendo.

�Por qu� se empe�a tanto en capturar
a Cuchillo, es usted Sheriff?

- No.
- No lo entiendo.

Capit�n.

En mi pa�s un simple ciudadano que cree
en la ley debe colaborar con la justicia.

Pero ahora est� usted en M�xico.

�Y por eso le estoy pidiendo
que me ayude a capturarlo!

�Por qu� habr�a de hacerlo?
Ni siquiera puede probarme qui�n es.

Existe el tel�grafo, �no?
Desde San Antonio le dir�n qui�n soy.

- Eso podr�a hacerlo.
- Pero ayudarme a encontrarlo no �cierto?

S� que es de aqu�,
seguro que usted lo conoce.

Dijo que su esposa trabajaba
para el Padre.

�Esta s� que es buena! El Padre
nunca la dej� entrar a la iglesia.

Rosita trabaj� en un burdel
desde que ten�a quince a�os.

En cuanto a Cuchillo,
claro que s�, lo conozco.

Es uno de esos inadaptados
que hizo la revoluci�n con Juarez.

- Entonces, �usted tambi�n lo busca?
- Tal vez, pero no lo hago por usted.

- En ese caso d�jelo, me las arreglar� solo.
- �Sabe una cosa se�or?

Hay gente que me agrada menos
que los seguidores de Ju�rez.

Y son precisamente
los estadounidenses.

Por m� haga lo que quiera, muera
quien muera no pienso llevar luto.

�Pero! Procure no fastidiarme,
por que lo pasar� mal.

Estoy buscando a la esposa de Cuchillo.
Su nombre es Rosita.

�Eres t� Rosita?

- Son veinte pesos.
- Un momento. �Eres la esposa de Cuchillo?

�No me hables de ese cerdo!

- �Hace mucho tiempo que no lo ves?
- Ojal� nunca hubiera visto a ese canalla.

Vino ayer y me lo rob� todo.
Incluso mi medalla y mi cadena.

- �D�nde puede estar ahora?
- �Qu� se yo?

Debe estar con otras putas gast�ndose
mi dinero, bebiendo hasta que se le acabe.

La pr�xima vez que lo vea le arrancar�
los ojos a ese sinverg�enza.

C�lmate, si yo lo encuentro
no habr� pr�xima vez.

- �Qu� quieres decir?
- Que no volver� a robarte nada...

- porque lo colgar�n por asesinato.
- �A mi hombre?

- S�.
- �Vas a colgar a mi hombre?

�Yo te mato, maldito!

�Ante todo lo defiendes?
Es un asesino �Un animal!

�Por qu� lo defiendes?

�Ayuda! �Det�nganlo! Es un ladr�n.
�No quiere pagar!

- �Detengan a ese hombre!
- �Me oyen? �Que no escape!

Te lo advert� amigo.
No quiero fastidios.

Se�orita.

Ahora...

Te elijo a ti..., a ti..., y a ti.

- Un momento, a esta ya la eleg� yo.
- �Hay algo que tengas que objetar?

Ah no, nada.
Soy un tipo pac�fico.

�Pero qu� diablos?

�Desde cu�ndo encierran
a alguien por beber un poco?

�Es un crimen ser feliz?

Si para ser feliz tienes que herir a dos
ciudadanos, incendiar un local.

- y morder a un polic�a.
- �No! �No! �Ellos me provocaron!

La l�mpara se me cay� y el polic�a
me meti� la mano en la boca.

- Yo no hice mas que cerrarla.
- Ya, ya.

- �Se lo juro!
- Ahora s� bueno y no molestes mas.

�Abusas por que estoy aqu� dentro!
�Bellaco!

- �Socorro, socorro!
- �Qu� ocurre?

�Socorro, quiero salir, quiere matarme,
tiene piojos, me est� insultando!

- �Me est� provocando!
- �Qu� te ha hecho?

�Cambieme a la otra celda,
quiere matarme!

- �Ya c�llate, cretino!
- �No, gritar� toda la noche!

Si vuelvo a o�rte gritar...

ser� yo el que te cierre
la maldita boca �Entendido?

No eres mas que un cobarde.

�Pero de verdad cre�ste que
te tengo miedo, eh?

�sta es la raz�n por
la que me cambi� de celda.

Lo escond� aqu� la otra vez, cuando
estos idiotas se olvidaron registrarme.

Vamos ll�malo, llama al carcelero.

Despu�s de todo no eres un mal tipo.

Yo en tu lugar hubiese
despertado a toda la prisi�n.

Por suerte en mi pa�s las paredes
las hacen de paja y barro.

Te atrapar�.

Y para entonces no tendr� piedad.

Te atrapar� y te matar�
como a una bestia rabiosa.

�Qui�n es la peor bestia de los dos?

�Que escapo?, cierto que escapo.
Me detuve una vez a dar explicaciones...

y me apalearon como si fuese un perro.

�Y tu por que me persigues?
Por que te dijeron que soy culpable.

Y por eso mismo te
lanzaste a darme caza.

