All language subtitles for Ulysse 1954

ESTA ES UNA HISTORIA DE UN HOMBRE
QUIEN REGRESA A CASA A VER A SU ESPOSA...

Y A SU HIJO DESPUES DE LA GUERRA

UNA VEZ DESTRUIDA LA CIUDAD DE SUS
ENEMIGOS VIAJA DE VUELTA A SU HOGAR

PERO NEPTUNO PROTECTOR Y
DIOS DE LOS CONQUISTADOS

IMPIDE QUE VUELVA CON LOS
SUYOS POR MAS DE 10 A�OS

ESTA ES LA HISTORIA DE ULISES
QUIEN DESAFIO LA IRA DEL DIOS

PARA CONTINUAR SU VIAJA A ITACA DONDE
SU ESPOSA PENELOPE ESPERABA... Y ESPERABA.

Vamos, m�rchense ahora, muchachas.
m�rchense.

El d�a ha llegado a su fin.

Permanezcan en sus cuartos.

No sigan el ejemplo de Melanto
y las otras esclavas, que para satisfacer..

..la vanidad de los hu�spedes, han traicionado
las leyes de esta casa. Marchad.

�Euriclea!

�Euriclea!

Esta tarde el sol ha descendido sobre el mar,
entre una cortina de nubes turquesas.

Y en el �ltimo instante una gran sombra negra,
que parec�a una vela...

..la ha cubierto por completo.

�Qu� significa eso, Euriclea?

Durante a�os he intentado en vano
averiguar en los colores de las nubes,..

.. en el vuelo de los p�jaros
y en la sangre de los sacrificios,

..cu�ndo regresar� Ulises.
No debes preocuparte, Pen�lope.

�C�mo podr�a evitarlo?

Cuando la luz comienza
a abandonar el cielo..

..y la noche se extiende
negra y silenciosa,

..mi angustia y dolor
se hacen m�s fuertes.

A veces creo que no podr� resistir m�s.

�Los oyes?

�Son los pr�ncipes: mis pretendientes!

Llevan a�os invadiendo mi casa
como si fueran perros hambrientos.

Destrozan todo lo que encuentran, beben
y profieren gritos. Y ya son muchos a�os.

- Eufemio canta para ellos.

Desde hac�a 10 a�os, los griegos
asediaban Troya.

Hasta que un d�a, cansados y desilusionados
abandonaron el campo de batalla,

dejando s�lo sobre la blanca arena,
un gran caballo de madera.

�Oh, Troyanos! �Por qu� lo trasladasteis
dentro de vuestras murallas?

�Acaso no sab�ais que en el interior
de su vientre hab�a griegos..

... comandados por el astuto Ulises?

�Acaso no lo sab�ais, Troyanos,
que insensatamente metieron el caballo...

... y alegres por la victoria y la paz,
se pusieron a beber?

Porque al llegar la noche,
Ulises sali� del interior del caballo..

.. con todas sus tropas griegas que,
amparadas en la oscuridad de las tinieblas...

..abrieron la gran puerta sagrada de la ciudad.
Y el ejercito entro.

En la noche la ciudad de Troya
fue saqueada.

e incendiada.

Esa noche los troyanos murieron
y fueron derrotados.

fue grande la soberbia de Ulises
Pero lo fue mas la matanza,.

Subieron hasta el templo del dios Neptuno,
rey de los mares y protector de Troya

... y derribaron su estatua.

Entonces, la profeta Casandra
maldijo a Ulises:

"Vosotros malditos,
griegos profanadores,..

.. y t� Ulises, seas tres veces maldito.

Que la ira de Neptuno
caiga contra ti.

Nunca m�s encontrar�s la paz y morir�s
en las profundidades de los mares".

�Basta!

- Basta, Eufemio!
- �La reina!

- Mira, es Pen�lope!
- �La reina!

�Pen�lope!

Hac�a meses que no bajaba
a reunirse con nosotros.

Entona otro c�ntico.

Me resulta demasiado triste
escuchar estas lejanas historias.

Pero no lo son para nosotros, Pen�lope.
Nosotros no vivimos de recuerdos.

�Callad! Respetad
al menos su dolor.

Si fuese al menos un dolor por un difunto,
acabar�a desapareciendo tarde o temprano.

Y as� te decidir�as a escoger
a uno de nosotros.

Nadie sabe nada de Ulises.
Nadie puede cantar su muerte,

..si no ha visto primero c�mo
su cuerpo se quema en la hoguera.

Pen�lope, hasta las fantas�as
de un cantor te perturban.

En el fondo de ti misma dudas, de algo
que nosotros sabemos con certeza:

�D�nde est� Ulises?
�En qu� tierra se halla prisionero?

Hab�as prometido al menos, que ibas
a fijar la fecha de tu boda,

.. tan pronto como
terminaras de tejer tu lienzo.

Pero aqu� nos tienes desde hace tiempo,
esperando que termines de tejer algo...

.. que parece que nunca tiene fin.

Es el recuerdo de Ulises lo
que me impide obrar con presteza:

.. el dolor y las l�grimas
velan mis ojos...

.. y las manos se mueven lentamente.

�Cu�nto mejor ser�a que escogieses
a uno de nosotros!

- Ninguno de ustedes vale lo que mi padre.
- �Acaso no somos hombres tambi�n?

�Acaso no tenemos fuerza, valor
y un coraz�n noble?

�Lo que ten�is es un apetito insaciable!

�Sab�is cuantas cabezas de ganado
os hab�is comido? La mitad de lo que pose�amos.

�Y a�n ten�is hambre! Est�is dilapidando
la hacienda de Ulises..

.. y est�is ensuciando su morada,
con vuestros banquetes.

- �No eres qui�n para juzgar, viejo!
- �Dice la verdad!

Han invadido nuestra casa
y acabado con nuestra paz.

- He debido prometer....
- No se trata de ninguna promesa.

Es la suerte que corre el reino de �taca,
tras demasiados a�os sin un rey.

�Es verdad!

Ninguno de ustedes merece serlo.

Ahora seguiremos teniendo
un rey en la niebla: una sombra.

Incluso tu mismo pueblo
est� cansado, Pen�lope.

Las relaciones entre mi pueblo y yo
es algo que no te importa.

Vosotros s�lo sois extranjeros
en esta isla.

�Y yo a�n soy la Reina aqu�!

El pueblo de �taca ama a su reina,
y comprende su dolor.

Eres demasiado joven para dormir sola
con tus recuerdos.

�Ulises est� vivo!
�Ulises volver�!

Y ese d�a pagar�is caras
todas vuestras ofensas.

Bebe, Eufemio. Acl�rate la voz
y vuelve a comenzar tu canto.

Empieza a partir
de la aparici�n de Casandra.

Quiero volver a escuchar
esas maldiciones.

�Leucanto! �Melanto! �Y ustedes tambi�n,
m�rchense de una vez!

�Son la verg�enza de esta casa!
�Que tienes en vez de coraz�n?

�C�mo te atreves a juntarte
aqu� con todos estos?

- �Qu� derecho tienes para dar �rdenes?
- Soy el hijo de Ulises.

Eres s�lo un muchacho que
ha perdido la cabeza.

Me bastar�an s�lo 10 hombres armados,
para echaros de esta casa.

�Ven, muchacho! Ven a luchar
contra s�lo un medio hombre.

�Ven!

�Largo de aqu�!

�Salta, muchacho!

�Atenci�n, Tel�maco!
�Salta!

Vete, vete.
�Corre con mam�, chiquillo!

�Corre, Tel�maco!
�Escapa! corre Tel�maco

Un d�a, Pen�lope,
acabar�s de tejer ese tapete...

