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Un poco más ahí. Hacia... Ahí. Aquí.

Mierda.
Me da igual, da igual, métemela.

"Conducir ebrio es un delito
que puede ser sancionado

con penas de cárcel
entre seis meses y dos años."

"La norma penal no solo marca
los supuestos donde una persona

conduce ebria, sino también
los casos en los que el conductor

manejaba con efecto
de drogas tóxicas, estupefacientes

y sustancias psicotrópicas."

Ah.
¡Ah!

Oye, perdón. Perdona. Necesito pasar.

Lo siento. Eh...

¿Te importa? Se me cae todo.
No tardo, te lo prometo.

Gracias. Perdón.
Sí, sí, sí.

¿Sí?

Joder, qué asco.

María, es para mí. Ve tú.

Voy, voy.

Hola, buenos días. ¿Begoña Birao?
Sí, es aquí.

Arriba y abajo.

Ya estoy aquí, firmo yo, firmo yo.
¿Adónde me vas con ese culo?

A ver. Ah, ya está.
Ya lo ha firmado la compañera.

Muchas gracias.
Vale, vale, vale.

Uf. Nos vemos, ¿vale?

Te llamo, te llamo.
Perdón.

Vale. Gracias.

Tía, ¿qué te ha pasado?

Nada.

Pero...

El domingo.

Bueno, ahora me lo cuentas.
Coge de ahí.

Entonces ¿qué?

Que me di con la puerta
de una furgoneta que no vi.

Ibas borracha, ¿no?

No, estaba normal.
María, ¿normal?

Déjame, ya lo hago yo.

Tú sabrás lo que haces,
ya te lo digo.

A ver, déjame ver esto.

Joder, tía, es que
es una buena hostia esto, ¿eh?

¿Te duele?

No.

¿Seguro? Te doy un Gelocatil.
Vale.

Te voy a dar uno, sí.
Gracias.

Gua. Hostia. Por fin.

¿No te parece muy loco esto?
Madre mía.

Bueno, por 2.000 euros
que te ha costado, sí.

Uh, joder.

¿Qué te parece?

Es bonito.

Bueno, a ver, María, bonito
es decir algo muy vago, ¿no?

Esto es una pieza original, tía,
que es de Nick Ollis.

¿Sabes la "platja"
que te dije de Barcelona?

Pues lo mismo, pero de Madrid.
Está genial.

María, ¿estás bien?

Sí, que tengo un poquillo de resaca.

Ya. Bueno, pues agua.

Lo que so sé
es dónde coño lo voy a poner.

Voy a la habitación.
Porque esto es enorme.

María, acuérdate
que esta noche viene Carmen.

¿Qué Carmen?
Tía, Carmen, mi rollo de Barcelona.

Que viene a cenar
con un director, con Joan.

Bueno, el caso
es que quiero que lo conozcas,

porque te puede ayudar
con el tema curro y así dejas

la tontería esta de la floristería
y me ayudas un poco con los gastos,

maja, que esto no se paga solo.
Que sí.

Vale.
Pero ven a las 19:00, así me ayudas.

Tía, que ese tío es muy listo
y te puede ayudar.

Puri, ya estoy. Puri.

Hola.
Hombre. Ya era hora que vinieras,

¿no? ¿Dónde andas?
Lo siento por ayer, que tuve lío.

Ya.
Lo siento, perdón.

¿Qué te ha pasado aquí?
Nada, una tontería.

Entonces ¿cómo te has hecho eso?
No, una tontería,

que tuve que ayudar a Bego.
A saber dónde te has metido tú.

Un momentito. Espérate,
que te voy a dar un poquito de esto.

Esto me salvó a mí la vida, hija.
Uy, el vaso, guapa.

Los nervios que me pones tú, hija.

A ver, no pasa nada. Tú tranquila,
que yo he pasado por ahí también.

Estás que pareces un búho.
Esto está muy malo, Puri.

Qué cara pones.
¿Malo? Otras cosas has probado

y no dices que están malas.

María, ayer vi una estampita,
¿y sabes que pensé en ti?

María, ven.
Voy, voy.

Mira, mira, cariño.
Esta es la de San Expedito,

el santo de los imposibles.

Muchas gracias. Pero ¿entonces
no se cumple nada o qué?

¿Cómo que no se cumple? Al revés.
Hace que sean posibles las cosas,

María.

Mira, tengo aquí dos delantales.
A ver.

Ay.

A ver. ¡Qué bonito!

Uy, ¡qué alegría! Mira, me encanta.

Qué alegría, María. ¡Qué detalle!

Sí, bueno, son unos delantales.
Es que está precioso.

Sí, sí, sí.
Gracias, María.

De nada. Voy a ponerme a currar.

Ay, Puri, mira en qué condiciones
te traigo a esta pobre.