T� eres como una bestia
�te paraste a pensar si era verdad o no?

Ahora te vas a matar de risa.
Esa pobre ni�a ni siquiera la toqu�.

Pero s� muy bien
qui�n la mat� realmente.

Te reir�as mucho si te lo dijera.
Si es que no lo sabes ya.

Si supieras lo que significa huir.

Comprender�as que es mucho
mas dif�cil que perseguir.

Adi�s, amigo.

No me volver�s a ver.

Abre.

Adelante, sal, eres libre.
San Antonio respondi� al telegrama.

Si eres Corbett.
Y en cuanto a la ri�a--

- �Maldita sea ha escapado!
- �Qui�n?

El cerdo ese de cuchillo Sanchez.
�Qui�n otro escapar�a en media hora?

Bueno, as� podr� continuar la caza.
No, no pienso imped�rselo �sabe?

Pero ya se lo dije, aqu� en M�xico los
norteamericanos y los perros de Ju�rez...

pueden matarse entre ellos
con la bendici�n de las autoridades.

�No es agradable vivir
en un pa�s tan liberal?

�Quiere que se lo compre?

�A donde diablos llev� esta cacer�a!

Corbett, ahora tiene dos
aliados que le ayudar�n.

No, no me gusta su idea.

Esc�cheme Corbett. Cuando lleg� el
telegrama de la polic�a mexicana,

comprend� que estaba en un apuro y me
tom� la molestia de venir en persona.

Y no para escuchar su punto de
vista si no para darle fin a esto.

Est� en juego el asunto
de un mill�n de d�lares.

�Quiere que lo abandone
por un mugroso mexicano?

Ese mugroso mexicano me importa
m�s que su ferrocarril, o las elecciones.

Usted ya me pertenece, Corbett.

Si, su fotograf�a est� en las
paredes de todo el estado.

Y la gente sabe que lo apoyo con mi dinero
Estamos en la misma barca, Corbett.

Y si usted naufraga en el
rid�culo, caer� yo tambi�n.

Cr�alo, deseo lo mismo que
usted: eliminar a ese mexicano.

- Pero no con sus m�todos.
- Los de usted han fallado.

Ahora probemos los m�os. Puede estar
seguro que ese mugroso mexicano...

no se burlar� de mi.

No se preocupe, nuestro
gentil anfitri�n no se ofende.

Don Serrano espera participar
en el asunto del ferrocarril.

Eso si, cualquier cosa, �l no
entiende nuestra lengua.

Mis hombres est�n preparados.
Se est�n reuniendo frente a la casa.

�Est� usted realmente decidido?

Tan decidido como lo est� usted en
participar en el negocio del ferrocarril.

Asumo en el fondo que se trata de
un mexicano como usted.

Creo que no.
�l no es mas que un pe�n.

�Atenci�n todos! Ahora cada uno de
ustedes recibir� 100 pesos �Est� claro?

Y para el que lo atrape, habr� un
premio especial de 1000 pesos.

Y recuerden, a cuchillo lo quiero vivo.

S�lo tienen que encontrarlo.
Revuelvan este pa�s si es necesario.

Pero encu�ntrenlo.
�Andando!

�Cu�nto tiempo te quedar�s esta vez?

No lo s�.

�Ad�nde ir�s?

El mundo es muy grande.

�Sabes lo que hay detr�s de los
montes que se ven desde aqu�?

El mar.

- �Y c�mo es el mar?
- Es... grande.

No puedes imaginarte lo grande que es.

A lo mejor esta vez te llevo conmigo.

- �De verdad?
- Pues claro... llegamos.

Robo una barca y entonces...

�Este no es Cuchillo, tonto!

Perd�n, Capit�n. Parece que
hay mucho ruido esta noche.

�Qu� pasa?

Los jinetes de Don Serrano est�n por toda
la ciudad, armados y buscando a alguien.

�Oh! �Don Serrano!
Pues s� que es un gran hombre.

Un gran propietario, paga
impuestos y da dinero a la iglesia.

�Qu� vamos a hacer?

Hagan lo mismo que yo.

Irse a dormir, los que duermen,
no ven y no escuchan.

�Puedo hacerle una pregunta, Corbett?

Cuando est� a punto de matar a un
hombre, �qu� cosa le mira usted?

Se lo pregunto por que s� por
experiencia que todos miran a la mano.

Con la que dispara.

Yo no.
Yo miro a los ojos.

Porque un momento antes de que la
mano se mueva, sus ojos los delatan.

En ellos se ve escrita la muerte.

La del otro...

...o la suya.

Por favor deja de embriagarte.

- �Quieres decirme que te pasa?
- �Al diablo, d�jame en paz!

�Kate?
�Kate!

- �Adonde vas?
- A hacer el equipaje, me voy pap�.

- �Que cosa dices?
- No puedo soportar mas a Chet.

�Repite eso y te retuerzo el pescuezo!

- Es que el matrimonio--
- Lo tuyo no es un matrimonio.