... y deber�s escoger un marido
entre toda esa gente.

�Y que puedo hacer? promet� casarme
con uno de ellos cuando acabara.

Solo me casare con uno de
ellos cuando el tapete este terminado.

Espero nunca poder terminarlo.

- �Madre!
- �Qu� pasa Tel�maco? �Ha sucedido algo?

- Quiero irme, madre.
- �Irte a d�nde?

Fuera de aqu�. No resisto m�s
sus insultos y maldades.

Quiero buscar a mi padre.

- T� tambi�n quieres abandonarme.
- Necesitamos acabar con esto, madre.

Necesito estar seguro. Ir� a ver a
los viejos compa�eros de Ulises:

... a N�stor en Pilos
y al rey Men�alo en Esparta.

No me dejes sola
con toda esta gente.

�Crees que mi padre est� vivo?

S�, Tel�maco.

Dime la verdad:
tampoco t� lo crees.

No puedes dejarme.
�No puedes dejarme, hijo!

�No me dejes! Si t� tambi�n
me abandonas, �qu� me quedar�?

Tu sola presencia y tu voz,
desde que eras un ni�o...

... han ocupado toda mi soledad.

En tu cara y en tu mirada he vuelto
a ver las de Ulises...

... y he encontrado la fuerza, que sino
me hubiera abandonado.

Qu�date conmigo, Tel�maco.

Si quieres que resista,
no me dejes.

Debes resistir, madre.
Debes seguir creyendo.

�Qu� importa lo que yo creo?

Ulises est� lejos.

�sta es la �nica verdad que hoy sabemos.

Y as� est� tela se va tejiendo de d�a
y destejiendo de noche.

Y as� he seguido enga�ando
a los que esperan..

.. y esperando yo misma.
�Ulises!

�Nausicaa!

�Oh!

Nausicaa, �qu� haces?

Nausica �A d�nde vas?

- Mira, es un hombre
- Fedra es un muerto.

- �D�nde?
- Detr�s de las rocas

�Cuidado, Nausicaa!
No lo toques

Esta muerto.

- �Est� vivo!
- �Est� vivo? Mira, se mueve

�D�nde estoy?

En el reino de Alcinoo.
Yo soy su hija.

- �Que parte del mundo es este?
- En la isla de los Feacios. �No la conoces?

Esta cerca de �taca.

- ��taca!
- �C�mo? �No conoces �taca?

�Qui�n eres?
�C�mo te llamas?

No lo se..

- ... no consigo recordar mi nombre
- �No te acuerdas del nombre de tu patria?

No recuerdo nada.

�Cl�o! �Ariadne! Llama a Calops.
Debemos llevarlo al palacio.

Ten cuidado, Nausicaa.
Podr�a tratarse de un dios.

Dicen que los dioses a veces
toman forma humana.

Espero que no.

Querr�a que fuera un hombre.

Alcinoo, t� conoces mi habilidad para
usar hierbas y preparar pociones.

Mis remedios no pueden
ayudar al hombre de la playa.

El extra�o no recuerda su pasado.
No tiene memoria

He sanado su cuerpo, pero no
su mente. No soy ning�n dios.

�Le has sacado sangre?

Esculapio dice que
la sangr�a no es una cura,

sino un modo de probar que
uno es m�dico, a expensas del paciente.

�C�mo puede suceder que
uno pierda todos sus recuerdos?

Existen dos posibilidades:
o los dioses le han causado el olvido...

... o ha sido �l quien ha olvidado todo, para
alejarse de sus pecados y delitos.

- ... o quiz�s que...
- Yo estoy por la segunda hip�tesis.

�Padre!

�Padre!

�Aqu� est�!

�Que tu reino crezca en poder
y t�, rey, en sabidur�a!

Mi m�dico dice que has
perdido la memoria completamente.

- No recuerdo nada.
- Pero sabes saludar a un rey.

Tu noble proceder me hace pensar
que has sido recibido por otros reyes.

- Como a mi �No lo recuerdas?
- No recuerdo nada.

Nada.

Es extra�o.

Quienquiera que seas,
vas a ser mi hu�sped.

Den las �rdenes para el banquete,
las danzas y los juegos.

�Bravo!

�Qui�n quiere luchar contra Krakos?

�Ve, t�!

No, yo no voy.

�Qui�n quiere luchar contra Krakos?

�Qui�n quiere luchar contra Krakos?

�Bravo, Krakos!
�Viva Krakos!

�Viva Krakos!

Un momento, amigo.

- Pero �qui�n es �ste?
- �Qui�n es?

- Es el hu�sped del rey.
- Bravo!

No deber�as permitirle que luche.

�Por qu� no? Un golpe de Krakos
en su cabeza podr�a ayudarle.

Conoce algunas artima�as.
Debe haber sido un luchador.

Diomedes cree que ha sido soldado.

- Soy un hueso duro de roer, �no?
- Ya veremos.

�Disc�lpenme!

�Derr�balo!

�Derr�balo!

�Padre!
�Ha vencido! Ha vencido!

S�, Nausicaa, ha vencido.

�Por qu� me miras as�?

Porque veo que mi hija se est�
convirtiendo en una mujer.

Un h�roe, �eh?
�Acaso alguna vez hab�is conocido h�roes?

Agamen�n, Ayax, Ulises...
�Esos s� que eran h�roes!

Ulises ten�a una mano
tan grande como un mazo.

Le he visto destrozar la espalda
de un buey de un pu�etazo.

Este hombre no lo hace mal,
pero no se puede comparar a los h�roes.

�ste es el regalo que el rey Alcinoo
te ofrece por la victoria.

Dale las gracias a tu rey.

Y �ste es mi regalo.

Es un ung�ento raro.

Huele muy bien, �verdad?

Como la primavera.

Esta hecho con una f�rmula
secreta, m�gica.

Me la ha vendido una mujer,
que habita al pie de la monta�a...

... y me ha dicho que en una sola noche
puede curar cualquier herida..

... e incluso devolver la juventud.
- �La juventud?

Dame un poco de eso;
creo que la necesito.

La juventud...

- Este brazo no es el de un muchacho.
- T� eres el m�s joven de Feacia.

Para mi naciste hace tan s�lo
unos pocos d�as en la playa,

... cuando has abierto los ojos y
me has mirado.

Te llamar� Stenos, "el fuerte".

Y te doy la bienvenida.

�Qu� tienes?

�Qu� te pasa?

No lo s�.

Ha sido como si...

..un nombre, una voz...

Era mi nombre, era Nausicaa.

�Nausicaa?

S�, tal vez lo era.

Leodes 45 pasos.

Eurimaco 48.

- �Buen lanzamiento, Eurimaco!
- �Bravo!

�Alguien duda a�n de mi victoria?

Esto se ver� cuando se fije
el d�a de los esponsales.

Que espero que sea fijado muy pronto, una vez
que ha sido descubierto el enga�o de la tela.

T� te casar�s con Melanto como reconocimiento
y yo me casar� con Pen�lope.

�Ahora!

- �Qu� se est�n jugando?
- La dote de Pen�lope.

- � La dote de Pen�lope?
- �Acaso se casar� con uno de ustedes dos?

Por supuesto

Pares. He ganado yo.

Me quedan a�n los establos
y la mitad de todas sus armas.

- A�n puedo rehacerme.
- He vuelto a ganar.

�Oh, Pen�lope!
He perdido toda tu dote.

Si me escoges a m�, puedes estar segura
de hallar un amor desinteresado.

�Sucia esp�a!

Har� que te arrepientas de haber revelado
el secreto de la tela. �Maldita esp�a!

- No...
- �Basta!