Yo creo que la riego muchísimo.
Esto yo creo que tiene arreglo.

No, no hace falta que pague, no.
Ya me pagará. Pero sí puede

contribuir con una monedita,
como todo el mundo.

¿Y esta hucha?
Para que esta se vaya algún día

a estudiar a París.
Qué maravilla. María,

que la parroquia también contribuye.
Muy bien.

Pues que tenga muy buen día, Puri.
Muchísimas gracias.

Adiós, señor Ramón.
Nos vemos.

Gracias.
A ti. Hasta luego.

Puri, deja de hacer esto ya, ¿eh?
Que es ridículo, joder,

es una tontería lo de la hucha.
Te dije lo de París en su momento

como quien dice Nueva York
o Londres. Es ridículo.

Bueno, hija. Hija, perdona.
No, perdón, no, Puri,

es una tontería que te dije
y has hecho una hucha. No me jodas.

Ni siquiera sé hablar francés.
¿Qué voy a hacer yo allí?

Si no sabes, aprendes, María,
no pasa nada. Si yo aprendí

cuando tenía 30 años a escribir.
Que ni francés ni pollas, Puri.

¿Me haces el favor de guardar
la puta hucha esa o la rompes

y te ahorras el dinero tú?
No sé, haz lo que te dé la gana.

Oye, niña, que en mi floristería
hago yo lo que me da la gana.

¿Sabes qué te digo?
La hucha se queda aquí donde está.

Hoy estás tonta.

Puri, lo siento
por lo de antes. Lo siento.

Es que hoy estás más rara.
Y hoy tampoco como aquí.

¿Y eso? ¿Adónde vas?
Tengo que hacer una gestión.

"Próxima estación: Tribunal.

Correspondencia con: línea 1."

¡Ah!

Como el tranvía típico de Lisboa.
Me he quedado como...

Stella,
¿no ves que me acabo de mudar?

Tía, haz una cosa.
Tómate una cerveza, deja el móvil

y relájate,
que parece que estás en otro sitio.

Sí, mejor.
Va, cuéntame algo tú.

Yo poco.
He ido a la floristería esta mañana.

Que Puri cada día
está más ciega y más sorda.

Ya. Pobre mujer.

Oye, coge los tomates
y los pones en un bol, porfa.

Para pan tumaca.

Bueno, pues lo de Stella
me está rallando, tía,

porque es que no entiende
que yo necesito mi espacio.

Yo a ella no le pido
ninguna explicación de nada.

Mira, por ejemplo, Carmen.
Carmen tiene una pareja en Barcelona

y, tía, les va superbién
porque ellas tienen un pacto

y desde ahí...

Es una cuestión de responsabilidad.

Llegué a casa pensando en la cajera.

En su moño bajo,
en su sonrisa sin sonrisa,

su maquillaje extremo disfrazando
la imposibilidad de ser otra,

quizás una azafata de Iberia,
no lo sé.

Yo, yo estaba en el Día,
o sea, estaba en el súper Día.

Es verdad.

Estaba postrado delante
de mil opciones de papel higiénico,

fracasando como siempre
en mi decisión, y pum, pum, pum.

Se acerca.

Silencio.
-Thriller.

Suspense.

-Y antes de mirarle a los ojos, ¿no?

Leo, leo su nombre en el pecho,

Consuelo, y me dice:
"Chaval, que si estás dudando,

coge el de marca blanca.
Es que, además de ser barato,

limpia muy bien el culo".
Me dijo esto. Y yo sonrío.

Jaque.
O sea, Consuelo, sin filtro, ¿sabes?

Y nosotros pues...

Pues nosotros con tantos, ¿no?

Y al fin y al cabo, me pregunto,
¿no nos limpiamos todos el culo

y a veces nos manchamos la mano?

Y vaya vergüenza.
-Guau, Joan. Está muy guay.

-Perdón, o sea, una parida.
Joder.

O sea, fatal, horrible. Adiós.
Calla, que está muy bien, de verdad,

compartir estas cosas,
joder, está muy guay.

Joan,
papel de marca blanca, ¿sí o no?

-Pues... ¡Sí!

No, Consuelo
no tenía razón con todo.

-Me hace pensar, es que vamos
todo el día por la vida,

vamos por la calle:
"Un café, por favor".

No miramos a los ojos a la gente,
no nos hablamos.

Hay que ver,
hay que mirar, hay que, no sé.

-Ya.
-No sé, coger el autobús

y mirar a quien tienes delante.
Decir: "Vale, una persona", ¿sabes?

Que has venido
a Madrid en autobús de línea.

No.
A ver, es que yo también hablo

y luego "sorry". No,
he cogido el AVE. He cogido el AVE,

porque es más rápido.
En AVE estás en un momento.

Claro. Y así ha llegado antes.
Ay, el amor.

Pues nada, propongo
un brindis por Consuelo, ¿no?