Es una opci�n sobre los terreno de Miller
por los que ha de pasar mi ferrocarril.

Es parte del capital, y no me
agrada que se perjudique al capital.

- �Eh, t�!
- �S�, se�or?

- C�llate.
- �No, se�or! �No!

�Bastardo asqueroso!
No te bast� una vez.

- Ten�as que hacerlo de nuevo.
- �Qu� quiere usted decir?

- Sabes muy bien lo que quiero decir.
- �Pero c�mo se enter�?

Cuando ya era muy tarde, ya
te hab�as casado con mi hija.

Cuando esos malditos pelirrojos fueron a
la fiesta y dijiste no verlos hace tiempo.

Yo en cambio supe que los viste la noche
anterior, los llam� y los hice hablar.

- �Y qu� dijeron?
- La verdad.

Que andabas borracho, que mataste
a la ni�a, que el mexicano te vio...

y le echaste la culpa a �l.

�Pero por qu� hablaron?

No te asustes hijo.
Ya no le dir�n nada a nadie.

�No te extra�� que no
los volvieras a ver?

- Cre� que se hab�an ido de viaje.
- As� fue, con el Bar�n Von Schulenburg.

Ah, menos mal.

�Idiota! �Piensas que lo hice
para proteger a una porquer�a?

Mientras viva el mexicano puede saberse
que mi hija se cas� con un asesino.

Por que �l te ha visto.
Pero ma�ana...

Ma�ana el mexicano ya no existir�,
y podr� ocuparme de ti.

�No lo s�!
�No lo he visto!

- �Lo juro, no lo s�!
- �S� lo sabes!

�Donde est�?
�Donde?

- �Donde? �Habla!
- �No lo s�!

- �D� donde!
- �No toques a mi mujer, cerdo!

- �Que tienes, te han herido?
- �No es nada, no es nada!

- �Por favor huye, huye!
- S�, ya me voy, ya me voy.

�R�pido, r�pido te lo ruego!

- Te llevar� al mar.
- S� s�, adi�s adi�s.

Yo mismo dise�� el modelo de esta funda.

Tuve esa idea cuando me
di cuenta que en Am�rica...

la rapidez en desenfundar,
es m�s importante...

que la precisi�n, del disparo.

Ir� a ver si ya est�n
ensillados los caballos.

Est� saliendo el sol.
Parece una enorme mancha de sangre.

Lo digo para aquellos
que creen en los presagios.

Hay para elegir.

Espera, esas no.

�stas.

Con una de estas se puede
detener a un bisonte enfurecido.

Se abren al entrar en la carne.
�As�!

�No sab�a que la caza era mi pasi�n?,
despu�s del dinero por cierto.

He estado en �frica y en la India por
el simple capricho de matar animales.

Pero hay un tipo de caza
que no he practicado.

Con fusil quiero decir.

La cacer�a de hombres.

- Debe ser apasionante.
- Lo han visto.

Parece que se esconde
en la ca�ada.

- �Est� cerca?
- Los perros lo olfatearon.

Ustedes qu�dense aqu�.
�Vamos!

- �Alto!
- �Por que nos detenemos?

- Si se escapa no podremos agarrarlo.
- Si, pero es mejor dividirse.

Brokston, usted y el Bar�n
rodeen por la derecha.

T� no, te vienes conmigo.

Mejor desmontar.
Los caballos se resbalan.

- Estas nervioso.
- �Qu� quiere decir?

Que le puedes disparar a
cualquiera sin querer.

El mexicano es m�o.

Por all�. �Vete!

�Quieto!

Qu� est�pido soy, Americano. Estaba
convencido que eras un hombre honesto.

Pero veo que �l te envi�
a cerrarme la boca.

- �Qui�n?
- T� ya lo sabes.

S�. Ahora lo s�.

Tira el rifle.

No lo s� manejar.

- �Qu� ha pasado aqu�?
- �Est�s ciego?

�Y qu� est�s esperando?
�M�talo!

�Dispara!

Tuve varias ocasiones de matarlo.
Pero algo me ten�a inc�modo.

Y cuando se tom� la molestia
de venir para verlo muerto...

se aclararon mis dudas.

�Crey� que soy de los que
disparan primero y piensan despu�s?

- Se equivoc� esta vez.
- Corbett.

Eres demasiado
listo para ser senador.

Adelante Bar�n, es suyo.

A�n me queda
una bala, Brokston.

La cacer�a termin�.

�Lo ha visto Corbett?
�No ha terminado la caza!

�Puede tirar la pistola!

�A esta distancia, el cazador soy yo!

Me ha echado a perder
un gran negocio, se�or Corbett.

Pero no lo lamento, aunque no lo crea.

- Yo voy por ah�.
- Yo voy al norte.

- Cuchillo...
- Ah, de nada amigo.

�Pero...!

�No me habr�as atrapado nunca!
�Nunca!

�Nunca...!

FIN

Subt�tulos por zima.
Revisados por Neville.

Re sincronizado, retraducido y replanteado por
Rapsi (700 lineas)