�Y ahora, m�rchate!
Vete para siempre de esta casa.

- �Y ahora que podemos hacer?
- Nada. Tel�maco, tu madre..

... deber� casarse con alguno y eso ser�
la muerte para todos nosotros.

- �Tanto miedo tienes de morir?
- Yo ya soy viejo...

... pienso s�lo en tu salvaci�n
y en la de todos los de Itaca....

Basta, Mentor. Su c�lera es justa,
aunque sea in�til.

�Mira, otro que llega, como
las moscas van sobre la miel!

- �Lo conoces?
- No lo veo bien.

Es un buen auriga,
cuida bien a sus caballos.

- Antinoo de Cefalonia.
- �El hijo de Eupite?

- �Un miserable!
- No hay sitio para �l. Somos ya demasiados...

... para un solo lecho.
- �Oc�pate del carro y los caballos!

- �Qu� haces aqu�?
- Debo hablar con Pen�lope.

Ninguno de nosotros le ha
faltado al respeto..

.. hasta el punto
de subir a sus habitaciones.

�Ah, s�? �Pues ser� el primero!

- �A d�nde vas?
- �D�jame pasar!

- �Qui�n eres? �Resp�ndeme!
- Soy Tel�maco, el hijo de Ulises.

No temas, Tel�maco,
voy a ser tu amigo.

�Te saludo, Pen�lope.

Tu belleza supera
cualquier fantas�a de un poeta.

�Qui�n eres?

Soy Antinoo,
de la isla de Cefalonia.

S� que el enga�o de la tela
ha sido descubierto, Pen�lope.

�Y qu� buscas en mi casa?

�A ti!

Pero no he venido como los otros,
en busca de tu fortuna,

... o para dormir bajo tu techo
largos meses.

No he atravesado el mar,
s�lo para mirarte a los ojos Pen�lope,..

... sino para compartir tu destino.

- �C�mo te atreves a hablarme as�?
- Porque s�lo yo conozco tu soledad.

S� que fuiste viuda, a�n antes
de que fueras esposa.

El fantasma de Ulises ha habitado
largamente en esta casa.

Ahora hace falta un hombre que mande,
que acabe con la locura de los pretendientes...

... y que te devuelva la vida, Pen�lope.
- �Por favor, no sigas!

- Puedes quedarte como hu�sped, si quieres.
- No estoy aqu� para eso.

No necesito ninguna habitaci�n.

Quiero que t� decidas el d�a,
en el que va a acabar tu soledad...

.. tu dolor, tus largos silencios, Pen�lope.

D�jame un d�a para pensar.

�Qu� diferencia puede haber en un d�a?
�Decide ahora, Pen�lope!�Ahora!

Con la luna nueva,
para los juegos de Apolo.

Tomare mi decisi�n.

�Tel�maco!

Tel�maco!

�Euriclea, ve a buscarlo!
Y tr�elo de regreso.

Y ahora, m�rchate. �M�rchate!

Tu larga espera ya ha acabado, Pen�lope.

D�jame solo, D�jame.

Esc�chame Tel�maco.

�Qu� quieres? No has o�do
las palabras de ese hombre?

�No has o�do c�mo mi madre
fijaba el d�a de sus esponsales?

- �Hasta mi madre ha traicionado a Ulises!
- No digas eso.

No podemos resignarnos.
Debemos de hacer algo.

�Hacer algo? Si s�lo somos
una anciana y un muchacho.

- Encontraremos a alguien
que a�n crea en Ulises. - �Pero a qui�n?

Otras mujeres y muchachos
como t� y como yo.

�El arco de Ulises!

�El arco que s�lo �l sab�a tensar!

Eres diestro en estos oficios.

Es curioso c�mo las manos
pueden recordar..

.. lo que la mente ha olvidado.

- �Lo utilizar�s en los juegos de hoy?
- No lo s�.

Otra victoria tuya ser�a
un bello regalo para tu novia.

De 4 a�os Nausicaa comunic� a su padre,
que s�lo se casar�a con un guerrero.

Un guerrero...

Quiz�s t� lo eres...
Ser�a el mejor regalo de boda..

.. poder recordar a todos
tu nombre y tus haza�as.

Mi nombre...
Mis haza�as...

- D�a y noche penetro en la oscuridad busc�ndolos.
- En casos como �ste...

- ...los remedios son lentos y las curas largas.
- �Vete, Diomedes!

Como quieras.

Como quieras.

"Tambi�n la soledad- dice Esculapio-
puede ser una excelente medicina" .

Una excelente medicina.

�Qu� hermoso d�a para un matrimonio!

- Espero que seas tan feliz como lo somos nosotros.
- �Por qu� no hab�a de serlo?

Las muchachas no acostumbran a conocer
al hombre con que se casan..

... pero lo raro es que una muchacha se case
con un hombre que no se conozca a s� mismo.

�Qu� otras cosas deber�a conocer?

Si un �rbol es hermoso y sus frutos dulces,
�qu� importa c�mo sean sus ra�ces?

�Oh, qu� fea que estoy hoy!

�Y si no le gusta como me veo?

Y si en el momento de entrar en el templo,
leyese una sombra de duda en sus ojos..

... no podr�a soportarlo.

�Quiero que me vea!

Nausicaa, �d�nde vas?
No puedes hacer eso.

Padre, es una costumbre
vieja y est�pida..

..tener a los enamorado separados
el d�a de su boda.

�De que te sirve ser rey, si no puedes cambiar
una vieja costumbre cuando lo deseas?

Al menos esta vez,
hazlo por tu hija.

Adem�s no ir� sola.
�Clisia! �Attide! �Vengan conmigo!

�De acuerdo, acomp��enla!

�Pronto!

�Stenos!

Mi nombre

Mi vida..

�Quien soy yo?
�Quien soy yo?

"Ustedes malditos,
griegos profanadores,..

Neptuno se vengara

Y acabara con ustedes.

No dejen que se apague el fuego.

Hubieras hecho un sacrificio a Neptuno.

El era el dios protector de
la ciudad de Troya

No es momento para lamentarse.

Deber�amos hacer un sacrificio.

Y que quieres que sacrifiquemos?

Ve all� a ayudarlos.

Vamos, andando.

Izen esa vela lo mas r�pido posible.

Nos estamos hundiendo.

Mira, el m�stil esta por romperse.

Tiren toda la carga por la borda.

Todo el oro, estas loco.

Y que otra cosa podemos hacer?

El oro no.
-Tirenlo.

Es lo que nos compensa
todos esos a�os de guerra con Troya.

En unos minutos mas estaremos en
el fondo del mar, as� que ya no importa.

Tiren toda la carga por la borda.
r�pido, toda la carga.

Hubieras hecho sacrificios a
Neptuno, Ulises.

�Aqu� no hay ning�n Neptuno,
s�lo hay viento, agua y muerte!

�Tira t� tambi�n la carga al mar o te pesar�!

�Neptuno!.

�Ay�denme amigos, la vela!

�Cuidado!

�Todo al mar!
�Pronto!

�Todo al mar! �Todo al mar!

�Buena caza, Ulises!

Volveremos con agua
y comida abundante.

�Preparad el fuego, para
ofrecer sacrificios a Atenea!

�Silencio!

- �R�pido! �Corre!
- El hambre nos nubla la vista.

Es in�til que corran tras �l,
lo perder�n otra vez.

�Eh, miren lo que encontr�!

Parece la huella de un pie enorme.

- �Mira! �Otra!

- Son las huellas de un dios.

Tambi�n podr�an ser las
de un hombre con pies muy grandes.

- No nos quedemos aqu�, Ulises,
volvamos a bordo.