Por decir lo que le diría
a cualquier persona.

Venga, por Consuelo, ¿no?
-Me parece monísima Consuelo.

-Un encanto.
Es "cute" Consuelo.

"Cute".

-Bueno, por Consuelo.

Um, Joan,
María también escribe, ¿eh?

¿Sí? Hostia, qué bien.
No, no escribo.

Sí, sí.
Es que no escribo.

No sé qué está diciendo esta.
Oye, ¿puedes leer algo?

-Porfa.
Que no escribo, que no escribo.

Pero un momento, ¿qué escribes?
Gilipolleces, o sea, no...

-Qué va.
-No, pero un momento,

aunque escribas gilipolleces,
siempre se habla de algo.

-En el momento en el que escribes,
ya eres escritora, confía.

Vale.
Bueno, pero si no quieres leer,

no pasa nada. De puta madre.
No, no.

Mira, voy a buscar
un poco más de vino, ¿no?

Que estamos ahora ya...
Vale, venga.

-Sí, porfa.
-Yo creo que está muy bien

esto de que escribas, que tengas

algún otro espacio dentro.
Es que da igual, no sé.

Mira, Donna Haraway, por ejemplo,
ella era zoóloga, ¿me entiendes?

Con los putos chimpancés
y escribió "El manifiesto ciborg".

-Top.
-Es fantasía este libro.

-Peta la cabeza.
Es un ensayo increíble, político,

o sea, como mito político
del feminismo, del socialismo,

materialismo, monarquía, ¿sabes?
Es muy guay.

-También creo que somos
como una generación muy polifacética.

-Buscavidas.
Venga, va, el vinito.

# Vinito por aquí. #
Venga, va.

No, no me más.
-Es verdad, que trabajas.

Sí, sí. Me levanto a las 08:00.

¡Un Baileys para las 08:00!
-Salud.

Fuerza.

Madre mía.
Un poquito más de vinito.

Venga yo.
Está bueno, ¿verdad?

Amor.
Oye, y tú, tú eres actriz, ¿no?

¿Eh?
Que si eres actriz, ¿eres actriz?

Sí, sí.
No. Hice unas series como actriz

que eran una puta mierda, la verdad.
Bueno, pero...

Me parece que te he visto
como en una publi o algo.

No, publi yo no hago.
Publi ni de coña, vamos.

María, cariño,
que Joan es director de publis.

No, no. Pero no, no, un momento,
estoy totalmente de acuerdo,

la publi me da asco.
Mierda mundo, ¿eh?

Perdona, ¿eh?
No, no, tranquila.

¿Y a qué te dedicas ahora?

Pues esperando básicamente
a entrar en la cárcel.

¡Qué trol!

Qué va, qué va. Hostia, no.

-Guau, qué fuerte.

-No, está bien.
No, trabajo en una floristería

que iba a cerrar en mi barrio.
Qué guay.

-Ah. Muy bien, sí, sí.
Joder, sí, qué iniciativa, ¿no?

-Súper.
-Está muy guay como la iniciativa

de, no sé, de conectar
un poco con la natura...

Bueno, no es lo mismo
que la floristería, pero mis padres

tienen una casa en el Ampurdán,
preciosa, y tienen allí el huerto

y, joder, a veces voy
como a desconectar de este mundo

de mierda de la publicidad.
Al final es un trabajo, yo que sé.

Sí.
Oye, ¿queréis un poco de porro?

Igual está un poco fuerte.
Sí.

Bueno, pues...
Vamos a encendernos el porro,

porque...
Ya podemos ir...

Pues podríamos ir.
Total.

Te encantará.
¿Quieres un poco?

No, no, gracias.

Bebe un poco. Te ayudará.
Gracias, ¿eh?

Ay.

Estoy bien, estoy genial.

Ya. Estás genial.
Como tú, tú también estás genial.

A ver.

¿Estás bien? Hostia, puta.

Vale.

Joder. Aúpa, aúpa. Una mano.

Joder, María.

Vale, vale, vale.

Da igual, da igual.
Cojo agua.

Se ha pillado un trancazo.
No, no, ya, ya.

Al mezclar el porro...
María.

A mí me ha pasado, es horrible.
-No pasa nada.

-Se te va a pasar.

Perdón, ¿eh? Lo siento, perdonad.
Os podéis ir, me quedo yo con ella.

No, no, tranqui, tranqui.
Nos quedamos un rato.

Bueno, se sabe mal.
Ya me quedo yo con ella.

No, me quedo yo, tranquilas.
Ya puedo yo, sí. No pasa nada.

Que puedo ir yo, que estoy bien.
Que no, María, no estás bien.

No estás bien.
Que sí, que sí, que estoy perfecta.

¡María! María, nada,
que espero que te recuperes, ¿vale?

Un abrazo, nos vemos.