El miedo te hace olvidar
el estomago, �eh?

Nos iremos cuando hayamos encontrado alimento
para nosotros y nuestros compa�eros. �Vamos!

�Uvas!

�Ulises, son uvas!

�Mira cu�ntas hay!

- �Ovejas!

�D�nde estamos?

�Es enorme!

- Esto es leche.
- �Leche?

�Miren all�!

- �Vamos! �Vengan!
- �Las ovejas!

�Dame esa tan grande!

�Prueba este cabrito!

�Al fin podemos comer!

�Qu� bien!

�Ulises, mira!

�Excelente!

Ll�vate esa leche tambi�n.

�Ven conmigo!

Pero, �que lugar es este?

�Lista para comerla!

�T�, qu�tale la piel!

No me gusta este sitio, Ulises.
Acu�rdate de las huellas.

No tengas miedo.

�Mira qu� clase de queso!

Dame la lanza.

Sostenla con firmeza.

Hagamos vino.

�Es mejor que la leche!

�Bien!

Donde no hay vino,
no hay fiesta.

Tomemos toda la comida que podamos..

- ... y vay�monos lo antes posible, Ulises.
- �Olvidas las necesidades del est�mago?

- Pero reflexiona....
- �Come!

- T�, trae un poco de le�a.
- �sala bien.

�Qu� asado m�s bueno!

�Vamos, dense prisa!

�Tengan cuidado con esos quesos!
�Hay mucha gente hambrienta que nos espera!

�Dense prisa, vamos!

Euriloco, comprendo
perfectamente tus prisas...

.. pero no deber�as perderte una cosa
tan preciosa como el vino.

�Miren!

�Socorro!

�No se muevan!

�Qui�nes son?

�No me contestan?

- �Deben ser ladrones!
- No somos ladrones.

- Somos griegos,y volvemos a la patria desde Troya.
- �Ah, griegos!

�Bienvenidos!

Te ruego que recuerdes
las leyes de la hospitalidad,

... las leyes del padre Zeus.
- �Y qu� me importa a m� Zeus?

Yo soy Polifemo,
hijo de Neptuno.

�El hijo de Neptuno!
�Estamos perdidos!

�No, no, piedad!

�Api�date de nosotros!

Pero,�qu� duros de
comer son estos griegos!

�Qu� carne m�s mala!

�No, Ulises! �A d�nde vas?

Tengo algo que convierte a un griego
en un manjar apetitoso.

- �Y qu� es?
- Vino.

�Vino? �Parece sangre!

�Y lo es!

Es la sangre de la tierra.

- �Y por qu� me lo ofreces?
- Porque es bueno.

Ver�s c�mo te gusta y en agradecimiento
nos dejar�s marchar.

Ya veremos.
Deja que lo pruebe.

�Oh, qu� bueno!

�Qu� bueno!
�C�mo se hace?

�Con uvas!

�Uvas? �Ah, esos granos rojos,
que crecen al sol!

Me gusta. �Dame m�s!

- Se ha acabado.
- �Qu� se ha acabado? Yo quiero m�s.

Tendremos que salir a coger
racimos para hacer m�s.

�Polites! �Gioves! �Vengan!

Llenaremos con vino todos los odres
y cubos que encontremos aqu�.

�P�rfidos! Quieren ir afuera,
para traer las uvas.

Yo ir� por las uvas
ustedes aqu� se quedaran.

�Qu�dense aqu�!
�Est�n tranquilos.

�Volver� pronto!

�Qu� hacen?
�Se han vuelto locos?

Ni entre cien podr�amos mover
una roca tan enorme. �Vengan aqu�!

- �Y ahora qu� hacemos? - Estamos atrapados.
- Nos matar� a todos.

Ya te lo hab�a dicho. Nos hemos quedado
demasiado tiempo aqu� y no podremos salir.

- Pero �qu� quieres hacer?
- D�jame a mi.

Ayudadme con esta barra,
antes de que regrese.

- Abajo! Despacio!
- Cuidado - As�.

�Vamos adelante! �Adelante!

Ahora junto a la pared.

�Muy bien! �Leucos! �Polites!
�Afilemos la punta!

�Dame esa hacha!

Pero, �qu� quieres hacer?

Todo lo posible
para salir de aqu�.

- �Vas a matarlo?
- �No!

Si lo matamos,
�qui�n mover� el pe�asco?

Tengo una idea mejor.

Recojan le�a y preparen un buen fuego.
�T�, ay�dale!

Esta regresando.
Vamos, p�nganla all�.

Esc�ndela, con la punta
dentro del fuego.

Aqu� est�n las uvas.

�H�ganme mas vino!

�Que pasa?
Les doy miedo, �verdad?

No se preocupen, me alejar�
de ustedes.

�Bueno, y que esperamos!

�Hagamos vino!

Hagamos mas vino.

- No tengan miedo.
- �Vamos, r�pido!

�Llenen otra!

�Vino para Polifemo,
hijo de Neptuno!

�Quiero mas vino!

-�Denme m�s!

Debemos complacer a
nuestro anfitri�n Polifemo. �Vamos!

�Bien!

�M�s! �M�s! �M�s!

�M�s vino!

�Quiere m�s a�n!

�Vino para Polifemo,
hijo de Neptuno!

M�s, vino. M�s, vino de prisa.
M�s vino, de prisa.

�Vino! �Vino! �Vino!

�Bravo, griego!

Gracias a ti, he averiguado lo que eran
esos peque�os granos rojos.

En prueba de reconocimiento,
te comer� el �ltimo.

�C�mo me comer�s: crudo, hervido,
con pimienta o asado?

Ba�ado en este r�o de fuego,
que me has vertido dentro.

�Despacio!

�Estoy ciego!

�Estoy ciego!

�Cuidado, que viene!

�Malditos! �D�nde est�n?
�Mi ojo!

�Los matar�!
�Los matar� a todos!

�Padre Neptuno, ay�dame!

�Miserables!

�Miserables!
los destruir� a todos

�Eh! �Estoy aqu�!

- �Estoy aqu�!
- �Malditos!

- �Eh! �Estoy aqu�! �aqu�! �aqu�!
- �D�nde est�s?

�Vamos, Ulises!

�Adi�s, Polifemo!
Acu�rdate de nosotros...

- ... y del vino que hicimos en tu gruta.
- �Basta, Ulises, sabr� donde estamos!

- �Qu� te pasa, no temas! �Qui�n es el amo ahora:
Neptuno o Ulises?

�El dios con todo su poder
o el hombre con su astucia?

�As�, ciego borracho, grita!

�Adelante, cubre el mar con tus
ciegas piedras! �T�rame otra!

Y si tu padre te pregunta qui�n te ha
dejado ciego, dile: �Ulises!

�Ulises! El que destruy�
la ciudad de Troya,

.. hijo de Laertes
y rey de �taca!

�A los remos, amigos!
�Izen la vela!

�A toda vela!

�Alcen la barra!

�Sujetad!

- �Han chamuscado demasiado este cordero!
- �Un poco de agua!.

�Toma!

�Por aqu�!

No tenemos viento,
pero hay una buena corriente.

- Est�s contento, �eh?
- S�.

�No lo est�s tambi�n t�?

No lo s�. Hay dos
naturalezas diferentes en m�:

.. una que ama la casa,
la familia, la tranquilidad..

.. y otra, en cambio, a la que le gustan
los viajes, el mar abierto..

.. las extra�as formas de las islas desconocidas,
los demonios, los gigantes...

S�, Euriloco, cuantas veces
me hace sufrir la nostalgia..

- .. por todo aquello que nunca he visto.
- Te comprendo...

.. y por eso te sigo, aunque a veces
tiemble de miedo.

A veces yo mismo tiemblo.

- Hay un extra�o olor en el aire.
- S�, lo noto.

Un perfume seco y polvoriento,
como de flores muertas.

�Qu� silencio!

No se oyen ni los remos,
al batir el agua.

�Mira eso!

- �La roca de las sirenas!
- �Las sirenas?

�Si escuchamos su canto,
no podremos escapar!

Nos atraer�n a las rocas para destruirnos.
�Huyamos, Ulises, ahora!

- Huyamos
- Ya es demasiado tarde.

�Pronto, preparen la cera
y tapen los o�dos de todos!

�D�ganles que no miren a las rocas
y que remen todos!

�Que remen como nunca en su vida!

S�lo esto puede salvarnos.
�Vamos!

No tengan miedo, no miren
a las rocas. �Remen!

M�tanse esto en los o�dos.
�A d�nde vas t�? �Pronto, a los remos!

�Polites!

- �Qu� quieres, Ulises?
- �tame fuerte al m�stil.

- �Que dices? Y diga lo que les diga,
no me obedezcan - �Qu� quieres hacer?

- Escuchar su canto.
- �Pero, te has vuelto loco!

- ��tame al m�stil!
- Est� bien. T� lo has querido

- Lo m�s fuerte que puedas.

- �P�nganse la cera en los o�dos!
�T� tambi�n, r�pido!

�M�s fuerte!

�Lo m�s fuerte que puedas!

- �No alcen loa ojos! �Remen!
- �Qu� haces?

- Me lo ha ordenado �l. -
- �Por qu�?

- Quiero escuchar su canto.
- �Est�s loco! �Ponte la cera!

- �Pontela!
- Tapen sus o�dos, antes de que sea tarde!

�Euriloco, la cera!

Ulises...

- Soy yo.
- �Pen�lope!

Nunca.

Tu largo viaje ha terminado

- �Est�s en �taca, Ulises!
- ��taca!

- �Hombres, suelten los remos!

Te espero desde hace miles de noches.

�No est�s cansado del mar y
de no dormir en tu lecho?

�Est�s en casa, Ulises!
�Est�s en �taca!

- �En �taca!
- �Dejad los remos, he dicho!

- Estamos en �taca. �Det�nganse!

- Padre, soy tu hijo, Tel�maco.
- �Tel�maco!

Soy tu hijo Tel�maco.

que te espera volver a ver.

Ya soy un hombre, , y a�n
no conozco el rostro de mi padre.

- �Tel�maco!

�Vuelve a casa, a tu reino!

con tu esposa.

- �Des�tenme!

- � Padre, no me dejes, padre!
- �Des�tenme!

- �Detente, padre!
- Est�s en �taca.

�Des�tenme, malditos!
�No oyen a mi mujer y a mi hijo?

�No me abandonen!

�No me abandonen!

�El peligro ha pasado!
�El peligro ha pasado!

�Se ha acabado el canto!

Ulises...

�Qu� has o�do?

Los dioses se burlan de nosotros
y no tienen piedad, Euriloco.

�Qu� terribles son sus enga�os!

Hay algo extra�o.

�Ten la barra a la izquierda!

Sucede algo muy extra�o: el viento
sopla, pero la vela no lo recoge.

La nave est� fuera de control.

- Debe ser la corriente.
- No es la corriente. Remamos a lo largo,

... pero somos arrastrados a tierra,
por una fuerza desconocida.

Nunca he visto una cosa igual.
No consigo controlar la nave.

- Que bajen la vela - �C�mo?
- Iremos a tierra. - �a tierra?

No, Ulises, no sabes lo que puede
esperarnos, detr�s de esas rocas.

No, pero descubrirlo ser� interesante.

�Arr�en la vela!

�Euriloco!

�Eur�loco!

�Euriloco!

�Euriloco!

�Polites!

�Polites!

Se han marchado, Ulises.

- �Qui�n eres?
- Circe.

- �Circe, la bruja!
- �Qu� palabra tan fea!

�Por qu� no la diosa?

�Has sido t� quien ha hecho
derivar la nave?

Estoy sola.

- �Qu� quieres de m�?
- Ayudarte.

Abastecer tu nave y enviar un buen viento,
que te pueda llevar hasta tu casa.

- �Por qu� motivo quieres ayudarme?
- Hace muchos a�os que los hombres arriban a mi isla..

.. hombres famosos por su prestancia
y por su hero�smo.

Y cada vez me he vuelto
a quedar m�s sola que antes.

Pero. cuando el viento
ha tra�do hasta m� tu nombre...

... y el eco ha repetido tus haza�as,
he aguardado tu nave, Ulises.

Y por primera vez, el eco y el viento
no me han mentido.

�Qu� tienes?

�Qu� extra�o!

La misma faz altiva,
la misma mirada de Pen�lope.

�Qu� extra�o!

�Por qu� extra�o? La diferencia
entre una mujer y otra..

.. no est� solo en la mente del hombre?

No. La diferencia es que Pen�lope..

.. no habr�a permitido
que un extranjero la abrazara.

�Ni siquiera a un extranjero
como Ulises?

�Hey!

�Hey!

�D�nde esta tu due�a?

�Por qu� no me respondes?
�D�nde est� Circe?

�Sordas y mudas! Cualidades ideales
para las esclavas de un sitio as�.

�Me buscabas, Ulises?

No te veo bien.

- �Por qu� tanta oscuridad?
- Para proteger tu sue�o.

No me gusta la oscuridad.

A bordo siempre duermo
en cubierta.

As�, el sol me despierta
al amanecer.

�m�rchense!

El sol ya est� alto.
Has dormido mucho rato.

Hac�a muchos a�os que no descansaba
en un lecho tan blando.

- �D�nde est�n mis compa�eros?
- Est�n aqu�, no temas.

Quisiera verlos.

M�s tarde. Hay tantas cosas que debes
conocer en esta isla.

No tengo tiempo; debo
proseguir el viaje.

�Polites! �Euriloco!
�Gioves! �Euriloco! �Euri --

�Qu� hacen aqu� estos cerdos?
�Afuera! �Afuera!

�Vamos, fuera!

�Por qu� no me respondes?

- �D�nde est�n mis hombres?
- Los est�s echando a patadas.

�Bruja!

�Has aprovechado mi sue�o,
para convertir h�roes en cerdos!

Ha sido m�s f�cil de lo que crees.

Desear�as hacer lo mismo conmigo, �verdad?
Pero no te resultara tan f�cil.

S� que odias a los hombres.
Quiz�s tambi�n me odias a m�.

�Devu�lveme a mis compa�eros!

No comprendes que si lo he hecho,
ha sido para alejarte de tus compa�eros..

... para que est�s tan solo.
como yo lo estoy.

�Devu�lveme a mis compa�eros,
diosa, demonio, bruja o lo que seas!

Es in�til retenerte,
si ha de ser como enemigo.

�Recobren todos su forma humana!

- �Ulises!
- �Ulises! �Te est�bamos buscando!

Pero, �d�nde has estado Ulises?

�C�mo se encuentr�n? �se sienten bien?

- �Claro! �Por qu�?
- Hemos comido - Y dormido.

S�lo me duele aqu�, como si hubiese
recibido un golpe.

Vuelvan a bordo.
Zarparemos dentro de una hora.

Si, Ulises tiene prisa por irse.

- Enviar� a la nave provisiones y presentes.
- �Gracias!

Preparaos para zarpar y no
perd�is tiempo. �Andad! �R�pido!

�Adi�s, Circe!

Te estoy agradecida por haber vuelto
mi isla menos desierta, al menos por un d�a.

- Debo partir.
- Lo s�. Te estoy diciendo adi�s.

Zarparemos en seguida,
antes de que amaine el viento.

El viento no se ha levantado a�n.

En mi isla no sopla nunca,
antes del crep�sculo.

�Antes del crep�sculo, dices?

�Oh!, no tiene sentido emprender viaje,
antes que se levante el viento.

Tendr�an que remar, hasta
partirse la espalda.

En el fondo,
son muy valientes.

Debo de tener
un poco de comprensi�n con ellos.

Te lo agradecer�n.

�Ulises!

�Bienvenidos, amigos!

- �Hace tanto que no nos vemos!
�Has recibido unas �nforas de vino?

Estamos cansados de comer y beber
y de vivir ociosos en esta isla.

Tenemos una casa y una familia,
que nos esperan en �taca.

Yo tambi�n, Eur�loco.
Yo tambi�n.

Cuando hayamos dado una nueva mano
de pintura a la nave, zarparemos.

- �No podemos esperar m�s!
- Ya hemos perdido demasiado tiempo.

Hemos puesto un nuevo m�stil,
nuevas velas.

La nave est� repleta de provisiones.
�Partamos, en seguida!

�Has olvidado, Euriloco,
que yo soy el capit�n?

No.

�Ven con nosotros!

�Ahora? �Tan pronto?

�C�mo tan pronto?
�Despu�s de seis meses!

�Seis meses?

�Tanto tiempo ha pasado!

Si me ha parecido un s�lo d�a.

- Entonces, �te decides?
- S�, claro.

Hermoso, �no es verdad?

He elegido yo el color.
Te sienta muy bien.

Es muy bello.

Mira, Euriloco. Debemos introducir
esta clase de tejidos en �taca!

- Ulises, nosotros partimos sin ti.
- S�, v�monos.

�Un momento! �No pod�is!

Neptuno ha jurado
hundir la nave de Ulises.

Esta noche desencadenar�
una terrible tempestad.

- �No te das cuenta de que siempre te ha mentido?
- �No ves que te enga�a?

Si le escuchas,
no saldremos nunca de aqu�.

Basta ya, Euriloco. Di a los hombres
que pinten la nave.

Nos haremos a la mar dentro de poco.

�Quieran los dioses darte la fuerza necesaria,
para romper el encanto que te ciega!

�Adi�s!

�No partir�n!
Son hombres valientes...

... pero sin m�, no saben hacer nada.

No zarpar�n.

�Circe!

�Circe!

�D�nde est�n mis compa�eros?
�La nave no est�!

�D�nde est�n?

�Mira!

- �Se han ahogado?
- S�, ahogados.

Muertos.

No han querido escucharte.

Eran mis compa�eros
y los he abandonado.

�Ellos son los que te han abandonado!

Los he abandonado.

Euriloco...
Polites... Leocrito...

No te lamentes en vano.
No val�an mucho.

- Eran unos pobres desgraciados.
- Precisamente, por eso los quer�a.

Mientras tu vivas,
no morir�n del todo.

Ven, entremos.

�Ulises!

�Qu� est�s haciendo?

�Piensas que podr�s dejarme
tan f�cilmente?

Hace ya mucho tiempo que
te he dejado.

Desde el d�a en que
murieron mis compa�eros.

�Y crees que tu viaje ser�
m�s largo que el de ellos?

No podr�s retenerme.

�Esc�chame!

Te dar� algo que te har� olvidar
tus mezquinos sue�os...

.. y tu m�sero reino,
tu mujer que envejece.

Qu�date y esta noche el Olimpo
conocer� un nuevo dios: �Ulises!

- �Inmortal!
- ��se es mi regalo!

El mejor regalo que jam�s
se haya hecho a un hombre.

No.

Hay dones mejores:

... nacer, morir y en el intervalo,
vivir como un hombre.

�S�, vivir como un hombre...
temblando de miedo!

S�lo quien tiene miedo, puede conocer
la grandeza del valor.

�Y la vejez: esa pobre carne debilitada?

Y al final la muerte. He ah�,
la terrible herencia de los hombres.

�Yo la acepto!

No me ilusiono pensando caer como un h�roe,
en una batalla o en el fragor de una tempestad.

Bastar� mucho menos.

Un malestar s�bito,
un poco de fr�o por la noche..

.. y, a pesar de todo, este fr�gil amasijo de miedos,
ha podido combatir a un dios...

.., y a�n no ha sido derrotado.

Y un d�a los hombres hablar�n
de mi con orgullo..

... porque fui uno de ellos.

�Ese orgullo no valdr� para darte
calor en el reino de las sombras!

�Yo te ofrezco siglos de luz!

No creo que me desagrade demasiado
cerrar los ojos..

- ... en el momento justo.
- �Preg�ntale a los muertos lo felices que son!

�Agamen�n! �Ayax! �Aquiles!
�Todos mis compa�eros muertos!

Aquiles, con el rostro
a�n ofendido y torvo.

�Qu� otro rostro puede tener
un hombre muerto?

Sin embargo la muerte
no debe afligirte.

T� ser�s ciertamente un rey
en el mundo de los muertos, Aquiles.

�Ah�rrate tus lamentaciones, Ulises!

Preferir�a ser un esclavo
de gente sin patria..

... antes que el rey de todos los muertos.

Mi vida
ha sido breve y gloriosa,

.. pero mi muerte es larga y pesada.

�Ayax! Me duele mucho
el haber provocado tu muerte.

�Qu� sabes t� del dolor, Ulises?
S�lo los muertos lo conocen.

Ven, Ulises, el Olimpo te espera.

�Ve con Circe a el Olimpo!

El mundo me ha amado.

Todo el mundo amaba a Agamen�n,
salvo la mujer que yo amaba.

Cuando volv� a casa,
me bes�..

... y cuando cerr� los ojos
con una sonrisa de placer,

.. su amante clav� el cuchillo traidor
en mi garganta.

- �Qu�date con Circe, Ulises"
- �Ven!

�Euriloco!

�No me reconoces, amigo?

Deb� continuar pintando la nave aquella noche,
en vez de partir sin ti.

- �Has sufrido?
- No.

- Es ahora cuando sufro.
- �Ven, Ulises.

�Ulises!

�Madre!

�Vete t�!
No te he llamado.

�Madre! �Has muerto?

- �He muerto esper�ndote!
- �Vete, te digo!

Has estado fuera
demasiado tiempo, hijo.

- Lo s�.
- Vuelve a �taca. Pen�lope a�n te espera.

El enga�o y los peligros
amenazan tu hogar.

S�, madre, volver�.
�Volver�!

�Madre!

�Madre!

�Obstinado mortal!

Orgulloso de ese breve sue�o,
que t� llamas vida,

... enamorado de tus debilidades
y de tus pecados,..

... fascinado por la muerte.

Contra una tal obstinaci�n,
ni a�n los dioses tienen poder.

Vete de mi lado, ya que as�
lo has preferido. El mar te espera.

- �Aqu� est�!
- �D�nde?

�Junto a las rocas!

�Alcinoo, rey de los Feacios, esc�chame!

Todo el pasado ha vuelto a mi memoria:
mi nombre y mi patria.

Yo soy Ulises, hijo de Laertes,
rey de �taca y destructor de Troya.

All� lejos, al otro lado del mar
esta mi casa, mi pueblo, mi hijo...

... mi esposa.

He viajado durante interminables a�os,
perseguido por la ira de los dioses.

He luchado contra la tempestad.
He o�do el canto de las Sirenas.

Fui hechizado.
Me he encontrado con los muertos.

Pero ahora estoy aqu�:
�vivo todav�a!

Al otro lado del mar.
mi patria me espera.

�Fraternal rey Alcinoo, dame
una nave para regresar a �taca!

�Ulises, rey de �taca eres nuestro vecino
y amigo. Te entregaremos una nave...

... y deseamos que ella te conduzca
felizmente hasta tu reino.

�Nausicaa,
llevar� tus l�grimas conmigo.

En un mundo de maldad y de odio
son un fruto del amor que en ti he hallado.

Te pedimos aceptes este sacrificio

As� honraremos a los dioses.
Apolo nos ser� propicio ma�ana.

Si venzo en los Juegos,
dormir� en el lecho de Ulises.

Y para agradecer al dios
que me haya ayudado...

..- har� sacrificar todas las cabras de la isla.

Has nacido para gobernar, Eur�maco.

Por eso te dispones a destrozar todo
en un solo d�a.

Yo no envidio al vencedor.

�Quieres decir que no vale la pena
convertirse en rey de �taca?

- El futuro rey de �taca deber� tener el sue�o ligero.
- �Qu� significa eso?

Habr� espadas detr�s de cada columna,
veneno en cada copa...

... traiciones a cada paso.
- Pero si Ulises est� en el fondo del mar..

... o bien yace despedazado por los buitres,
en cualquier playa.

- No es Ulises quien me preocupa.
- �A qui�n te refieres, entonces?

- A Tel�maco.
- �Pero si es un muchacho!

- �Hab�is mirado en el fondo de sus ojos?
- �Qu� quieres decir?

Despu�s de celebrar el matrimonio, sacrificaremos
algo m�s que cabras. �No creen?

�Pen�lope!

Perdona mi atrevimiento.

- Debo hablar contigo.
- �Y qu� quieres decirme?

Est�s triste,..

... asustada, turbada.

No debes estarlo, Pen�lope.
No debes tener miedo.

- Yo te dar� la felicidad.
- �Tu? - Si, seguro.

�No crees que vencer� ma�ana?

Depender� s�lo de tu valor.
Pero si vencieras,..

... no lamentar� tener que elegir
alguien como t�.

�Oh, por fin te expresas
como una mujer llena de vida...

... la mujer que deber�as ser...

... la mujer que yo amo.

Si verdaderamente me amas, Antinoo,
te pido un voto, una promesa.

Todo lo que desees.

No tienes mas que pedirlo.

�Salva a mi hijo!

- �A Tel�maco?
- �No debe morir!

Te prometo que nadie lo tocar�.

Lo proteger� como
si fuera mi propio hijo.

Si pudiera creerte...

�Debes creerme!

�Como tambi�n debes creer en mi amor!

En ti lo conf�o.

�Pen�lope!

Aqu� hay un mendigo que viene
de la isla de los Feacios...

... y dice que quiere hablarte de Ulises.

Demasiada gente en los �ltimos a�os
ha dicho lo mismo para recibir un regalo..

... o un d�a de hospitalidad.

Pero dice que fue compa�ero de Ulises,
durante la guerra.

Si verdaderamente has
conocido a mi esposo, h�blame de �l.

�Por qu� no hablas?

�Qui�n eres?

Soy un amigo de Ulises. �ramos compa�eros,
frente a los muros de Troya.

Muchas noches, a la espera
de la batalla...

... lleno de tristeza
me hablaba de ti.

�Y qu� te dec�a?

''Es morena''-dec�a-''espl�ndida
en su juventud...''

'' .. con una dulce y tierna sonrisa.
Tiene una manera muy peculiar de arreglarse..''

'' ... los cabellos con una mano, mientras
con la otra hila la lana...''

'' ... o mientras mira
al ni�o que duerme."

Algunas veces me hablaba
de su hijo, Tel�maco,..

... que dorm�a tranquilo y sonriente
en su cuna...

... el d�a en que nuestras naves
zarparon para Troya.

Otras veces me hablaba
del d�a de su partida...

... cuando t�, junto a la nave,
llorando entre sus brazos,

... le dijiste entre susurros:
''Estar� aqu� cuando regreses".

�Cuando regreses!

Y a veces por las noches,
mientras sobre los muros hostiles de Troya...

... brillaban las estrellas desconocidas
y todo cuanto am�bamos estaba m�s all� del mar,

... me hablaba de esta casa..

... y de esta estancia tuya,
en la que le estabas esperando.

Ya hace demasiados a�os que lo espero.

Al principio s�lo me llegaban
las noticias de la guerra...

... y la guerra no se acababa nunca.

Primero meses, luego a�os.

Y yo pasaba los d�as pregunt�ndome:
'' �D�nde estar� �l con sus soldados?''

O tal vez se hallar� entre mujeres bellas
y llenas de vida.

Quiz�s me haya olvidado.

Pero Pen�lope, en cambio es fiel.
Es tan f�cil para ella serle fiel.

Un buen d�a llegan noticias
de que la guerra ha terminado..

... y t� eres feliz.

Todos los dem�s vuelven a casa:
los reyes, los siervos... �Pero �l no!

��l �nicamente entre todos!

Y la espera comienza de nuevo.
Meses, a�os...

Y los a�os est�n hechos de miles
de horas, de d�as, de noches...

�De noches!

Y t� sola despierta en tu lecho vaci�,
esperando....

Tienes raz�n.

Quiz�s no se deba volver nunca
demasiado tarde.

�Espera!

Esc�chame un poco m�s.

Te he hablado con amargura, porque ma�ana
deber� elegir un nuevo esposo.

Y c�mo si viviera en una prisi�n,
estoy ligada a una promesa..

... de la que nadie podr� liberarme.

�T� misma podr�s liberarte!

�Yo? �Y c�mo?

�Recuerdas el d�a
en que te desposaste con Ulises?

Una flecha parti� de su arco
y atravesando los agujeros de doce hachas,

... hizo diana en el blanco.
- S� y el blanco era yo.

Aquel arco era pesado
y nadie lograba tenderlo.

S�lo Ulises pod�a hacerlo,
con la ayuda de la divina Atenea.

Te doy las gracias, extranjero.

Ve a la estancia de los hu�spedes
y tendr�s un lecho.

�Deseas alguna otra cosa?

Mi deseo est� cumplido.
ahora que te he visto y te he hablado.

- �Eres bienvenido a mi casa!
- Gracias.

�Argos!

�Me has reconocido!

Chss...

�Calla Argos!

�Calla!

S�, viejo amigo,
los dos hemos cambiado mucho.

�Recuerdas cuando �bamos de caza,
desde el alba al crep�sculo?

T� eras siempre el primero
en regresar:

... r�pido tras la pista
y feroz con la presa.

�Y ahora eres tan viejo, que no puedes
levantar la cabeza!

�Pero, me has reconocido!

Eh...

S�lo por ti, parece
cierto mi regreso.

�Te ha reconocido!

- �Qui�n eres?
- Tel�maco.

�Hijo m�o!

�Padre!

�Padre!

�Calla!

- �Nadie debe saber que estoy aqu�!
- No puedo esperar...

... se lo dir� a todos, les har�
palidecer, temblar..

No debes decirlo, hasta que
estemos preparados.

�Por qu� vienes vestido as�, padre?

�Por qu� vuelves a tu casa
como si fueras un extranjero?

Los dioses me han dado
tan sabio consejo...

... y otros muchos, adem�s de �ste.

�Y mi madre? Est� desesperada.

- �Dile que regresaste!
- �No!

Ni siquiera ella debe saberlo...

... nadie hasta ma�ana.

S�lo entonces podr� saber
si a�n ama a Ulises...

... como el d�a en que le despidi�
en el puerto de �taca.

�Qu� haces por aqu�?
�C�mo has entrado?

Como todos los mendigos,
por la puerta de servicio.

Vete inmediatamente o echar� los perros
contra ti. �Vamos, mu�vete!

- D�jame implorar caridad entre estos nobles.
- �No!

Tel�maco es mi amigo
y me lo permite.

Tel�maco no manda en esta casa.
�Vete!

Eleucano, deja que se acerque.
�Eh, t�! �Ven aqu�!

�Ven!

Tened caridad con
un hijo del infortunio,

... �oh nobles e ilustres pr�ncipes!

Caridad para un pobre desgraciado.

�Por qu� no vas a ped�rsela
a tu noble amigo Tel�maco?

�Podr�a no estar mucho tiempo
entre nosotros!

Los pobres siempre fueron bien acogidos
en la casa de Ulises.

�No s�lo eres andrajoso,
sino tambi�n insolente!

Hablas como si ya fueras el amo aqu�.
En esta casa todos somos hu�spedes.

�Fuera de mi vista, puerco!

Caridad para un hijo del infortunio.

aqu� tienes.

�Tienes sed?
�Pues Bebe!

Tal vez no quiere beber

Gracias mi se�or.
�Que los dioses os recompensen!

�Ten, toma esto,
pero vete de una vez!

Eres el mejor de todos ellos. M�rchate de aqu�,
antes de que sea tarde

Pero, �qu� dices? �Te has vuelto loco?
�Vamos! �Vete!

Hasta que los juegos no hayan
terminado, Antinoo,

... soy yo el que decide quien ha
de salir de esta casa.

�Tiene raz�n!
�Todav�a somos sus hu�spedes!

�Me alegro de verte, Tel�maco!

- Pero, dime, �qu� significan esas hachas?
- Es una idea de la reina...

- ... ella misma te lo explicar�.
- �Y d�nde est� la reina?

Ten un poco de paciencia, Antinoo.

Se est� vistiendo
como conviene a una futura esposa.

- Un hombre enamorado no suele tener paciencia.
- Es verdad, Antinoo.

Has dicho lo que todos
est�bamos pensando.

�La reina!

�Que los dioses te protejan!

Tu belleza resplandece entre nosotros..

.. come el sol en el cielo, Pen�lope.

Ha llegado el d�a elegido y aqu�
estoy dispuesta a cumplir mi promesa.

Me desposar� con el
vencedor de los juegos.

�Hemos esperado
ansiosamente este momento!

Para esta competici�n he elegido
un juego olvidado hace mucho tiempo.

�ste es el arco de Ulises.

Me desposar� con quien
sea capaz de tenderlo..

... y sea capaz de pasar una
flecha por entre las hachas.

�Pero esto no forma parte
de los juegos de Apolo!

Si tienes miedo de fracasar, puedes
retirarte de la competici�n, Antinoo.

Yo no tengo miedo, Pen�lope.

Acepto el desaf�o.

- Dadme el arco.
- He cruzado estos umbrales ya hace muchos a�os...

... para pedir su mano. Parece justo
que sea el primero en intentarlo.

Puedes ser tambi�n
el primero en fracasar.

No consigo..

... doblarlo.
- D�jame probar.

- Es in�til; es superior a mis fuerza
-Estas muy gordo Leodes.

Este arco est� maldito de los dioses.

D�melo.
Hay algo aqu�... que no puedo comprender.

�Apolo se ha ofendido! Nos ha quitado
nuestra fuerza de hombres.

�C�mo puede Apolo quitaros lo que
no tuvisteis nunca? �Dadme ese arco!

�Vamos!

Vamos, tu puedes.

Int�ntalo otra vez.

Esta vez si lo lograras.

Vamos tu puedes.
Tienes una fuerza sobrehumana.

- �Esto es un enga�o!
- �Como el tejido de Pen�lope!

�Yo no lo acepto!

�Te recuerdo tu promesa, Pen�lope!

�Puedo obtener permiso de la reina
para tender el arco?

�Osar�ais competir con nosotros?

Peor no podr� hacerlo.

�Hab�is o�do? El mendigo quiere medir
sus fuerzas con la nuestras.

Pen�lope, �te gustar�a que este andrajoso
fuera tu marido?

No temas, reina, no son tan altas
mis pretensiones. Ya tengo una mujer.

Si lo deseas, extranjero,
puedes intentar la prueba.

�No puede hacerlo!
�No debes permitirlo!

- �Es un mendigo! �Es una ofensa
para todos nosotros. �Una burla!

�Marchaos de aqu�!.

D�jenlo que intente.

La comedia ya ha durado demasiado.

Incre�ble.
Es imposible.

�Es Ulises!

�Pongan a la reina a salvo!

�D�jame! Ulises!

Padre.

�Vigila la otra puerta!

Antinoo, t� fuiste el primero
entre ellos:

... primero en orgullo,

.... primero en arrogancia.

�Ser�s tambi�n el primero en morir hoy!

�Antinoo! �Eumeo! �Eumeo!

�Por aqu�! �Toma!

�Dadme una lanza!

�No!

�Eur�maco! �Eur�maco! �Eur�maco!

�Nos han traicionado!

- �Maldito!
- �M�talo!

�Muere, Ulises!

�Tel�maco!

�No, Ulises!
�Piedad! �Ten piedad!

�Es tarde! Ya te lo advert�, jam�s perdono
la vida a un hombre dos veces.

�Te doy las gracias, Atenea!

Divina entre las diosas,
benefactora de esta tierra,

... t� que me has ayudado en la espera
y protegido a mi Ulises.

�Te doy gracias por su retorno!

Eran mis enemigos...

... pero ha sido terrible haber tra�do
la muerte a mi casa..

- ... precisamente el d�a de mi retorno.
- No ha sido culpa tuya, padre.

Diles a los criados que purifiquen
esta sala con el fuego.

- �Que la venganza de los muertos
no pueda alcanzarla! - S�, padre.

Se que su venganza, Atenea, ha sido justa
y al mismo tiempo terrible.

El Ulises que abrac� cuando zarp� la nave
era distinto:

.. no era feroz, no mataba.

�Cambia su rostro, Atenea...

... y devu�lvemelo tal como
lo conservaba mi recuerdo!

�Mi viaje de regreso a sido largo!

�Ulises!

El camino de regreso
ha sido largo y sangriento.

�Has vuelto, al fin!
Fueron muchos a�os..

Fueron muchos a�os que se han consumido
en la horrible hoguera de la guerra.

Igual que mi larga ausencia,
mis ilusiones y tu soledad...

- �Nunca deje de amarte!
- Te prometo,..

... que viviremos con tranquilidad los a�os
que ahora nos esperan.

�Si para siempre!

Estar� junto a ti para siempre.

EL POLVO DE LOS SIGLOS NO HA ATENUADO
LOS HECHOS HEROICOS DE ULISES ..

... LA CUEVA DE POLIFEMO TODAVIA RESUENA CON
LOS RUGIDOS DEL HIJO DE NEPTUNO...

LA TRISTE CARA DE PENELOPE TODAVIA
MIRA ANSIOSAMENTE A TRAVES DEL MAR ABIERTO....

Y EN UNA TIERRA DISTANTE CIRCE
AUN AROJA SU HECHIZO...

PARA ULISES LA INMORTALIDAD QUE RECHAZO
DE UNA DIOSA MAS TARDE FUE DADA A EL

POR UN POETA. Y EL POEMA EPICO QUE HOMERO
CANTO DE LAS ANDANZAS DEL HEROE

Y DE SU ANHELO DE VOLVER A CASA
VIVIRAN PARA SIEMPRE.